Cientos de pasajeros se amotinan en Barajas en un d¨ªa de caos a¨¦reo

La niebla se pos¨® en Barajas a las once de la noche del viernes y no se levant¨® hasta el mediod¨ªa. La visibilidad en ese tiempo fue inferior a los 200 metros de distancia, el m¨ªnimo para tomar tierra en el aeropuerto madrile?o, lo que oblig¨® a reducir el n¨²mero de movimientos por hora para mantener la seguridad en aterrizajes y los despegues. En lugar de los 65 habituales, tuvo que trabajar con la mitad. Esta reducci¨®n hizo que las demoras se fueran acumulando. A las doce de la ma?ana, la niebla empez¨® a disiparse y se increment¨® el n¨²mero de salidas y llegadas.Los aviones m¨¢s antiguos, unos 20, que no llevan el sistema de aterrizaje instrumental (el llamado ILS, que se utiliza en condiciones de reducida visibilidad) fueron desviados a los aeropuertos de Salamanca, Alicante y Valencia. Un avi¨®n de Santiago de Compostela que ten¨ªa previsto aterrizar en Madrid, tuvo que hacerlo en Alicante a la una de la madrugada. Los 150 pasajeros pasaron la noche en vela hasta que a las seis de la ma?ana Iberia pag¨® 60 taxis para llevarles a Madrid.

Los responsables de Barajas aseguraron que, pese a la niebla, se hab¨ªa mantenido la actividad durante toda la jornada El director del aeropuerto, Jos¨¦ Manuel Hesse, dijo a Efe que "cuando aparece la niebla se generan dos problemas: uno es que el aeropuerto debe reducir en torno a un 30% o 40% el n¨²mero de operaciones a la hora para garantizar que no se produzcan situaciones de riesgo, y el otro es que algunas compa?¨ªas no tienen aviones ni tripulaciones preparadas para operar con baja visibilidad".

Los primeros incidentes a causa de los retrasos comenzaron a las tres de la madrugada del s¨¢bado, cuando 500 pasajeros de dos aviones con destino a Tenerife y uno a Palma de Mallorca protestaron por las m¨¢s de diez horas de retraso de los vuelos de Air Europa. Estos viajeros, que se negaron a ir en autob¨²s a Salamanca, presentaron denuncias ante la comisar¨ªa y se instalaron en los mostradores de facturaci¨®n. La Guardia Civil tuvo que apaciguarles.

Los 138 viajeros de un vuelo con destino a Marraquech que ten¨ªa que haber salido a las 23.55 del pasado viernes permanec¨ªan ayer en el aeropuerto. Tras pasar la noche en vela sin comer ni beber, a las cuatro de la tarde denunciaron el retraso ante la Guardia Civil. "Nadie nos atendi¨®, nos dejaron tirados, no nos proporcionaron ni vales de comida ni ning¨²n tipo de informaci¨®n. Fue a las seis de la ma?ana cuando nos ofrecieron ir a alg¨²n hotel", dijo Juan Santos en nombre del resto de pasajeros. El vuelo no sali¨® ayer del aeropuerto. "Creemos que no hab¨ªa avi¨®n y que nos han intentado enga?ar", dijo Santos.

Los pasajeros de un vuelo de Iberia a Buenos Aires sufrieron otro v¨ªa crucis al salir con diez horas de retraso, al igual que viajeros con destino a Marsella, que despegaron con m¨¢s de ocho horas de demora debido a que el avi¨®n en el que ven¨ªa la tripulaci¨®n auxiliar desde Valencia lleg¨® con retraso por la niebla.

Para algunos, el calvario se prolong¨® fuera de Espa?a. Treinta y seis espa?oles que volaban con KLM y que salieron con m¨¢s de dos horas de retraso de Barajas se quedaron en Amsterdam tras perder los vuelos de enlace. Los viajeros denunciaron formalmente el trato "vejatorio" a que fueron sometidos.

Barajas. Tres de la madrugada. La terminal nacional e internacional de embarque repleta. Cientos de pasajeros tirados en butacas a causa de los retrasos originados por la niebla, pero ni un solo bar abierto. "Es una verg¨¹enza c¨®mo un aeropuerto que dicen que es internacional no tenga ni siquiera una cafeter¨ªa para atender a la gente", se quejaba ayer Ignacio de Blas. "Adem¨¢s, las m¨¢quinas de comida se han quedado vac¨ªas y no hemos podido tomar nada", a?ad¨ªa otra mujer.Contaba ayer Aurelio S¨¢nchez que a las seis de la ma?ana cuando abrieron las cafeter¨ªas hubo empujones y peleas por tomar un caf¨¦ o un bocadillo.

A las cinco de la tarde de ayer, el enfado era enorme tanto entre los jugadores de un equipo de f¨²tbol sala de Santander como entre los del Real ?vila, que a¨²n no sab¨ªan si podr¨ªan llegar a Las Palmas para jugar sus respectivos partidos. "Deber¨ªamos haber llegado a Canarias a la una de la madrugada del s¨¢bado y 14 horas despu¨¦s estamos aqu¨ª atrapados", dijo uno de los deportistas. "Pagamos un dineral por un billete y encima nadie nos da soluciones", denunciaba Miguel P¨¦rez, t¨¦cnico en fotocopiadoras.

En el alboroto, un piloto de Spanair justificaba el caos de la niebla y calmaba a los presentes: "Cuando hay bruma no hay ni dios que aterrice".