Empleo y crecimiento

Por muchas razones, el a?o 1999 ha sido excelente para el empleo. El elevado ritmo de crecimiento econ¨®mico ha impulsado la creaci¨®n de casi 700.000 puestos de trabajo y ha reducido el n¨²mero de parados en 400.000 personas, con lo cual la tasa de paro ha bajado en casi tres puntos, desde el 18,1% al 15,4%, seg¨²n la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) correspondiente al ¨²ltimo trimestre del a?o. El crecimiento del empleo durante el a?o (5,24%) es superior al crecimiento del PIB, y la disminuci¨®n del paro se ha conseguido, adem¨¢s, con un aumento de la tasa de actividad de casi seis d¨¦cimas, del 50,02% al 50,69%. El balance de la legislatura es tambi¨¦n excelente. Durante los ¨²ltimos cuatro a?os se han creado 1,86 millones de empleos, hay un mill¨®n largo de parados menos y la tasa de paro ha ca¨ªdo m¨¢s de siete puntos.Dicho lo anterior, por debajo de las cifras brillantes aparecen algunas sombras que el Gobierno no parece reconocer, y no s¨®lo por razones electorales. Buena parte de los empleos creados son fijos, pero la tasa de temporalidad se mantiene pr¨¢cticamente en los niveles de 1996. Ha descendido tan s¨®lo 1,2 puntos (del 33,8% al 32,6%) en cuatro a?os, a pesar de que ha mediado una reforma laboral encaminada a aumentar los contratos de larga duraci¨®n.

Los datos del Inem de enero, que registraron una subida de 58.000 parados, hacen temer que se produzca un empeoramiento de las cifras en la pr¨®xima EPA. El empleo no es un indicador aislado de la econom¨ªa; por el contrario, las excelentes cifras de la legislatura son el resultado de una compleja interacci¨®n de factores, entre los que cabe se?alar, adem¨¢s del crecimiento del PIB, la moderaci¨®n salarial, la estabilidad de precios, la confianza empresarial, el entorno tributario y el coste del dinero. Para nadie es un secreto que algunos de estos indicadores est¨¢n empeorando este trimestre y que quiz¨¢ el ritmo de crecimiento no sea tan intenso como en 1999. Tan importante como celebrar los a?os dorados es prepararse para tiempos m¨¢s dif¨ªciles. El para¨ªso del pleno empleo, que el Gobierno agita en periodo electoral como si fuera posible extrapolar los excepcionales resultados del ciclo econ¨®mico a los siguientes cuatro a?os, indica que no est¨¢ preparado para ello. Por lo pronto, el paro registrado lleva creciendo los ¨²ltimos seis meses. Es posible que el crecimiento no baste por s¨ª solo para mejorar las cifras.