PROHIBIDO MIRAR A STALLONE

Cinco ex cocineros y asistentes de Sylvester Stallone y de su esposa, Jennifer Flavin, han presentado una denuncia en la que alegan haber sido despedidos por romper normas de disciplina establecidas por el actor, que, entre otras cosas, les prohib¨ªa mirarle directamente a los ojos o hablar con su madre, Jackie Stallone. Los trabajadores, que hab¨ªan sido contratados temporalmente por 15 d¨ªas en 1995, reclaman m¨¢s de 240 millones de pesetas por da?os y perjuicios, y alegan que fueron despedidos a los seis d¨ªas de entrar en la casa de Stallone. A los empleados de Rambo no les estaba permitido comer ni beber nada de la casa, seg¨²n figura en la demanda. Las limpiadoras eran obligadas a registrar las maletas de los hu¨¦spedes antes de que abandonaran la mansi¨®n de la pareja en Miami para comprobar si se llevaban toallas o art¨ªculos de plata. Y otra de las reglas de disciplina invulnerables: totalmente prohibido dirigirle la palabra a Jackie Stallone, la madre del actor, quien regal¨® por Navidad a cada uno de los empleados un bol¨ªgrafo y una foto con un aut¨®grafo suyo. Seg¨²n consta en la demanda, Jennifer Flavin acus¨® a los cinco de haberle robado todo esto a la madre de su esposo y los despidi¨® por dirigirse a ella. Por su parte, el abogado de los Stallone, Martin Singer, ha calificado la demanda de "pura ficci¨®n" y asegura que los cinco trabajadores fueron despedidos porque no realizaron su trabajo como se les hab¨ªa pedido.- ,