Otro salto hacia el trono de Michael Jordan

Vince Carter hereda el trono dejado por Michael Jordan como jugador m¨¢s espectacular de la NBA. Sus pares se rinden ante sus acrobacias, los que fueron estrellas se quedan sin palabras ante su originalidad y el p¨²blico se rompe las manos aplaudiendo. S¨®lo Jordan calla. Carter confirm¨® todos los pron¨®sticos el s¨¢bado por la noche en Oakland, en el concurso de mates del All Star 2000, y arroll¨® a sus competidores con un mate pasando el bal¨®n entre las piernas que, seg¨²n muchos, probablemente sea el mejor que ha visto la historia del baloncesto. El concurso de triples lo gan¨® Hornacek (Utah).En los quince a?os de concurso se han saboreado mates espectaculares de gente como Michael Jordan, Dominique Wilkins o Spud Webb, quien en la competici¨®n de 1986 consigui¨® una perfecta calificaci¨®n m¨¢xima de 100 puntos. Pero las im¨¢genes de lo que hubo en el pasado quedaron desva¨ªdas ante lo que intent¨®, y consigui¨®, Carter en el Arena de Oakland. De los cinco mates del jugador de los Raptors -tres para clasificarse para la final a la que aspiraban seis jugadores, y dos en la propia final, disputada por los tres mejor calificados-, el tercero fue el que cre¨® un nuevo canon.

Ya con el primero, con un giro de 360 grados en el aire, Carter consigui¨® el 10 de cada uno de los cinco jueces, y en las gradas produjo la sensaci¨®n de que nada podr¨ªa superarlo. Pero Carter es el artista m¨¢s capaz que ahora se mueve bajo los tableros de la NBA y demostr¨® en su tercera exhibici¨®n que su virtuosismo no tiene l¨ªmites. Su primo, compa?ero en los Raptors y rival en el concurso, Tracy McGrady, le bot¨® la pelota, Carter lleg¨® corriendo, salt¨®, la cogi¨® con la mano izquierda, se la pas¨® bajo la pierna derecha, la recuper¨® con la mano de ese lado y la ca?one¨® entre los aros. Fue la apoteosis. Uno de los jueces, apenas repuesto de su pasmo ante el fulgor de lo visto, se fue hacia ¨¦l para felicitarle. "Ha destrozado las normas. Es de otro planeta. No hay puntos ", dijo luego para explicar su arrebato. La grada era una fiesta. Shaquille O'Neal, siempre excesivo, dijo que iba a hablar con su abogado para que anunciara que deja el baloncesto y el gran Julius Erving coment¨®: "Es algo nuevo. Tiene alcance. Tiene imaginaci¨®n".

En la hora de la consagraci¨®n, Carter estuvo controlado. "Intent¨¦ hacer mates que nunca hab¨ªa visto hacer a nadie o que nunca se hab¨ªa o¨ªdo decir que se hubieran hecho", dijo. "Era algo diferente y no ten¨ªa ni idea de c¨®mo reaccionar¨ªan los jueces". Se rindieron. Para el quinto intento de la serie, sus compa?eros y rivales en la NBA medio ocuparon la pista para ver de cerca la ¨²ltima obra del prodigio. Fue un homenaje a Erving, un mate a dos manos saltando desde la l¨ªnea de tiros libres. Pero nada pod¨ªa superar su tercer intento.

Carter, de 23 a?os, es la m¨¢s rutilante estrella de la generaci¨®n post Jordan. "Yo no soy Jordan", responde a quienes le quieren coronar ya. "Todo el mundo quiere colocarme ah¨ª y a¨²n me queda mucho. Quiero ser yo y hacer lo que puedo hacer. No me compar¨¦is con el m¨¢s grande de todos los jugadores".