El Prado compara a Vel¨¢zquez con Rubens y Van Dyck como pintores cortesanos
El museo abre el domingo por la tarde para la exposici¨®n, de 44 cuadros, algunos desconocidos
Un "mano a mano a mano" entre Vel¨¢zquez, Rubens y Van Dyck es lo que propone el historiador e hispanista Jonathan Brown al reunir 44 cuadros de los tres pintores cortesanos del siglo XVII. El Museo del Prado ha vuelto a modificar una parte de la galer¨ªa central de la primera planta para exponer las identidades y diferencias entre los modelos que impusieron los tres artistas en las cortes europeas. El museo ampliar¨¢ el horario y abrir¨¢ los domingos por la tarde mientras dure la muestra, hasta el 5 de marzo, una medida que el Ministerio de Educaci¨®n y Cultura quiere ampliar a todo el a?o.
La falta de salas para exposiciones temporales -el patronato del Prado aprob¨® ayer el proyecto de Moneo para la ampliaci¨®n del museo hacia el claustro de los Jer¨®nimos, donde figuran esos espacios- ha obligado a mover los cuadros de la galer¨ªa central para instalar el proyecto de Jonathan Brown para conmemorar el cuarto centenario del nacimiento de Vel¨¢zquez.La exposici¨®n Vel¨¢zquez, Rubens, Van Dyck. Pintores cortesanos del siglo XVII forma parte de las actividades del aniversario, que comenzaron el mes de julio con la apertura de las nuevas salas de Vel¨¢zquez, dentro de la reordenaci¨®n del plan museogr¨¢fico. El ministro de Educaci¨®n y Cultura, Mariano Rajoy, anunci¨® ayer que se hab¨ªa llegado a un acuerdo con el comit¨¦ de empresa para la prolongaci¨®n del horario del museo los domingos, que, como el resto de la semana, permanecer¨¢ abierto de nueve de la ma?ana a siete de la tarde y de forma gratuita. La intenci¨®n es que el acuerdo se extienda a todo el a?o.
Vel¨¢zquez est¨¢ situado, en la nueva disposici¨®n de la colecci¨®n permanente, entre la pintura espa?ola del siglo XVII y la pintura flamenca. El director, Fernando Checa, considera la exposici¨®n como una forma de enmarcar a Vel¨¢zquez en el contexto de la Europa del siglo XVII y en la obra de otros pintores cortesanos en la primera mitad de ese siglo, que conoci¨® el encuentro personal entre Vel¨¢zquez y Rubens durante su viaje a Espa?a.
La exposici¨®n re¨²ne 44 obras, de las que 15 pertenecen al Prado. De Vel¨¢zquez se expone el retrato de Felipe IV en pardo y plata, regalo de Jos¨¦ Bonaparte, que sale por primera vez de la National Gallery de Londres. Brown destaca otras piezas velazque?as poco vistas en Espa?a, como el pr¨ªncipe Baltasar Carlos y un enano, de Boston; el retrato Juan Mateos, de Dresde, y el retrato de joven, de M¨²nich, que est¨¢ inacabado. De Rubens viene el matrimonio m¨ªstico de Santa Catalina, de Toledo (Ohio), y el triunfo de Enrique IV, de Nueva York, y de Van Dyck, el autorretrato con girasol (cartel de la muestra de su centenario en Amberes y Londres). Un boceto de Rubens tambi¨¦n sale por primera vez del Pushkin.
El montaje se ha dividido en cinco secciones: autorretratos, la monarqu¨ªa, el retrato cortesano, mitolog¨ªa y f¨¢bula y la religi¨®n y la fe. Jonathan Brown destaca como aspecto novedoso la comparaci¨®n entre los tres artistas y la propuesta "interactiva" para interpretar las respuestas que dan "los tres grandes hombres" a los modelos ideales en las cortes de Londres, Bruselas y Madrid.
"Los tres eran grandes aficionados a la pintura de Tiziano, como se puede ver en la secci¨®n dedicada a la pintura mitol¨®gica", dice Brown. "El pintor cortesano tiene el deseo de glorificar la monarqu¨ªa, y cada uno lo hace de forma diferente. Rubens es el m¨¢s intelectual y el que utiliza un lenguaje m¨¢s simb¨®lico. Van Dyck coloca a la monarqu¨ªa inglesa en un ambiente superrefinado y transforma al rey, a la reina y a la corte en un mundo m¨¢gico. Vel¨¢zquez, que es cortesano durante 37 de sus 60 a?os, en la corte de Felipe IV, transforma las venerables iconograf¨ªas con una t¨¦cnica audaz y novedosa. Hay que mirar de cerca esa t¨¦cnica asombrosa, la m¨¢s innovadora de los tres, a pesar de pintar en la corte m¨¢s antigua con las f¨®rmulas ya establecidas. De hecho, en este retrato de Felipe IV se puede sustituir la cabeza y se convierte en Felipe II. Esta concentraci¨®n de obras maestras es dif¨ªcil de ver, y estar rodeado de estos grandes pintores es un lujo".
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.