Un paraje protegido de la presencia humana

El Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares es un enclave privilegiado en Madrid. Sus moles de rocas aborregadas y estriadas de tipo gran¨ªtico, formadas en niveles profundos de la corteza terrestre hace m¨¢s de 300 millones de a?os, y sus pinares y tejos centenarios sirven de refugio a algunos mam¨ªferos y aves silvestres cuya poblaci¨®n escasea. La presencia humana est¨¢ limitada: los responsables del parque s¨®lo permiten la entrada a un cupo de 500 coches diarios. La Pedriza supone para los animales una zona sin m¨¢s peligro que el de la propia naturaleza.Entre los habitantes alados del parque destaca una colonia de buitres leonados que nidifica en pe?ascos inaccesibles. Los carro?eros se alimentan del ganado muerto. No est¨¢n solos. Comparten territorio con el ¨¢guila real, el halc¨®n com¨²n, el azor y el b¨²ho real.

En las cumbres de granito de La Pedriza habita uno de los mam¨ªferos m¨¢s emblem¨¢ticos de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, la cabra mont¨¦s. Fue introducida en ese rocoso paraje madrile?o hace 12 a?os. Ahora vive en reba?os y pasta por los prados m¨¢s rec¨®nditos del parque. La Pedriza tambi¨¦n esconde al c¨¦rvido m¨¢s peque?o de Espa?a, el corzo, animal asustadizo y esquivo que encuentra en esta zona protegida su refugio ideal. El gato mont¨¦s y el jabal¨ª tambi¨¦n viven en el parque.