Bilbaoarte estudia ampliar sus instalaciones a una iglesia de San Francisco El Ayuntamiento quiere dedicar el Sagrado Coraz¨®n de Mar¨ªa a las artes esc¨¦nicas
El Ayuntamiento de Bilbao est¨¢ estudiando la ampliaci¨®n de las instalaciones de Bilbaoarte, el centro municipal de talleres y salas de exposici¨®n para creadores j¨®venes, para disponer de espacios de desarrollo de proyectos de artes esc¨¦nicas. Sin salir del barrio de Bilbao La Vieja, el lugar elegido es la iglesia del Sagrado Coraz¨®n de Mar¨ªa, de la calle San Francisco, desacralizada desde hace a?os.
Bilbaoarte abri¨® sus puertas en noviembre de 1998 en las remozadas escuelas de Urazurrutia con el doble objetivo de prestar un servicio a los artistas j¨®venes y contribuir a la revitalizaci¨®n de Bilbao La Vieja, el barrio m¨¢s depauperado de la capital vizca¨ªna. En su primer a?o de funcionamiento utilizaron los estudios del centro 13 artistas pl¨¢sticos y un grupo de danza y performance, se organizaron nueve exposiciones, individuales y colectivas. En paralelo a estas actividades, Bilbaoarte ofreci¨® cursos, conferencias y seminarios. S¨®lo un grupo dedicado a las artes esc¨¦nicas, solicit¨® la utilizaci¨®n de los espacios disponibles en Bilbaoarte en su a?o inaugural. El comit¨¦ de selecci¨®n le dio el visto bueno, y la compa?¨ªa de teatro Txusma, pudo ensayar y presentar en sus instalaciones la obra L.O.V.E., basada en los Sonetos de Shakespeare.
A la convocatoria para el a?o 2000 acudieron siete proyectos esc¨¦nicos, a los que se sumaron otros dos fuera de plazo. Bilbaoarte dispone de 2.700 metros cuadrados, distribuidos en cinco plantas, pero no puede ofrecer cobijo a tantos candidatos. Para responder a este incremento de la demanda Bilbaoarte prepara una ampliaci¨®n de sus instalaciones, que ser¨¢ dedicada en exclusiva a las artes esc¨¦nicas.
La iglesia del Sagrado Coraz¨®n de Mar¨ªa, situada en la calle San Francisco, est¨¢ desacralizada desde hace a?os. El abandono queda patente en el andamio colocado en el exterior del templo, para evitar que el desprendimiento de elementos de su fachada cause da?os.
Bilbaoarte estudia que la iglesia albergue las nuevas instalaciones dedicadas a las artes esc¨¦nicas. Su ubicaci¨®n permite cumplir con el requisito de contribuir a la revitalizaci¨®n de un barrio castigado por el paro, la infravivienda y la delincuencia derivada del tr¨¢fico de drogas.
El Sagrado Coraz¨®n de Mar¨ªa funcionar¨ªa bajo la tutela de Bilbaoarte, con la vocaci¨®n de ofrecer un espacio diferente a la oferta de teatro convencional de la ciudad. El esquema de trabajo ser¨¢ similar a las instalaciones de Urazurrutia, basado en la cesi¨®n de espacios en un tiempo establecido para el desarrollo de proyectos concretos.
Los t¨¦cnicos municipales no han revisado todav¨ªa el templo para determinar la reforma. Los responsables de Cultura propugnan, sin embargo, una m¨ªnima intervenci¨®n en el edificio. Su intenci¨®n es reducir las obras a un lavado de cara exterior y a los trabajos imprescindibles para dividir la nave en tres espacios independientes y con la flexibilidad suficientes para reconvertirse de espacio de trabajo y ensayo a local abierto al p¨²blico.
Cambios jur¨ªdicos
La ampliaci¨®n de las instalaciones de Bilbaoarte se enmarcan en un proyecto de cambio de su personalidad jur¨ªdica, con el objetivo de disponer de independencia en la gesti¨®n. Bilbaoarte naci¨® como una dependencia m¨¢s del ¨¢rea de Cultura municipal y cada uno de sus movimientos est¨¢ sometido a los tr¨¢mites burocr¨¢ticos que est¨¢ condici¨®n requiere. Los resultados de su primer a?o de funcionamiento han animado a los responsables del ¨¢rea a buscar una f¨®rmula que d¨¦ al centro mayor agilidad.
No hay mucho donde elegir: Bilbaoarte podr¨ªa convertirse en un organismo p¨²blico municipal o en sociedad an¨®nima. La segunda posibilidad permite la entrada en el consejo de Administraci¨®n de las entidades privadas que patrocinan sus actividades.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.