Propuesta de autodeterminaci¨®n

Ninguna de las 206 enmiendas a los textos que guiar¨¢n la acci¨®n pol¨ªtica del PNV en los pr¨®ximos a?os alterar¨¢ el giro acelerado que ha emprendido el partido de Xabier Arzalluz desde posiciones autonomistas hacia la autodeterminaci¨®n y el llamado "soberanismo". Del debate previo han prosperado 138 enmiendas a la ponencia pol¨ªtica y 68 al anexo Reconocer el ser para decidir, textos que ser¨¢n aprobados ma?ana, tras su debate, en la III Asamblea Nacional. Sin embargo la enmienda m¨¢s cr¨ªtica con ese giro, la presentada por el ex diputado general de ?lava y recientemente afiliado de nuevo al PNV, Emilio Guevara, ni siquiera fue aprobada en su asamblea regional.La ponencia pol¨ªtica establece un marco general de actuaci¨®n que gira en torno a la superaci¨®n del Estatuto de Gernika. El inicio de su debate y, fundamentalmente, la aproximaci¨®n estrat¨¦gica hacia HB -que se formaliz¨® tras la firma de la Declaraci¨®n de Lizarra y el alto el fuego de ETA- comenzaron a provocar las primeras discrepancias en el seno del PNV. Pero la vinculaci¨®n de este giro a la consecuci¨®n de la paz ha puesto sordina a las cr¨ªticas internas, que s¨®lo han aflorado espor¨¢dicamente pese a ser compartidas por un sector considerable del partido.

Proyecto soberanista

Tras la ruptura de la tregua por parte de ETA, Xabier Arzalluz hizo p¨²blico que su partido iba a debatir internamente un anexo a la ponencia pol¨ªtica en el que se concretaba c¨®mo superar el actual marco jur¨ªdico y avanzar hacia la autodeterminaci¨®n. Es un texto en cuya redacci¨®n participaron el portavoz de la ejecutiva, Joseba Egibar, persona de confianza del lehendakari Juan Jos¨¦ Ibarretxe, y el consejero de Interior, Javier Balza, quien ya colabor¨® de manera intensa en la redacci¨®n de la Declaraci¨®n de Barcelona. El anexo marca el camino hacia la consolidaci¨®n de un nuevo marco jur¨ªdico que permita a los territorios de Euskadi, Navarra y el Pa¨ªs Vasco franc¨¦s decidir su futuro pol¨ªtico unidos, y al margen de los dos Estados a los que pertenecen, mediante plebiscitos territoriales. El portavoz del PNV, Joseba Egibar, explicaba recientemente que ser¨ªa conveniente que los nacionalistas articulasen un proyecto com¨²n y ese plebiscito "en esta legislatura".

El anexo que aprobar¨¢ ma?ana el PNV se basa en la Disposici¨®n Adicional Primera de la Constituci¨®n, que ampara los derechos hist¨®ricos vascos; en la Adicional ?nica del Estatuto de Gernika, referida a la posibilidad de actualizar los derechos hist¨®ricos, y en el art¨ªculo 2 del mismo Estatuto, que menciona el derecho de Navarra a unirse a otras provincias. El PNV los considera puertas que la propia legalidad establece para llegar al desarrollo de una soberan¨ªa plena. Es decir, considera que los derechos hist¨®ricos amparados por esas leyes, Constituci¨®n, Estatuto y Amejoramiento del Fuero pueden actualizarse hasta el punto de regular un refer¨¦ndum en el que la sociedad vasca, navarra y vasco francesa decidiera cu¨¢l es su modelo de pa¨ªs y de relaciones con el resto de Espa?a y Francia.

El PNV aclara, no obstante, que de forma previa a la adopci¨®n de cualquier iniciativa pol¨ªtica deben cesar todas las manifestaciones de violencia. Luego ya justifica que el hecho de partir del actual entramado jur¨ªdico diferencia sustancialmente su propuesta del proyecto de HB, que propone crear una Asamblea Constituyente tras un proceso electoral conjunto en Euskadi, Navarra y Francia.

El proceso que propone el PNV para llegar al plebiscito incluye crear en primer lugar un foro de todos los partidos en el que se consensue un modelo. Acto seguido se debatir¨ªa en las instituciones vascas "como referentes fundamentales para su reconocimiento efectivo y desarrollo", y tras su aprobaci¨®n en los Parlamentos vasco y navarro, se iniciar¨ªa el proceso de reforma del actual marco jur¨ªdico para darle encaje.

