Con acento americano
Sin duda alguna, las vedettes del congreso 60 a?os despu¨¦s han sido los cinco escritores exiliados que han tenido tiempo de acudir a ¨¦l. Tiempo por sus obligaciones cotidianas (los cinco ejercen la docencia en universidades americanas), pero sobre todo tiempo cronol¨®gico, ya que, sesenta a?os despu¨¦s, buena parte de los que abandonaron el pa¨ªs en 1939 han fallecido o son gente de edad avanzada. Manuel Dur¨¢n, Jos¨¦ Ricardo Morales, Carlos Blanco Aguinaga, Angelina Mu?iz y Adolfo S¨¢nchez V¨¢zquez (Ram¨®n Xirau, convaleciente, suspendi¨® el viaje a ¨²ltima hora, aunque mand¨® su intervenci¨®n), sin embargo, hicieron gala de su merecido prestigio de eruditos. En vez de contar batallitas, se ci?eron al lema del congreso: hablar sobre la obra de otros autores. Manuel Dur¨¢n, que ley¨® la ponencia inaugural sobre tres ilustres compa?eros de oficio y de destierro (Josep Carner, Agust¨ª Bartra y Pere Calders), es un verdadero paradigma. Ten¨ªa 14 a?os cuando su familia se lo llev¨® a Ciudad de M¨¦xico. All¨ª se dedic¨® a la literatura como estudioso y como creador (40 libros publicados, de los cuales media docena son de poes¨ªa), hasta que lo llamaron de Yale para dar clases. Ahora lleva 30 a?os en Estados Unidos y no olvida su condici¨®n de exiliado: "A veces me asalta la tentaci¨®n de volver, claro, pero... Mis hijos viven en los Estados Unidos, mi esposa es norteamericana, y yo... bueno, yo all¨ª hago mucho por la cultura catalana: he sido presidente de la North-American Catalan Society, ahora soy presidente de honor, y fui fundador de la Catalan Review. Y adem¨¢s mis hijos todav¨ªa hablan catal¨¢n, aunque se les nota el acento, eso s¨ª".
Dur¨¢n, sin embargo, a?ade que a menudo el exiliado se siente mejor tratado en el pa¨ªs de adopci¨®n que en el de origen, y pone como ejemplo el caso de Xirau: "En M¨¦xico se le considera un pensador de primer orden, incluso Octavio Paz dijo de ¨¦l que era un verdadero hombre puente sobre el Atl¨¢ntico. Aqu¨ª, en cambio, s¨®lo ha conseguido que le dediquen una calle en Figueres. Y ya es mucho, porque la mayor¨ªa ni eso".
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