Liberado Oliverio Rinc¨®n de su secuestro
"Es la experiencia m¨¢s dura que he vivido. Uno nunca est¨¢ preparado para esto", fue lo primero que dijo a los periodistas el ex ciclista Oliverio Rinc¨®n, de 32 a?os, retirado hace dos, tras regresar a su casa ayer despu¨¦s de estar 11 d¨ªas en poder del ELN (Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional).Rinc¨®n, ¨ªdolo del ciclismo en este pa¨ªs de escaladores, que corri¨® siete temporadas en Espa?a, fue secuestrado el pasado 20 de enero cuando visitaba a sus padres en una peque?a finca de Duitama en la provincia de Boyac¨¢, su tierra natal.
Ayer domingo, mientras unos 10.000 deportistas de todas las disciplinas marchaban por el centro de Bogot¨¢ pidiendo la liberaci¨®n de Rinc¨®n y la del empresario del f¨²tbol y periodista Guillermo Cort¨¦s, cuyos secuestros generaron el repudio nacional, la esposa y el suegro del ciclista viajaron a un paraje rural al norte de la provincia de Boyac¨¢ para cumplir una cita con el ELN. Hacia el mediod¨ªa recibieron la mejor noticia: la libertad de Oliverio. A las 16.30, hora local, el escarabajo estaba de nuevo en su casa.
"Gracias a los medios de comunicaci¨®n; les debo mucho; me sent¨ª muy respaldado", dijo tambi¨¦n Rinc¨®n y cont¨® que le "trataron bien", que no hubo exigencia econ¨®mica para su liberaci¨®n, y que aunque en un comienzo los guerrilleros del frente Efra¨ªn Pab¨®n del ELN le informaron que servir¨ªa de correo para enviar un mensaje al Gobierno, al final decidieron apresurar su liberaci¨®n y postergar la entrega del comunicado. "Lo m¨¢s dif¨ªcil es la incertidumbre al comienzo", confes¨® el ex deportista. "Uno se pregunta ?por qu¨¦ estoy aqu¨ª?". Al final pidi¨® por la paz del pa¨ªs.
"Con mucho esfuerzo, porque la mayor¨ªa salimos de situaciones muy precarias, logramos ganar unos centavos", dijo un boxeador que particip¨® en la marcha de protesta en Bogot¨¢ ayer domingo. "Que no nos impliquen". Lucho Herrera, otro de los escarabajos que le dio triunfos a Colombia en Europa, pidi¨® a los violentos dejar a los deportistas "al margen del conflicto". Rinc¨®n tiene ahora una peque?a finca ganadera.
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