CiU arranca al PP m¨¢s derechos para los inmigrantes legales a costa de los 'sin papeles'

La Comisi¨®n Constitucional del Senado aprob¨® ayer, con los exclusivos votos del PP y CiU, la proposici¨®n de Ley de Extranjer¨ªa, sustancialmente modificada con m¨¢s de un centenar de enmiendas pactadas entre esos dos grupos. El nuevo texto, que requiere una mayor¨ªa absoluta en el Congreso para quedar refrendado, es mucho menos generoso con los inmigrantes que el aprobado por unanimidad en la C¨¢mara baja el pasado 25 de noviembre, pero no llega a los extremos restrictivos que pretend¨ªa el Grupo Popular con las 112 enmiendas que present¨® el martes.CiU ha arrancado importantes mejoras para los inmigrantes legales -sobre todo, en comparaci¨®n con la vigente ley de 1985-, a los que se reconoce, por ejemplo, el derecho al reagrupamiento familiar, que no ser¨¢ potestativo de la Administraci¨®n, as¨ª como el ejercicio de los derechos de asociaci¨®n, reuni¨®n, manifestaci¨®n, sindicaci¨®n y huelga, entre otros, en las mismas condiciones que los espa?oles.

Los grandes sacrificados del pacto han sido, sin embargo, los extranjeros en situaci¨®n irregular, a los que el proyecto inicial pretend¨ªa equiparar parcialmente con los inmigrantes legales, bas¨¢ndose en la Declaraci¨®n Universal de Derechos Humanos, y a los que s¨®lo se reconoce el acceso a la sanidad, la educaci¨®n obligatoria y las prestaciones sociales b¨¢sicas, que ya estaban en el texto del Congreso y ni siquiera el PP se atrevi¨® en enmendar.

El mecanismo de regularizaci¨®n permanente de todos inmigrantes que puedan acreditar dos a?os de permanencia en Espa?a desaparece. En su lugar, se dar¨¢ la residencia legal a quienes hayan tenido un permiso temporal y lo renovasen en una ocasi¨®n, en vez de dos como propuso el PP. A esta medida no podr¨¢n acogerse los inmigrantes que llegan en patera ni los que entran con un visado tur¨ªstico y luego se quedan. Unos y otros tendr¨¢n que seguir en la clandestinidad, pues el PP y CiU han endurecido el cap¨ªtulo de sanciones, incluyendo la expulsi¨®n de irregulares, lo que no figuraba en el texto que aprob¨® el Congreso.

El portavoz del Grupo Catal¨¢n, Josep L¨®pez de Lerma, justific¨® el olvido de los sin papeles alegando que ninguna ley puede premiar su incumplimiento y que "no existe ning¨²n pa¨ªs en el mundo al que uno pueda entrar ilegalmente y tener derechos".

El otro punto del proyecto que preocupaba especialmente al Gobierno era la necesidad de justificar la denegaci¨®n de visados, lo que abr¨ªa la v¨ªa a los recursos judiciales. El nuevo texto se remite a la Ley de Procedimiento Administrativo, que permite recurrir cualquier acto de la Administraci¨®n, aunque esta remisi¨®n resulta poco ¨²til, ya que los tribunales dif¨ªcilmente pueden juzgar una decisi¨®n sin conocer el motivo por el que se ha tomado.

El Grupo Catal¨¢n ha conseguido que en dos supuestos, como excepci¨®n, haya que motivar la denegaci¨®n del visado: cuando afecte a permisos de residencia para reagrupaci¨®n familiar o se disponga de una oferta de trabajo por cuenta ajena.

El pacto se cerr¨® a altas horas de la madrugada del viernes, durante una reuni¨®n que se celebr¨® en la sede central del PP, entre L¨®pez de Lerma, el vicepresidente primero del Gobierno, Francisco ?lvarez Cascos, y el portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Luis de Grandes, en contacto telef¨®nico con el subsecretario de Interior, Leopoldo Calvo-Sotelo.El acuerdo se plasm¨® por la ma?ana en el Senado, donde CiU apoy¨® 71 de las 112 enmiendas del PP. Otras 35 fueron transaccionadas y cinco m¨¢s retiradas; entras ellas, la disposici¨®n adicional que modificaba la Ley de Asilo y Refugio de 1994.

El portavoz popular en el Senado, Estaban Gonz¨¢lez Pons, se mostr¨® satisfecho del acuerdo, pese a reconocer que se han rebajado sus enmiendas. L¨®pez de Lerma se felicit¨® por haber "reconducido" el giro regresivo que el PP pretend¨ªa dar a la ley, consiguiendo un texto que "apoya la integraci¨®n social de los inmigrantes" y reduce "la discrecionalidad" de la Administraci¨®n.

El resultado, agreg¨®, es una "fotocopia borrosa" de la proposici¨®n que CiU present¨® en el Congreso en 1998, por lo que todos sus objetivos "se han cumplido". Tras negar cualquier relaci¨®n entre este acuerdo y el respaldo del PP catal¨¢n a la investidura de Jordi Pujol, concluy¨®: "Lo ¨²nico que nos ha dado el Gobierno son quebraderos de cabeza".