Josu Ternera, en libertad a la fuerza

El d¨ªa que la polic¨ªa francesa lo detuvo en Bayona, 11 de enero de 1989, la pistola que portaba fue enviada a Madrid para que los expertos de bal¨ªstica determinaran si hab¨ªa sido disparada alguna vez para matar a alguien. Estaba limpia. Josu Ternera, nombre de guerra de Jos¨¦ Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, es quiz¨¢s el terrorista m¨¢s escurridizo de la historia de ETA. No s¨®lo para la polic¨ªa, tambi¨¦n para los jueces.La prueba es que el Tribunal Supremo lo dej¨® en libertad el pasado viernes 14, tras m¨¢s de tres a?os en prisi¨®n preventiva, por falta de pruebas nuevas para juzgarlo. Desde que a principios de 1971, con 20 a?os reci¨¦n cumplidos, huyera a Francia para alistarse en ETA, Josu Ternera no ha dejado de agrandar su leyenda. La del terrorista m¨¢s sanguinario para unos; la del h¨¦roe m¨¢s valiente, para otros. Una u otra cosa, pero sin huellas en su pistola.

La carrera de Josu Ternera dentro de ETA es mete¨®rica. En 1971 huy¨® a Francia, en 1973 volvi¨® para asaltar el polvor¨ªn de Hernani y participar as¨ª en el asesinato del almirante Luis Carrero Blanco. Ya en 1975 accedi¨® a la direcci¨®n de ETA y en 1981 se convirti¨® en responsable del aparato internacional de la banda terrorista. Tres a?os despu¨¦s, en 1984, ya fue el n¨²mero dos tras la detenci¨®n de Eugenio Etxebeste, Antxon. Seg¨²n la polic¨ªa, hay un hecho dram¨¢tico en la historia de ETA que tambi¨¦n protagoniza Ternera, nunca con sus propias manos, siempre bajo su supervisi¨®n. En septiembre de 1986, el sector marxista leninista de la banda, identificado con ¨¦l, decidi¨® asesinar a la etarra Dolores Gonz¨¢lez Catarain, Yoyes, como castigo a sus deseos de reinsertarse. En septiembre de 1987, y tras escapar de una redada de la polic¨ªa francesa, se convirti¨® en el n¨²mero uno de la banda, a id¨¦ntico nivel que Francisco M¨²gica, Pakito, y Javier Zabaleta.

Josu Ternera destac¨® entonces, seg¨²n la polic¨ªa, por ser el terrorista m¨¢s sanguinario. Su liderazgo coincidi¨® con la l¨ªnea m¨¢s dura de ETA. Fue considerado como el pionero de la estrategia del coche bomba, uno de cuyos primeros logros fue el atentado de los almacenes de Hipercor en Barcelona en 1987. All¨ª murieron 21 personas y otras 29 quedaron malheridas. Los autores materiales del atentado, Domingo Troiti?o y Josefina Mercedes Ernaga, fueron juzgados y condenados a 1.588 a?os de c¨¢rcel por tener la "frialdad de ¨¢nimo", as¨ª lo expres¨® la sentencia, de hacer explotar 200 litros de una sustancia incendiaria fabricada para matar. Todav¨ªa siguen en prisi¨®n, pero nunca se consigui¨® probar que Josu Ternera, aun siendo por aquel entonces jefe de la banda, diera la orden material del atentado.

Aprovech¨® su liderazgo, siempre seg¨²n la versi¨®n policial, para defender la necesidad de atentar contra la Ertzaintza y fue el principal dise?ador del comando itinerante, encabezado por el franc¨¦s Henri Parot y que sembr¨® durante a?os la muerte en muchos lugares antes de que la polic¨ªa lograra desarticularlo y detener a sus integrantes a la entrada de Sevilla.

Tras ser detenido en Bayona, la justicia francesa lo conden¨® en 1990 a 10 a?os de prisi¨®n por el llamado caso Sokoa -en 1986, la polic¨ªa francesa localiz¨® en los s¨®tanos de una f¨¢brica de muebles de Hendaya un arsenal de armas y numerosa documentaci¨®n sobre las finanzas de ETA-. Josu Ternera era el firmante de numerosos documentos relativos a la financiaci¨®n de la banda terrorista y referentes a los gastos, cuentas y entregas de dinero.

Ya en 1996, y tras intensas gestiones ante el gobierno franc¨¦s del propio Felipe Gonz¨¢lez, Ternera fue entregado a Espa?a e ingres¨® en prisi¨®n. Lo que entonces fue un ¨¦xito incuestionable -el terrorista m¨¢s peligroso, por fin en una c¨¢rcel espa?ola- se ha convertido ahora en una decepci¨®n sin precedentes para jueces y polic¨ªas. A pesar de la insistencia de la fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional, que considera que se puede juzgar a Ternera por fechor¨ªas distintas a las condenadas en Francia, el Tribunal Supremo lo acaba de dejar en libertad.

El Josu Ternera de ayer es hoy Jos¨¦ Antonio Urruticoetxea Bengoetxea, elegido diputado en las pasadas elecciones vascas en la candidatura de Euskal Herritarrok y portavoz en la comisi¨®n de Derechos Humanos del parlamento vasco. Seg¨²n denuncian en voz baja jueces y polic¨ªas y en voz alta Pedro Cerrac¨ªn, abogado de la Asociaci¨®n de V¨ªctimas del Terrorismo, el caso de Ternera explica lo que est¨¢ pasando en el mundo de ETA y de cualquier organizaci¨®n dedicada al crimen: "Los sicarios caen antes o despu¨¦s, pero el jefe nunca, jam¨¢s se le puede demostrar nada, porque nunca firma en un papel la muerte de nadie".