"Si tengo alg¨²n problema con el FBI lo interpretar¨¦ como gajes del oficio"
Pocas horas despu¨¦s de sacar adelante las reformas del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI), organismo que preside desde hace m¨¢s de 19 a?os, Juan Antonio Samaranch, de 79, est¨¢ al borde de otra batalla ins¨®lita para ¨¦l: comparecer ante el Congreso de los Estados Unidos, el pa¨ªs que m¨¢s le ha atacado, pero tambi¨¦n al que m¨¢s necesita como gran fuente econ¨®mica del negocio ol¨ªmpico. El esc¨¢ndalo de la corrupci¨®n en el COI ha remitido por un lado, pero puede volver a levantarse por otro.Pregunta. ?Perdi¨® la esperanza alguna vez de poder enderezar la situaci¨®n?
Respuesta. No. Para eso hicimos un calendario. Ya dije que la soluci¨®n ten¨ªa que llegar antes del final de a?o para entrar en el siguiente con un COI renovado. Todo ha salido perfectamente. La clave ha sido que la confianza que los miembros depositaron en m¨ª en marzo ha tenido una continuaci¨®n ahora. Han renunciado a una serie de derechos y prerrogativas. Eran imposibles de mantener. Repito lo que dicho hace algunas semanas. Comparo la crisis del COI con el incendio del Liceo de Barcelona. Entonces fue un desastre, todo el mundo lloraba...?Qu¨¦ pas¨®? Pues que al cabo de seis a?os los reyes de Espa?a inauguraron un nuevo Liceo mejor que el de antes. Creo que el COI de hoy, tras los cambios, es mejor que el de antes.
P.Ha recibido ataques de fuera del COI y de dentro. ?Cu¨¢les le preocuparon m¨¢s?
R.Los de fuera afectan, pero su importancia es relativa. Lo importante es lo que pasa dentro. Si estos cambios no se hubieran aprobado, no habr¨ªa tenido m¨¢s remedio que marcharme.
P. ?Temi¨® por su marcha?
R.Bueno, no. No he tenido tiempo de pensar en ello. S¨®lo sab¨ªa que o esto iba adelante o yo sobraba. Si sabiendo lo empecinado que yo estaba, la propuesta no sale, es que los miembros del COI me hab¨ªan retirado su voto de confianza.
P. ?Cu¨¢ntas veces se ha arrepentido de no haberse retirado antes, por ejemplo tras los Juegos de Barcelona?
R.No s¨¦, se ver¨¢ al final de mi mandato. Tal vez hace unos meses, tres o cuatro, s¨ª podr¨ªa estar muy arrepentido. Ahora, quiz¨¢ mucho menos si soy el presidente que puede pasar a la historia como el que cambi¨® de arriba abajo el COI. Lo m¨¢s importante ha sido la entrada de 10 atletas en activo. De 112 miembros ahora, 39 han participado en unos Juegos. A ver qu¨¦ organizaci¨®n puede ofrecer este r¨¦cord.
P. Ya se escuchan cr¨ªticas sobre que los cambios no son suficientes.
R. ?Qu¨¦ m¨¢s se puede hacer? Los que dicen que no es suficiente es que piden que me vaya. Y yo me ir¨¦ cuando me tenga que ir, que es el 16 de julio del a?o 2001, en Mosc¨², en el mismo sitio y en la misma fecha en que fui elegido en 1980.
P. Y ahora viaja al pa¨ªs donde m¨¢s le atacan...a la boca del lobo..
R. No s¨¦ si me meter¨¦ en la boca del lobo, pero mi obligaci¨®n es ir a Estados Unidos, un pa¨ªs muy importante dentro del movimiento ol¨ªmpico. Y si su Congreso quiere hacerme unas preguntas yo estoy dispuesto a contestarlas.
P. ?No hab¨ªa ninguna otra raz¨®n para retrasar su presencia all¨ª que esperar a las reformas?
R. Es que una comparecencia m¨ªa antes pod¨ªa desorientar y destrozar el programa que ten¨ªamos previsto en el COI. Como es natural, yo ten¨ªa esperanzas de que la Sesi¨®n ser¨ªa positiva. Y llegar ahora con los acuerdos en el bolsillo cambia radicalmente mi posici¨®n.
P.Se le nota muy confiado.
