La Guardia Civil investiga a grandes superficies por fraude en la venta de v¨ªdeos Los productores denuncian que Continente, Pryca y Alcampo no pagan el canon
La Guardia Civil present¨® el pasado mi¨¦rcoles con todos los honores la Operaci¨®n Canon, que dio al traste con un fraude que lleg¨® a significar el 76% de la venta de cintas de v¨ªdeo v¨ªrgenes y supuso un da?o para el sector valorado en 8.635 millones de pesetas. Pero no explic¨® qu¨¦ grandes superficies est¨¢n siendo investigadas por "cooperaci¨®n necesaria" en el fraude. Representantes legales y jefes de compras -algunos de ellos cesados hace tiempo- de Continente, Alcampo, Pryca, y, en menor medida, de Simago y Macro, han sido llamados a declarar por este motivo.
La implicaci¨®n de grandes superficies en el caso responde a una iniciativa de EGEDA, la asociaci¨®n de los productores, que denunci¨® y reclam¨® a las grandes superficies entre 4.000 y 6.000 millones de pesetas por cooperar en el fraude. La Operaci¨®n Canon ha dado origen a diligencias en el Juzgado n¨²mero 8 de Zaragoza (1.095/98) y en el n¨²mero 19 de Madrid (2.967/97), en el que est¨¢ personada la Fiscal¨ªa de Delitos Monetarios del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
El origen del fraude estaba en el impago del llamado canon compensatorio, un gravamen obligado por la Ley de Propiedad Intelectual, equivalente a un pago de derechos, dado que se supone que cada cinta va a ser utilizada para la grabaci¨®n de pel¨ªculas. Por cada hora de cinta virgen se han de pagar 50 pesetas de canon compensatorio, lo que significa 150 pesetas en una cinta convencional de tres horas de duraci¨®n. Este derecho se distribuye a partes iguales entre las entidades que representan a los autores (la SGAE, sociedad de autores), actores (AISGE) y productores (EGEDA). Ese canon se a?ade al precio de la cinta y de la suma de ambos se deduce el IVA correspondiente.
No abonar el canon supon¨ªa la posibilidad de colocar el producto en el mercado a un precio claramente favorable. Las empresas que se dedicaban a distribuir las cintas de v¨ªdeo lograban eludir estos derechos en sus contabilidades por diversas f¨®rmulas, algunas tan groseras como anotar como mecheros lo que eran cintas de v¨ªdeo o confundir el canon dentro del precio final. El propio director general de la Guardia Civil, Santiago L¨®pez Valdivieso, que presidi¨® el pasado mi¨¦rcoles la Operaci¨®n Canon, manifest¨® que el fraude podr¨ªa haber alcanzado los 15.000 millones en estos a?os de no haberse producido la actuaci¨®n policial. El fraude por no declarar el IVA se estima en algo m¨¢s de mil millones.
Portavoces de las grandes superficies implicadas en el caso niegan la participaci¨®n de estas empresas en el fraude. Carlos Cabestany, de Continente, manifest¨® a este peri¨®dico que su empresa cumple la legalidad vigente, "en nuestras facturas viene desglosado el canon desde 1992 y as¨ª lo exigimos de nuestros proveedores. No nos han llamado a declarar, ni ha existido ninguna auditor¨ªa y, si la hubiera, tenemos todo en regla". ?lvaro Bord¨¢s, de Alcampo, declar¨® que "llevamos este asunto muy controlado, incluso tuvimos unas negociaciones con la SGAE para revisar si deb¨ªamos pagar o no ese canon y no hubo problema alguno". El portavoz de Pryca dice no tener constancia de la Operaci¨®n Canon, "porque nosotros trabajamos con proveedores oficiales, que incluyen ese canon en las facturas". Su colega de Simago se limit¨® a decir que "s¨®lo trabajamos con grandes marcas, por lo que ya viene desglosado ese canon en las facturas. Ese fraude s¨®lo es posible en peque?as tiendas que utilicen art¨ªculos de importaci¨®n".
Fuentes de la investigaci¨®n ponen de manifiesto el papel que han interpretado las grandes superficies en este fraude porque, sin su cooperaci¨®n, no ser¨ªa posible que hubiera alcanzado tan altas proporciones, que, seg¨²n algunas estimaciones, debi¨® alcanzar a la venta de casi 20 millones de cintas anuales. La Guardia Civil necesit¨® de m¨¢s de 100 mandamientos judiciales para poder fiscalizar, entre otras empresas, la contabilidad de estas grandes superficies en 22 provincias espa?olas. La Operaci¨®n Canon ha supuesto que un fraude que lleg¨® a alcanzar al 76% del mercado quede reducido, en la actualidad, a un 5,6%, seg¨²n la Guardia Civil. El problema se limita ahora a peque?os bazares y las denominadas tiendas de todo a cien.
El da?o producido a empresas del sector es dif¨ªcil de evaluar en algunos casos. "Es dif¨ªcil de concretar", dice Antonio Fern¨¢ndez, de la empresa BASF; "en el a?o 92 pod¨ªamos hablar de un fraude generalizado. Nuestra empresa, por la marca que representa y por su cultura, cumpli¨® rigurosamente con la ley, pero podr¨ªa comentar que en un primer momento supuso una ca¨ªda de ventas de 1.500 millones de pesetas anuales, la entrada en p¨¦rdidas y que 22 personas del departamento de ventas se fueran a la calle. La situaci¨®n se ha ido normalizando, pero todav¨ªa no hemos alcanzado los niveles de ventas anteriores ni hemos recuperado esos 22 empleos. Hemos tenido que llegar a vender cintas de v¨ªdeo por debajo de los costes industriales para defender nuestra posici¨®n en el mercado".
1.700.000 cintas incautadas
?ngel Guerrero, de Sony Espa?a, no detalla la cuant¨ªa del problema, pero s¨ª afirma que tuvo serias repercusiones en las ventas. Guerrero discrepa de que el fraude se haya reducido en tanta proporci¨®n. En su opini¨®n, todav¨ªa hay una bolsa importante de fraude, "que podr¨ªa ser superior a un 20%". Un portavoz de una empresa afectada prefiere evitar dar los nombres de las grandes superficies que m¨¢s venta fraudulenta propiciaron por temor a represalias. "Son empresas muy poderosas y te pueden bloquear en el mercado".
La investigaci¨®n puso de manifiesto la existencia de redes organizadas con implicaciones internacionales, como es el caso de una red hind¨², que a trav¨¦s de empresas interpuestas, cuentas corrientes a nombre de trabajadores y de una sofisticada contabilidad financiera, consegu¨ªa colocar en el mercado, con apariencia legal, millones de cintas v¨ªrgenes importadas del exterior, bien del Reino Unido, Holanda o sureste asi¨¢tico. La operaci¨®n supuso diez detenciones, un total de 22 personas investigadas y la incautaci¨®n de 1.700.000 cintas en Barcelona y m¨¢s de dos millones en Madrid.
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