A la Asamblea General (congreso) asisten 650 afiliados, de los que 431 tienen derecho a voto, que reelegir¨¢n el domingo como presidente a Xabier Arzalluz. A continuaci¨®n se reproduce ¨ªntegro el anexo Reconocer el ser para decidir.

I.RECONOCIMIENTO DEL SER PARA DECIDIR

1.1.El derecho de la sociedad vasca a definir su propio futuro.

El Pueblo Vasco es el depositario de la decisi¨®n o decisiones que sobre su futuro pol¨ªtico y sobre la articulaci¨®n de sus relaciones pol¨ªticas con los Estados espa?ol y franc¨¦s pueda adoptar.

El principio de que al Pueblo Vasco le corresponde decidir su futuro est¨¢ impl¨ªcito en la misma libertad de pensamiento y de opci¨®n pol¨ªtica y es el aspecto nuclear de la declaraci¨®n que sobre el Derecho de Autodeterminaci¨®n realiz¨® el Parlamento Vasco en febrero de 1990.

En consecuencia,

Desde la capacidad de ser y decisi¨®n del Pueblo Vasco defendemos el objetivo del reconocimiento nacional de Euskadi, para que el Pueblo Vasco, desde la condici¨®n de ser sujeto protagonista de su propia historia, pueda establecer el status pol¨ªtico y jur¨ªdico que considere necesario y oportuno.

Apostamos por el desarrollo pol¨ªtico y social de un autogobierno integral, pleno y propio, promoviendo en clave nacional acciones pol¨ªticas, sociales e institucionales.

Desde la legitimidad hist¨®rica y pol¨ªtica del derecho del Pueblo Vasco a un status pol¨ªtico propio, debemos promover las condiciones para que la sociedad vasca, como protagonista de sus decisiones, participe activamente en el dise?o del proyecto pol¨ªtico que defina tanto su articulaci¨®n interna como la relaci¨®n externa, estableciendo el status pol¨ªtico y cuadro de poder que el Pueblo Vasco, en un momento hist¨®rico como el actual, necesita para las pr¨®ximas d¨¦cadas.

EAJ-PNV parte de la realidad pol¨ªtica y de los marcos jur¨ªdicos vigentes y, respetando ambos -realidad y marcos-, y consecuente con su l¨ªnea fundacional, apuesta inequ¨ªvocamente por el desarrollo de un ¨¢mbito jur¨ªdico-pol¨ªtico que abarque a todos los vascos y contenga el respeto efectivo a su ser nacional y a la realidad hist¨®rica, cultural y ling¨¹¨ªstica, as¨ª como el derecho a definir su propio futuro, su articulaci¨®n interna y su relaci¨®n externa.

1. 2.Un proceso pol¨ªtico dirigido a la normalizaci¨®n definitiva de la convivencia pol¨ªtica.

A fin de llevar a cabo estos principios a la pr¨¢ctica pol¨ªtica, procede iniciar y desarrollar un proceso pol¨ªtico. Un proceso pol¨ªtico cuya base es el reconocimiento del ser del Pueblo Vasco, el reconocimiento del ser para decidir, y cuyo objetivo ser¨¢ alcanzar, mediante el consenso social suficiente, la normalizaci¨®n definitiva de la convivencia pol¨ªtica. Por ello, situamos la clave de este proceso en la sociedad vasca, en su voluntad libremente conformada y expresada.

Como tal proceso pol¨ªtico, parte de una situaci¨®n pol¨ªtica establecida a otra por definir por la sociedad vasca para su futuro. Y debemos tener en cuenta la distinta situaci¨®n con la que contamos en este momento respecto a la transici¨®n habida al final de la d¨¦cada de los setenta. Part¨ªamos entonces de la negaci¨®n absoluta de la existencia de un Pueblo Vasco; de todas las presiones pol¨ªticas, sociales, econ¨®micas y militares derivadas de la dictadura y de la inexistencia de todo referente institucional propio. Este proceso pol¨ªtico lo desarrollamos desde una conciencia de identidad pol¨ªtica afianzada, aunque con diversa implantaci¨®n territorial; unas instituciones propias cercanas al ciudadano desde las que orientar la acci¨®n pol¨ªtica y un importante fondo d¨¦ poder de acci¨®n p¨²blica en la mayor¨ªa del territorio y poblaci¨®n.

