La agencia francesa de alimentos pide que se proh¨ªba la pesca a pie y la venta de moluscos por la marea negra

La Agencia Francesa para la Seguridad Sanitaria de los Alimentos (AFFSA), el mismo organismo que ha recomendado mantener el embargo de la carne de buey brit¨¢nica por el mal de las vacas locas, desaconsej¨® ayer que se comercialicen las almejas o cualquier molusco parecido capturados en las costas bretonas despu¨¦s de la llegada de la marea negra causada por el petrolero Erika. Adem¨¢s, la agencia francesa de seguridad sanitaria pide a las autoridades que "proh¨ªban la pesca a pie" en los m¨¢s de 400 kil¨®metros afectados por el fuel escapado del vientre del buque hundido frente a las costas bretonas.Algunos de los criadores de ostras de la regi¨®n ya han anunciado que van a destruir su producci¨®n debido a que las zonas marinas en las que crece dicho marisco no hab¨ªan podido ser protegidas. "El agua presenta reflejos extra?os, las irisaciones propias del fuel, y en la arena hay peque?as manchas negras. No es dif¨ªcil imaginar qu¨¦ aspecto tendr¨¢n nuestras ostras", conclu¨ªa un ostricultor.

En su comunicado, la AFSSA hace constar que a¨²n no conoce la composici¨®n exacta del producto que conten¨ªan los dep¨®sitos del Erika, pero relativiza la importancia del riesgo para la salud, ya que es altamente improbable que "las concentraciones de vanadio, a priori el elemento m¨¢s inquietante, puedan ser t¨®xicas", afirma el citado organismo.

En cualquier caso, a los elementos misteriosos que rodean el naufragio del Erika -la propiedad del barco, la calificaci¨®n de la tripulaci¨®n, el destino final del combustible y las razones del hundimiento- se han sumado ahora filtraciones sobre la instrucci¨®n del sumario judicial.

Un abogado brit¨¢nico, radicado en Par¨ªs, intent¨® en un primer momento hacerse con el libro de a bordo y, al no conseguirlo, lo que s¨ª hizo fue conminar al silencio al capit¨¢n de barco, Karun Mathur, que se volvi¨® desde ese momento menos cooperativo con la justicia.

Se sabe tambi¨¦n que el capit¨¢n Mathur pidi¨®, el pasado octubre, que el Erika fuese objeto de una revisi¨®n a fondo. Su reclamaci¨®n se centraba en la situaci¨®n de dos partes del casco, en las que hab¨ªa detectado un importante fen¨®meno de corrosi¨®n. El Registro Italiano Navale (Rina) consider¨® que no hab¨ªa riesgo alguno. El barco se rompi¨® el 12 de diciembre por los puntos que se?al¨® Mathur, seg¨²n los informes provisionales sobre el accidente.

El historial del Erika tambi¨¦n va saliendo a flote y ya no es un secreto que en los ¨²ltimos 24 a?os ha cambiado siete veces de nombre, ha enarbolado cinco banderas distintas y ha sido explotado por nueve sociedades navieras.