Unos 'ni?atos' atemorizan Getxo
A veces entran en los establecimientos; otras no es necesario. Les basta con utilizar los c¨®digos conocidos: se colocan en el exterior o pegan su rostro al cristal. Es suficiente. Los comerciantes se dan por enterados y cierran las tiendas. "No se puede hacer nada y hay que callarse por miedo ante unos ni?atos de mierda". Mar¨ªa Dolores est¨¢ indignada. Es la propietaria de Detalles, un establecimiento de, en el centro de la localidad y su principal zona comercial. No es la ¨²nica persona que expresa su indignaci¨®n por unas situaciones que se han hecho costumbre. Cerca de una decena de comerciantes de Algorta consultados coinciden con Mar¨ªa Dolores. Varios utilizan expresiones a¨²n m¨¢s contundentes.Es jueves por la ma?ana. Ha pasado una semana desde la jornada de huelga general convocada por Euskal Herritarrok (EH), que oblig¨® al cierre de comercios. El tiempo ha limpiado las pintadas de la jornada, pero no ha logrado borrar el enfado de los comerciantes. "El d¨ªa anterior ya estaban metiendo miedo. No se puede comprender c¨®mo act¨²an a plena luz del d¨ªa tan impunemente. Si yo me pongo con una pancarta a protestar por los impuestos, seguro que me detienen. Y a estos no les pasa nada. Parece que la Ertzaintza y la Polic¨ªa Municipal se van en otra direcci¨®n cuando les ven", se queja la comerciante, que termina reconociendo que "el problema" es de dif¨ªcil soluci¨®n.
Getxo se ha convertido ¨²ltimamente en el municipio del Pa¨ªs Vasco donde la violencia callejera golpea m¨¢s fuerte. Y aunque los comerciantes conciden en que les afecta fundamentalmente con motivo de las convocatorias de huelga y jornadas de lucha, est¨¢n hartos de aguantar. "Cuando les da por quemar cajeros y arrojar c¨®cteles nos dejan tranquilos, pero en cuanto convocan una huelga estamos perdidos. Somos sus v¨ªctimas. Qu¨¦ risa me da cuando dice el alcalde que nos hagamos los fuertes delante de los provocadores. A ¨¦l le querr¨ªa yo ver aqu¨ª", comenta otro comerciante que, al igual que otros, pide no ser identificado y, como todos, rechaza ser fotografiado.
Jos¨¦ Almeida es gerente de la asociaci¨®n Comercios Unidos de Getxo, que agrupa a medio millar de establecimientos. No oculta que las amenazas de cierre que sufrieron algunos comerciantes la semana pasada y que ha generado pol¨¦mica con el Ayuntamiento le ha afectado. "Cuesta entender por qu¨¦ ocurren estas cosas. No es l¨®gico que est¨¦n todos los comercios abiertos y los del centro de Algorta tengan que cerrar por presiones. En el resto del pueblo y en Las Arenas no pasa nada. Alguna medida habr¨ªa que tomar", arguye.
Ana Basilio, ex presidenta de la misma agrupaci¨®n y propietaria de un comercio en Las Arenas desde hace 23 a?os, est¨¢ de acuerdo. "No tiene nada que ver lo que ocurre en Algorta y tambi¨¦n en Romo, con Las Arenas, donde no pasa nada". La ¨²nica experiencia negativa que tuvo ella fue hace algunos a?os, con motivo de una huelga general. Entr¨® un piquete informativo en su tienda, Basilio les escuch¨® y respondi¨®: "Gracias, pero no estoy de acuerdo y no voy a cerrar". Unos minutos despu¨¦s los huelguistas volvieron, pero esta vez el n¨²mero era mayor. Le preguntaron si estaba informada y reiter¨® sus palabras. Se marcharon. "Me temblaban las piernas y llam¨¦ inmeditamente a la Ertzaintza; a los cinco minutos, una patrulla paseaba por mi puerta". Nunca m¨¢s han regresado, recuerda.
Con un plano
Pablo A. es un joven ¨®ptico que trabaja en un establecimiento del centro de Algorta. No le gusta tener que cerrar por coacciones. Sin embargo, prefiere buscar soluciones que lanzarse a la cr¨ªtica. "Los piquetes vienen por la ma?ana y montan el l¨ªo para salir en la foto. O cierras o te enfrentas, y eso es imposible en solitario. Si los comerciantes nos pusi¨¦ramos de acuerdo, podr¨ªamos abrir por la tarde. Yo creo que tendr¨ªamos que reunirnos para tomar alguna medida. Algo se podr¨ªa hacer", propone escuetamente antes de volver al trabajo.
Un comerciante de la calle Torrente s¨®lo quiere decir una frase: "Vienen con plano y apuntando a los que abren". Uno de los cinco trabajadores de Tintorer¨ªas Areilza en la calle Juan Bautista Zabala tambi¨¦n es expresivo: "Tienes que cerrar por cojones". El joven argumenta que para qu¨¦ van a abrir a las nueve de la ma?ana si a las diez tienen que cerrar. "Nosotros ni venimos". La sensaci¨®n general es de rabia y conformidad. "Y todo por unos ni?atos de mierda".
"A¨²n estamos limpiando"
El ¨²nico establecimiento no bancario que result¨® da?ado con motivo de la convocatoria de la huelga general de EH fue la sucursal que Viajes Ecuador tiene en la calle Juan Bautista Zabala de Algorta. Los violentos arrojaron gasolina sobre la puerta hacia las tres y media de la tarde del d¨ªa 26 y luego se dieron a la fuga. Mikel, uno de los trabajadores, encontr¨® el establecimiento oscuro por el humo. "Volv¨ª de comer y me encontr¨¦ con la fachada negra. Pens¨¦ que hab¨ªan arrojado un c¨®ctel y que todo estaba quemado. S¨®lo prendi¨® el felpudo. Todav¨ªa andamos limpiando". Los violentos lanzaron su aviso la v¨ªspera de la convocatoria. El mismo d¨ªa, unos quince encapuchados atacaron con artefactos incendiarios, y a plena luz del d¨ªa, nueve oficinas bancarias en Algorta. No se produjeron detenciones. El consejero del Interior, Javier Balza, prev¨¦ comparecer el pr¨®ximo jueves en el Parlamento vasco para responder sobre los hechos violentos. Balza dar¨¢ a conocer el n¨²mero de actos de kale borroka que se registraron en Getxo el pasado a?o (25). En lo que va de a?o, ya se han producido 11.
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