Con estas bases de partida, el leg¨ªtimo objetivo como nacionalistas de alcanzar el reconocimiento de la identidad nacional de Euskadi es m¨¢s posible que nunca en la historia de nuestro pueblo.

1. 3.Situaci¨®n pol¨ªtica de la que se parte.

Los aspectos sustanciales de la situaci¨®n pol¨ªtica actual son:

Existen marcos institucionales con importante capacidad de autogobiemo en Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa, fruto todo ello del sistema de autonom¨ªa asumido en el Estatuto de Gernika y en el Amejoramiento. Adem¨¢s de estas realidades, existe tambi¨¦n un importante elemento de singularidad pol¨ªtica como es el fundamental reconocimiento de un sujeto colectivo con derechos propios y preexistentes a la Constituci¨®n espa?ola de 1978, mediante la combinaci¨®n de las Disposiciones Adicionales.

EAJ-PNV no s¨®lo parte del respeto a estas realidades pol¨ªticas, sino que se siente part¨ªcipe de ellas, por cuanto que, por su posici¨®n electoral mayoritaria y por las responsabilidades de gobierno que viene asumiendo, ha desempe?ado un papel clave en su implantaci¨®n, desarrollo y en la prestaci¨®n de pol¨ªticas p¨²blicas avanzadas a los ciudadanos.

Existiendo ese entramado institucional y capacidad de autogobierno, su grado de desarrollo es diferente en el conjunto de Euskal Herria. La evoluci¨®n pol¨ªtica institucional y el grado de desarrollo del autogobierno es distinto en la Comunidad Aut¨®noma del Pa¨ªs Vasco y en la Foral Navarra, careci¨¦ndose de referentes institucionales similares en los territorios de Iparralde.

Existe un diverso grado de implantaci¨®n y extensi¨®n de la conciencia nacional vasca entre los ciudadanos de los seis territorios de Euskal Herria.

1. 4.Claves del proceso pol¨ªtico.

Los conceptos fundamentales en los que se sustenta el proceso pol¨ªtico a desarrollar, son:

Soberan¨ªa. El objetivo es consolidar un marco pol¨ªtico y jur¨ªdico en el que el sujeto colectivo del Pueblo Vasco en su integridad tenga afirmado y definido el derecho pleno a decidir su futuro pol¨ªtico. El reconocimiento del derecho de autodeterminaci¨®n y su consolidaci¨®n en los textos pol¨ªticos b¨¢sicos que conformen la c¨²spide del ordenamiento jur¨ªdico resultante.

Territorialidad. A pesar de la diversidad institucional y, tambi¨¦n, de las diferencias derivadas de los sistemas constitucionales espa?ol y franc¨¦s, lo cierto es que Euskal Herria se define por ser una comunidad innegable de profundas ra¨ªces hist¨®ricas, culturales, ling¨¹¨ªsticas y sociales.

Nuestra forma de entender el concepto de territorialidad es que, con respeto al diverso grado de desarrollo de la conciencia nacional en los seis territorios, de su capacidad de decisi¨®n y de su libre adhesi¨®n, el resultado del proceso pol¨ªtico que nos comprometemos a llevar a cabo suponga que todos, ciudadanos y territorios, puedan incorporarse al sujeto pol¨ªtico Pueblo Vasco, removiendo y superando los obst¨¢culos y creando las condiciones jur¨ªdico-pol¨ªt¨ªcas necesarias para que tal derecho pueda ejercerse.

El elemento territorial del proceso pol¨ªtico significa, as¨ª entendido, crear una opci¨®n constitucional hoy inexistente, pero perfectamente deducible del reconocimiento y garant¨ªa de los Derechos Hist¨®ricos del Pueblo Vasco. Opci¨®n consistente en que la pertenencia a la comunidad socio-cultural vasca pueda implicar, tambi¨¦n, el reconocimiento de derechos pol¨ªticos colectivos correspondientes a un sujeto pol¨ªtico, si ¨¦sa es la voluntad de los respectivos ciudadanos.

