El espacio, motor de nuevas tecnolog¨ªas
ctubre de 1957 los rusos asombraban al mundo entero con una proeza t¨¦cnica muchos a?os so?ada por la humanidad. El primer sat¨¦lite artificial de la Tierra, el Sputnik 1, daba una vuelta a nuestro planeta cada 96 minutos 17 segundos, lanzando el famoso "blip, blip" que anunciaba la nueva de que nuestra especie hab¨ªa conseguido llegar al espacio. Desde entonces la investigaci¨®n, utilizaci¨®n y exploraci¨®n del espacio han marcado una ¨¦poca que con justicia se ha calificado como la era del espacio.Gracias a las sondas, sat¨¦lites y naves espaciales hemos logrado unos conocimientos del entorno de la Tierra, del sistema solar y del cosmos como no hab¨ªamos conseguido en toda la historia. Esta nueva visi¨®n del Universo representa una revoluci¨®n intelectual de tal naturaleza que sus implicaciones dejar¨¢n profundas huellas en el contexto cient¨ªfico y filos¨®fico del saber.
Una vez que hemos conocido con detalle el entorno de nuestro planeta, es f¨¢cil comprender que en ¨¦l hay unas condiciones ideales para usarlo en beneficio de nuestra calidad de vida. Desde el espacio tenemos una visi¨®n global de la Tierra que nos permite ver lo que est¨¢ sucediendo en cada momento en todo el planeta, lo cual nos puede ayudar a gestionar y controlar el uso de los recursos naturales, predecir desastres o alertar sobre tendencias poco favorables al medio ambiente producidas por el mal uso o abuso de estos recursos. Desde determinadas posiciones del espacio podemos comunicarnos con todos los habitantes del planeta. Finalmente, en el espacio podemos conseguir ambientes de casi ingravidez, lo que permite realizar ciertos experimentos y fabricar ciertos productos que no podemos realizar en la Tierra. Adem¨¢s el hombre quiere explorar personalmente el espacio, quiere ver con sus propios ojos, y sentir con todos sus sentidos sus maravillas. La exploraci¨®n del espacio es una actividad compleja porque el cuerpo humano es el resultado de millones de a?os de evoluci¨®n sometido a la fuerza de la gravedad. Para conseguir llevar nuestros instrumentos, equipos y personas al espacio es preciso contar con lanzadores que nos permitan compensar la fuerza de atracci¨®n gravitatoria de la Tierra.
Cualquiera de las cuatro ¨¢reas de actividad que he mencionado demanda logros tecnol¨®gicos ambiciosos ya que rondan las fronteras que permiten las leyes f¨ªsicas. Las estructuras de los sat¨¦lites tienen que ser ligeras, soportar las duras vibraciones de los cohetes lanzadores, y estar dise?adas para mantenerse en ambientes de vac¨ªo extremado con radiaciones solares y c¨®smicas, y grandes variaciones de temperatura. Los cient¨ªficos que desean investigar los objetos celestes exigen la m¨¢xima sensibilidad y resoluci¨®n en sus instrumentos para ver y detectar los m¨¢s insignificantes detalles. Los investigadores y gestores de los recursos terrestres precisan t¨¦cnicas muy avanzadas de detecci¨®n, obtenci¨®n y proceso de datos. La electr¨®nica embarcada en los sat¨¦lites de comunicaciones tiene que llegar a los l¨ªmites en miniaturizaci¨®n tanto de circuitos como de elementos receptores y transmisores de potencia. Las naves de transporte y los laboratorios y estaciones tienen que permitir confortabilidad y seguridad para los astronautas que vivir¨¢n en un ambiente muy hostil. Los motores cohete tienen que ser de alto rendimiento permitiendo transportar la mayor cantidad de carga ¨²til al menor coste.
La humanidad se beneficia de estos desarrollos tecnol¨®gicos al ser utilizados en otros ¨¢mbitos. Los nuevos materiales pueden ser utilizados en la fabricaci¨®n de m¨²ltiples productos de uso diario. La medicina hace uso de la gran sensibilidad de los sensores de rayos X, de los nuevos desarrollos del l¨¢ser, de las microbombas implantables y de otra serie de elementos que dif¨ªcilmente hubieran podido desarrollarse fuera del espacio. Las agencias espaciales han intentado contabilizar los desarrollos espaciales hoy utilizados fuera de este campo y son del orden de 40.000.
La Academia de Ingenier¨ªa ha organizado un seminario para tratar precisamente de estos temas. Los d¨ªas 13 y 14 de diciembre, en el Instituto de Ingenier¨ªa de Espa?a, expertos en algunas de las actividades antes mencionadas, de las agencias espaciales m¨¢s prestigiosas como la NASA y la ESA, presentar¨¢n temas tan apasionantes como los futuros sistemas de transporte espacial, sucesores del transbordador, el programa Origins para detectar, entre otras cosas, si la vida se origin¨® fuera de la Tierra, o las fronteras de lo posible en los viajes espaciales de seres humanos. El seminario terminar¨¢ con una mesa redonda donde las empresas espa?olas del sector espacial debatir¨¢n sus logros y proyectos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.