Las personas beneficiadas con el 'salario social' podr¨¢n compatibilizarlo con ingresos laborales
Para terminar con lo que era hasta ahora "una gran injusticia", en palabras del consejero de Justicia, Trabajo y Seguridad Social, Sabin Intxaurraga, los perceptores del salario social podr¨¢n compatibilizarlo desde el pr¨®ximo mes de marzo con ingresos procedentes de un trabajo, hasta una cuant¨ªa determinada. La nueva medida, aprobada el pasado 3 de febrero, pretende estimular el empleo. El departamento de Intxaurraga destinar¨¢ este a?o 150 millones de pesetas para este programa. Adem¨¢s, dedicar¨¢ 8.520 millones a financiar el Ingreso M¨ªnimo de Inserci¨®n (IMI).
A partir de marzo ser¨¢ m¨¢s justa la situaci¨®n de las personas que perciben el IMI (Ingreso M¨ªnimo de Inserci¨®n, dirigido a paliar las necesidades b¨¢sicas y evitar la marginaci¨®n social) y que al mismo tiempo desempe?an un trabajo remunerado. Actualmente, 30.000 personas pertenecientes a 11.500 unidades de convivencia perciben alguna ayuda social en Euskadi.El presupuesto que el Departamento de Trabajo destinar¨¢ al IMI este a?o asciende a 8.500 millones de pesetas. A ellos se a?adir¨¢ una partida inicial de 1.150 millones para el desarrollo de la nueva medida de est¨ªmulo del empleo (hasta ahora el IMI era incompatible con cualquier ingreso), as¨ª como para el tambi¨¦n novedoso programa Auzolan, que servir¨¢ para el desarrollo de los convenios de inserci¨®n laboral de los perceptores del IMI y los parados mayores de 45 a?os con dificultades de integraci¨®n en el mercado.
De momento, la nueva medida permitir¨¢ que un perceptor del IMI (50.815 pesetas) pueda alcanzar las 69.600 pesetas, por ejemplo, en el caso de que tenga un unos ingresos propios de 40.000. El l¨ªmite de ingresos se fija en 72.887 pesetas, en el caso de una unidad familiar, y en 94.800, en las de mayor n¨²mero de integrantes. "Se trata de no computar un determinado porcentaje de los ingresos procedentes del trabajo, por cuenta propia o ajena, obtenidos por la actividad de cualquiera de los miembros de la unidad econ¨®mica de convivencia", explic¨® Intxaurraga, quien reconoci¨® que, en algunos casos, la percepci¨®n de una ayuda econ¨®mica resulta "desincentivadora" para buscar empleo.
Una vida digna
El consejero expuso las medidas de su departamento junto a Angeles Iztueta, viceconsejera de Asuntos Sociales. Intxaurraga insisti¨® en que el objetivo global es que "todas las personas puedan tener garantizada una vida digna". Todos los ciudadanos, seg¨²n resalt¨®, tienen derecho a disponer de unos ingresos m¨ªnimos que les permitan integrarse en la vida social. "Por eso creo que se va a incrementar la cifra actual de 30.000 beneficiarios [de ayudas sociales], pero es de justicia".
La dificultad que encierra la aplicaci¨®n de las nuevas medidas -"son de ejecuci¨®n complicada", asumi¨® Intxaurraga- ha obligado al Departamento de Trabajo a poner en marcha talleres explicativos para los trabajadores sociales de base. Un total de cien equipos t¨¦cnicos ser¨¢n los encargados de estudiar las solicitudes de ayudas a partir de marzo.
Todas estas medidas desarrollan la Ley contra la Exclusi¨®n Social de 1998, que se completar¨¢ con la aprobaci¨®n, prevista para el pr¨®ximo mes de junio, del Plan Vasco de Inserci¨®n y del decreto regulador de las empresas de inserci¨®n. Intxaurraga manifest¨® que ser¨¢ una ¨¦xito lograr que durante este a?o un 25% de los beneficiarios del IMI pasan al nuevo programa de inserci¨®n laboral Auzolan.
El Plan Vasco de Inserci¨®n recoger¨¢ de forma coordinada y global las l¨ªneas de intervenci¨®n y actuaci¨®n que deben orientar la actividad de la Administraci¨®n vasca para conseguir la inserci¨®n de las personas en situaci¨®n de exclusi¨®n. Las empresas de inserci¨®n, por su parte, ser¨¢n "agentes activos de la adaptaci¨®n socio-profesional" para personas con dificultades de acceso al mercado laboral.
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