Sociedad. Un pueblo y una conciencia nacional no se crea por el establecimiento de un determinado entramado institucional. Las instituciones, incluidas las de car¨¢cter nacional, como m¨¢xima representaci¨®n de los vascos, son la consecuencia de que el pueblo alcanza la madurez pol¨ªtica que significa la existencia de una conciencia nacional com¨²n y diferenciada de otras circundantes. Por lo tanto, el elemento fundamental es la extensi¨®n y afirmaci¨®n de la conciencia nacional (la apuesta por el ser) en el conjunto de los ciudadanos de Euskal Herria.

Por ello, la acci¨®n pol¨ªtica a desarrollar, consecuencia de este proceso pol¨ªtico, debe ser planteada y debatida en todo Euskal Herria, si bien debe reconocer y tener en cuenta las diversas realidades y situaciones pol¨ªticas diferenciadas de los territorios que la componen pues, en caso contrario, se hurtar¨ªa la voz real de nuestra sociedad.

El proceso parte as¨ª, por un lado, de que Euskal Herria es una Naci¨®n y como tal es depositaria de derechos pol¨ªticos y, por otro, de que las realidades institucionales actuales son distintas, como tambi¨¦n es distinta la pluralidad de identidades concurrentes en la sociedad vasca. Tan real es la afirmaci¨®n nacional como la diversidad del entramado institucional y la pluralidad de identidades. Nuestro proyecto pol¨ªtico se sustenta en el conjunto de estos principios, sin primar unos sobre otros.

1. 5.Fundamentos del proceso.

El proceso de normalizaci¨®n de la convivencia pol¨ªtica tiene que partir, seg¨²n nuestro criterio, de los siguientes fundamentos o presupuestos:

De la paz. Con car¨¢cter previo a cualquier iniciativa pol¨ªtica deben cesar definitivamente todas las manifestaciones de violencia y coacciones o amenazas. No puede abordarse un proceso pol¨ªtico de esta envergadura sin un escrupuloso respeto a los derechos humanos de todas las personas. Y ello, tanto desde una concepci¨®n ¨¦tica de la apuesta por las v¨ªas pol¨ªticas y democr¨¢ticas, como por la propia legitimidad del proceso. S¨®lo a partir de un escenario completo de paz podemos construir el futuro pol¨ªtico de Euskal Herria sobre bases de libertad y de libre adhesi¨®n.

Del reconocimiento y consolidaci¨®n del Pueblo Vasco como sujeto dotado de identidad propia y de capacidad de decisi¨®n de su futuro pol¨ªtico.

Del reconocimiento de la integridad territorial de Euskal Herria como base f¨ªsica del sujeto pol¨ªtico, entendido este principio en la forma analizada anteriormente, partiendo del respeto de la diversa situaci¨®n existente, tanto en lo social como en lo institucional, en las diferentes partes integrantes de Euskal Herria.

La integridad territorial debe ser un principio pol¨ªtico del proceso y el procedimiento de acci¨®n impulsado por los nacionalistas debe ir dirigido a promover la conciencia de integridad territorial all¨ª donde m¨¢s d¨¦bil se manifiesta. Pero, en todo caso, esa conciencia de integridad territorial debe plantearse y entenderse en t¨¦rminos de igualdad pol¨ªtica de los territorios, de voluntad asociativa y no en t¨¦rminos de absorci¨®n.

Y, para promover estas condiciones se trabajar¨¢ en el establecimiento de niveles de relaci¨®n pol¨ªtica entre las partes integrantes de Euskal Herria, removiendo los obst¨¢culos jur¨ªdicos-pol¨ªticos existentes en los ordenamientos espa?ol y franc¨¦s y en los respectivos Estatuto y Amejoramiento.

Del reconocimiento de la pluralidad de identidades de la sociedad vasca, en la que coexisten muy diversas conciencias nacionales y con diferente grado de implantaci¨®n territorial.

De la utilizaci¨®n exclusiva de procedimientos democr¨¢ticos, con la correspondiente aceptaci¨®n por parte de todos (vascos, espa?oles, franceses y sus correspondientes instituciones y poderes), de la voluntad libre y democr¨¢ticamente expresada por la sociedad vasca.

De la extensi¨®n del proyecto de convivencia pol¨ªtica por la libre adhesi¨®n de los vascos.