R. Siempre puede haber sorpresas, pero m¨¢s cosas de las que se han dicho contra m¨ª ya no se pueden decir. Que voy a mi oficina en helic¨®ptero, que exijo una alfombra roja al bajar del avi¨®n, que fui embajador de Espa?a en Mosc¨² nombrado por el general Franco, cuando ¨¦ste nunca tuvo relaciones diplom¨¢ticas con la URSS. Eso es desconocer la pol¨ªtica contempor¨¢nea de nuestro pa¨ªs. Y contesto como siempre: los problemas de los espa?oles los tenemos que resolver en Espa?a. Resolvimos perfectamente esos a?os, y despu¨¦s hemos tenido suerte con los pol¨ªticos que han liderado el cambio y, sobre todo, con el coordinador de todo, el Rey, el que me nombr¨® embajador. Pero repito que somos los espa?oles los que debemos resolver nuestros problemas y no un periodista extranjero. Y me duele, lo s¨¦ por experiencia, que no te puedes pelear con la prensa. Tiene armas que nosotros no tenemos. Si te atacan lo ¨²nico que puedes hacer es aguantar. Pero es una tonter¨ªa desmentir. Primero porque no lo van a publicar, y despu¨¦s porque todo el mundo sabe lo que he hecho en mi pa¨ªs. Y mejor que yo casi.
P. Despu¨¦s de viajar a Estados Unidos a entrevistarse con los presidentes como si usted fuera casi un jefe de estado, ahora debe hacerlo para declarar por un esc¨¢ndalo. ?Qu¨¦ sensaci¨®n le deja?
R. La de que tengo la obligaci¨®n de ir, que debo ir. Como es comprensible, despu¨¦s de estos cinco d¨ªas de reuniones intensas, y a los 79 a?os, la verdad es que no estoy en plena forma para ir a Estados Unidos.
P. ?Lleva bien preparada la comparecencia?
R. No, me preparar¨¦ durante el viaje, que es largo. V¨ªa Londres y Nueva York, y adem¨¢s en avi¨®n de l¨ªnea regular, que para los trayectos largos me es m¨¢s c¨®modo. Y en cuanto a las preguntas no s¨¦, pero las m¨¢s f¨¢ciles seguro que ser¨¢n las pol¨ªticas.
P. Parece que no est¨¢ descartado alg¨²n problema con el FBI.
R. Si lo hay, lo interpretar¨¦ como gajes del oficio. Pero mi gente ha llegado a un acuerdo para que el viaje, no la comparecencia, sea normal.
P. ?Garant¨ªas al m¨¢s alto nivel?
R. Creo que s¨ª. Esto es lo que me ha dicho mi gente. Yo no he intervenido, pero conf¨ªo siempre en mi gente.
P. ?Y el regresar al d¨ªa siguiente a Espa?a es por una raz¨®n de verdad o una estratagema?
R. Es verdad. Me dijeron que fuera el d¨ªa 15 y les contest¨¦ que s¨ª, pero que ten¨ªa que volver esa misma noche porque el d¨ªa 16 ten¨ªa que estar en Barcelona. Es la cena final de a?o con la gente y los consejeros de La Caixa, personas a las que aprecio much¨ªsimo.
P. En cualquier caso, la influencia pol¨ªtica externa ha empujado al COI hacia los cambios. ?Hasta d¨®nde podr¨¢ llegar a mandar la pol¨ªtica en el deporte?
R. Hay ya ciertos movimientos en Francia y Reino Unido, pero yo creo que la direcci¨®n del deporte seguir¨¢ siendo independiente. Y si no lo es, mala cosa. El ¨¦xito del deporte est¨¢n en manos de su gente, mucha de ella voluntaria. Pero no s¨¦ lo que pasar¨¢ en el futuro porque aqu¨ª empieza a cobrar todo el mundo. Los tiempos en los que un directivo acud¨ªa a la sede de un club de siete a nueve, como si fuera la pe?a de un caf¨¦, se han acabado. Hoy d¨ªa los dirigentes tienen que ser gente muy preparada, muy profesionalizada. Y si les tienen que pagar, ?por qu¨¦ no?
P. Despu¨¦s de tantas acusaciones, la pregunta es inevitable. ?Se ha hecho millonario con el COI?
R. No soy millonario por el COI, ni mucho menos. S¨®lo soy un hombre al que le pagan los gastos y nada m¨¢s. Adem¨¢s, siempre he llevado la misma vida, y creo que todo el mundo la conoce. Una vida bien, pero discreta. No tengo ni yates, ni grandes coches, ni grandes fincas, ni nada de nada. Lo que poseo lo tengo por mi familia y por mi trabajo. He tenido la suerte de poder seguir en Espa?a en sitios importantes y bueno, no me arrepiento de lo que he hecho. Tengo la conciencia tranquila. Lo he pasado muy bien durante 18 a?os y mal durante uno. En fin, 18-1 es un buen resultado.
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