Aznar acusa a los nacionalistas vascos de estar m¨¢s cerca de la limpieza ¨¦tnica que del euro

Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar acus¨® ayer en el Congreso a las direcciones de los partidos nacionalistas vascos de "estar m¨¢s cerca de la Europa de Kosovo, que representa la exclusi¨®n y la limpieza ¨¦tnica, que de la Europa del euro, que representa la integraci¨®n y el pluralismo". El presidente denunci¨® una "estrategia nacionalista", cuyo objetivo es lograr la independencia de Euskadi y en la que ETA "seguir¨¢ reserv¨¢ndose el derecho a matar". Compar¨® la actitud del PNV con la de los primeros ministros brit¨¢nico y franc¨¦s en 1938, cuando intentaron, sin ¨¦xito, parar a Hitler con cesiones para evitar la Segunda Guerra Mundial.

El presidente del Gobierno aprovech¨® la conmemoraci¨®n del 21 aniversario de la Constituci¨®n para alertar sobre la situaci¨®n creada en el Pa¨ªs Vasco tras la decisi¨®n del PNV y Eusko Alkartasuna (EA) de ofrecer a Euskal Herritarrok (EH) la negociaci¨®n de un proyecto soberanista como estrategia pol¨ªtica para impedir que ETA consuma la ruptura de la tregua.Aznar ya se hab¨ªa referido a esta cuesti¨®n en la rueda de prensa que ofreci¨® el s¨¢bado en Berl¨ªn. Pero ayer en el Congreso de los Diputados hizo un amplio an¨¢lisis de la estrategia nacionalista, en el que ofreci¨® nuevas claves y duras cr¨ªticas hacia las direcciones del PNV, EA y EH. Desvel¨® que, a su juicio, los nacionalistas y ETA han planteado un reto muy serio para la Constituci¨®n y el futuro plural de Euskadi.

Seg¨²n explic¨® Aznar, un d¨ªa despu¨¦s de que ETA asesinara al concejal del PP de Ermua (Vizcaya) Miguel ?ngel Blanco, en julio de 1997, algunos dirigentes del PNV, EA y EH "empezaron a trabajar para dinamitar lo que se llam¨® el esp¨ªritu de Ermua porque no lo pod¨ªan soportar". A esos dirigentes nacionalistas "no les preocupaba ETA, sino la expresi¨®n de integraci¨®n y pluralidad que representaba Ermua", a?adi¨® en referencia a las movilizaciones populares contra la banda. Aludi¨®, as¨ª, al temor del nacionalismo en su conjunto a que esta marea social contra ETA tambi¨¦n les anegase.

El presidente a?adi¨® que los partidos nacionalistas y ETA han elaborado desde entonces una estrategia compartida en varias fases. La primera de ellas fue la tregua indefinida de la banda terrorista -iniciada el 18 de septiembre de 1998 y rota el pasado d¨ªa 3- a cambio de un compromiso soberanista suscrito entre las direcciones de las tres formaciones pol¨ªticas y la propia banda. La segunda fase ser¨ªa la actual, caracterizada, seg¨²n Aznar, por responsabilizar al Gobierno y a los partidos no nacionalistas de la ruptura del alto el fuego. En este contexto situ¨® el sondeo que el Gobierno vasco public¨® el domingo, seg¨²n el cual el 70% de los vascos acusa al Ejecutivo de Aznar de "inmovilismo" en el proceso de paz.

En la tercera fase, los nacionalistas intentar¨¢n, seg¨²n el presidente, "llevar a todos los vascos a una nueva mesa -distinta a las de Ajuria Enea y Lizarra- en la que se discuta cu¨¢ndo el Pa¨ªs Vasco ejercer¨¢ la autodeterminaci¨®n. Y en la ¨²ltima fase se fijar¨¢ la fecha de ese ejercicio. En la tercera fase, sigui¨® Aznar, los nacionalistas aspiran a que "una vez trasladados los terroristas a las c¨¢rceles del Pa¨ªs Vasco, sean liberados, y entren en ellas los dem¨®cratas que cumplen con la Constituci¨®n".

Aznar estima que durante este proceso, en el que ETA combinar¨¢ el cese del alto el fuego con el regreso a las armas, la banda "se seguir¨¢ reservando el derecho a matar".

En este sentido, compar¨® la actitud de la direcci¨®n del PNV y EA ante ETA con la de los primeros ministros brit¨¢nico y franc¨¦s, Chamberlain y Daladier, quienes en 1938 hicieron cesiones territoriales a Hitler, con el Pacto de M¨²nich, para tratar de pararle y evitar la Segunda Guerra Mundial. "Chamberlain y Daladier fueron recibidos como h¨¦roes, pero unos meses despu¨¦s estallaba la guerra. Hoy, la respuesta a la amenaza de ETA no puede ser la misma. Darle la raz¨®n en parte para frenarle, como han hecho los partidos nacionalistas, es repetir los errores que llevaron a la Segunda Guerra Mundial. Ceder a un chantaje de semejante rango es un error hist¨®rico de consecuencias extraordinarias, y la responsabilidad de algunos dirigentes nacionalistas es grave". "Igual que Hitler, ETA no quiere la paz", a?adi¨®.

La conclusi¨®n del presidente del Gobierno, en clave actual, es que "resulta asombroso" que los partidos nacionalistas "pretendan estar m¨¢s cerca de la Europa de Kosovo, que representa la exclusi¨®n, la intolerancia y la limpieza ¨¦tnica, que de la Europa del euro, la de la integraci¨®n y la pluralidad".

Precis¨® que en Euskadi hay "una manifestaci¨®n expresa de exclusi¨®n" en sus dos variantes: "f¨ªsica, por la aniquilaci¨®n y la muerte, y pol¨ªtica, que apuesta por un proyecto de pa¨ªs s¨®lo para los nacionalistas" que tiene su expresi¨®n en el Pacto de Lizarra y en el pacto entre los partidos nacionalistas. Y apel¨® a la responsabilidad de los simpatizantes del nacionalismo que "no est¨¢n de acuerdo con eso por muy desorientados que est¨¦n algunos de sus dirigentes".

Aznar manifest¨®, a rengl¨®n seguido, que "no hay alternativa posible ni razonable a la Espa?a constitucional". Y asegur¨® sentirse "optimista" sobre el resultado final de la ofensiva nacionalista y garantiz¨® la defensa de la Constituci¨®n. "Nada ni nadie pasar¨¢ barreras infranqueables".