II.PROCESO POL?TICO: PROCEDIMIENTO

PARA SU DESARROLLO

El procedimiento para desarrollar el proceso pol¨ªtico es, a juicio de EAJ-PNV, tan importante como los proyectos materiales que para esta sociedad tienen los diversos partidos pol¨ªticos que configuran su representaci¨®n.

Por ello, el procedimiento debe estar abierto desde los momentos iniciales al conjunto de los agentes pol¨ªticos y sociales, a fin de garantizar la oportunidad de participaci¨®n y el libre contraste de ideas.

Con estos principios, presentamos como bases del procedimiento, las siguientes:

1.Iniciativa.

EAJ-PNV est¨¢ dispuesto a asumir la iniciativa de este procedimiento, promoviendo su puesta en marcha y presentando al conjunto pol¨ªtico y social su proyecto pol¨ªtico.

2.Colaboraci¨®n nacionalista.

Partiendo de la legitimidad de un proyecto nacionalista y de su bondad para el progreso de la sociedad vasca, ofrecemos a las dem¨¢s formaciones nacionalistas que, de com¨²n acuerdo y desde la diferencia y el respeto mutuo, contrastemos, debatamos y acordemos las bases de este proyecto, sus contenidos, modos y ritmos.

3.Pluralidad pol¨ªtica.

Si hay un concepto que define a la sociedad vasca es la pluralidad, tanto en sus identidades nacionales como en los proyectos de articulaci¨®n interna y externa.

Por ello, el reconocimiento y respeto de la pluralidad de la sociedad vasca constituye un elemento b¨¢sico en s¨ª mismo, que debe tenerse en cuenta en todo momento del procedimiento y en el desarrollo de cualquier proyecto pol¨ªtico.

4.Normalizaci¨®n pol¨ªtica.

Siendo leg¨ªtima la iniciativa y colaboraci¨®n nacionalista, en aras de la normalizaci¨®n pol¨ªtica y de la cohesi¨®n social se proceder¨¢, desde un momento inicial, a la apertura, presentaci¨®n y debate de las cuestiones relativas al procedimiento que permita desarrollar y contrastar los respectivos proyectos pol¨ªticos al conjunto de la representaci¨®n pol¨ªtica, asumiendo el compromiso de tratar estas cuestiones en el foro o foros que se constituyan para favorecer el di¨¢logo pol¨ªtico general, base y fundamento del final dialogado, participado y cohesionado del con flicto pol¨ªtico que afecta a Euskal Herria.

5.Participaci¨®n social.

La sociedad vasca viene demostrando un alto grado de madurez y cohesi¨®n superior al que se obtiene de las relaciones entre los partidos pol¨ªticos. Entendemos, as¨ª, necesaria la participaci¨®n social, a trav¨¦s de sus agentes, asociaciones, entidades, etc¨¦tera, desde los momentos iniciales y de manera coet¨¢nea con el debate pol¨ªtico, abriendo tambi¨¦n a estos ¨¢mbitos el contraste sobre los procedimientos y posibilitando la pre-sentaci¨®n y consideraci¨®n de los respectivos proyectos pol¨ªticos.

6.Papel de las Instituciones.

Una vez articulado un procedimiento completo tras el contraste y debate con los agentes pol¨ªticos y sociales, las actuales Instituciones se constituir¨¢n en los referentes articuladores fundamentales para el reconocimiento efectivo y desarrollo de los proyectos pol¨ªticos.

III.BASES DEL PROYECTO

DE EAJ-PNV

En el desarrollo de este proyecto pol¨ªtico, EAJ-PNV se compromete a mantener un esencial equilibrio entre la iniciativa y leg¨ªtimo impulso de la ideolog¨ªa nacionalista y la salvaguarda de la cohesi¨®n social, garantizada por la opci¨®n de participaci¨®n de las fuerzas pol¨ªticas representativas de otros pensamientos y proyectos para la sociedad vasca, y la apertura del debate a esta misma sociedad mediante sus agentes e interlocutores.

1.Definici¨®n del sujeto pol¨ªtico.

El Pueblo Vasco, Euskadi o Euskal Herria, configura una realidad hist¨®rica, ling¨¹¨ªstica y cultural com¨²n que pertenece por igual a todos los ciudadanos y ciudadanas de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa, Lapurdi, Nafarroa y Zuberoa. El Pueblo Vasco y los Territorios que lo integran constituyen, por tanto, una realidad diferencial y preexistente a los ordenamientos espa?ol y franc¨¦s y, como tal, est¨¢ dotado de personalidad e identidad propias.

