Un fen¨®meno televisivo

La presencia del austriaco J?rg Haider en varios programas de la televisi¨®n alemana ha desencadenado la pol¨¦mica sobre el tratamiento correcto de la informaci¨®n sobre el extremismo. La tertulia de la noche del domingo en la primera cadena p¨²blica alemana, ARD, dirigida por Sabine Christiansen, retir¨® hace una semana la invitaci¨®n a Haider. El programa de noticias del canal privado NTV lo invit¨® anoche a la tertulia Charla en Berl¨ªn, que presenta el veterano periodista Erich B?hme.La retirada de la invitaci¨®n del programa de Sabine Christiansen priv¨® a los espectadores del espect¨¢culo de un duelo verbal del populista derechista austriaco con un gran polemista, Daniel Cohn-Bendit; el ministro alem¨¢n del Interior, Otto Schily, y el dirigente de la comunidad jud¨ªa alemana Michel Friedman, todos ellos brillantes por su inteligencia y capacidad dial¨¦ctica.

En nombre de lo pol¨ªticamente correcto, tal vez por presiones de su partido socialdem¨®crata (SPD), Schily anunci¨® que no participar¨ªa en la tertulia con Haider. Luego renunci¨® Friedman y los responsables del programa optaron por retirar la invitaci¨®n a Haider. Tras la renuncia de Haider, Friedman no tuvo inconveniente en reconsiderar su renuncia, participar en el programa y poner a parir al ausente. Cohn-Bendit, en un brillante arranque de la tertulia, arremeti¨® contra la moderadora por haber retirado la invitaci¨®n a Haider.

Argumentos pol¨ªticos

Para Cohn-Bendit, eso era un insulto para ¨¦l, que se considera ya mayorcito y con suficiente capacidad intelectual para derrotar con argumentos al derechista austriaco. Seg¨²n el l¨ªder del Mayo del 68 franc¨¦s y hoy diputado verde en el Parlamento Europeo, al extremismo se le combate con argumentos pol¨ªticos, y no con medidas de censura.

La retirada de la invitaci¨®n a Haider de la p¨²dica Christiansen le vino como anillo al dedo a Erich B?hme, que anoche estrenaba su tertulia en la cadena privada de noticias NTV. Al veterano maestro B?hme le interesa m¨¢s hacer buen periodismo que la correcci¨®n pol¨ªtica, y no tuvo el menor inconveniente en invitar a Haider, aunque el programa fue grabado para evitar incidentes. En una entrevista con el peri¨®dico austriaco Kurier, B?hme resum¨ªa: "Silenciar es demonizar".

[Unas 500 personas se manifestaron ayer en la capital alemana ante el hotel en el que se encontraba alojado Haider y corearon gritos de "?nazis, no!" en protesta por la presencia del pol¨ªtico austriaco en la televisi¨®n alemana, informa Reuters. La polic¨ªa protegi¨® al equipo de televisi¨®n que penetr¨® en el hotel para grabar la entrevista con Haider. Los manifestantes lanzaron piedras y otros objetos contra los agentes].