2.Reconocimiento del "ser" de Euskadi.

El desarrollo del r¨¦gimen de autonom¨ªa en la Comunidad Aut¨®noma Vasca y en la Foral Navarra no supone renuncia del Pueblo Vasco a los derechos que le corresponden en virtud de su historia y de su voluntad de autogobierno. Y en sus derechos pol¨ªticos se incluye el derecho de autodeterminaci¨®n y su ejercicio, definido conforme a los principios declarados por el Parlamento Vasco en febrero de 1990.

3.Territorialidad de Euskadi.

Los territorios vascos podr¨¢n, en funci¨®n de la voluntad de sus respectivos ciudadanos, establecer cualquier modalidad de relaci¨®n institucional, superando en funci¨®n de los derechos hist¨®ricos de los territorios de Euskadi-sur, la prohibici¨®n federativa establecida en el art¨ªculo 145.1 de la Constituci¨®n espa?ola.

En este sentido, para el estudio de distintas f¨®rmulas de relaci¨®n, imbricaci¨®n, colaboraci¨®n interterritorial, resulta imprescindible potenciar foros de reflexi¨®n y deliberaci¨®n.

4.Acci¨®n concertada de electos municipales: Udalbiltza.

Desde la afirmaci¨®n de la existencia de Euskal Herria como Naci¨®n, dando testimonio de su territorialidad, impulsando la construcci¨®n nacional, entendida como proceso din¨¢mico y democr¨¢tico y sustentado en la libre participaci¨®n y decisi¨®n de las ciudadanas y ciudadanos vascos, avanzando en el proceso de interrelaci¨®n constructiva entre los municipios de todos los territorios, apostamos por la acci¨®n concertada de los representantes municipales a trav¨¦s de Udalbiltza.

5.Contenido material del actual autogobierno.

Las Comunidades Vasca y Navarra deben asumir de manera inmediata y global el conjunto de contenidos competenciales que les corresponden conforme al Estatuto y Amejoramiento, con respeto total a los elementos singulares, tanto pol¨ªticos como financieros, que los definen y caracterizan.

6.Presencia y participaci¨®n en la Uni¨®n Europea.

En una primera fase, la necesaria actualizaci¨®n de los derechos hist¨®ricos en el contexto europeo actual requiere la presencia directa de la Comunidad Aut¨®noma Vasca y Comunidad Foral Navarra en la Uni¨®n Europea, en representaci¨®n y defensa tanto de su identidad singular, como de sus competencias y pol¨ªticas p¨²blicas.

Del reconocimiento de la existencia de Euskadi-Euskal Herria como sujeto pol¨ªtico se deduce la necesaria articulaci¨®n de mecanismos y decisiones que hagan efectivo dicho reconocimiento ante y en la Uni¨®n Europea.

7.Articulaci¨®n del Proyecto Pol¨ªtico.

El desarrollo de este conjunto de bases se articular¨¢ en un proyecto pol¨ªtico que ser¨¢ el resultado del debate abierto y promovido en el conjunto de la sociedad vasca y con la m¨¢xima participaci¨®n de los agentes pol¨ªticos, econ¨®micos, sindicales, sociales y culturales.

Este proyecto pol¨ªtico se confeccionar¨¢ en un plazo a determinar desde la apertura del proceso pol¨ªtico en los Parlamentos Vasco y Navarro.

Este proyecto debiera contener como m¨ªnimo: 1) El desarrollo articulado de las presentes bases, 2) el sistema de relaciones internas y externas de Euskadi-Euskal Herria, articulado, en todo caso, con la perspectiva del proceso de la Uni¨®n Europea, y 3) el contenido material del autogobierno pol¨ªtico, su fondo de poder y el sistema de garant¨ªas para su preservaci¨®n tanto en las relaciones internas como externas.

8.Consolidaci¨®n jur¨ªdica del Proyecto.

Una vez elaborado el Proyecto Pol¨ªtico se iniciar¨¢ el proceso de reforma pertinente en los marcos jur¨ªdicos vigentes, sometiendo en todo caso, el proyecto o proyectos resultantes a consulta y/o refer¨¦ndum de la ciudadan¨ªa vasca.

Sabin Etxea, 20 de diciembre de 1999