Desaparecido en campa?a

MIQUEL ALBEROLA

Junto al Nou Estadi del Levante UD han puesto una valla electoral del aspirante a senador Ferran Torrent, que ahora -intuyo que su evoluci¨®n pol¨ªtica todav¨ªa no es un caso cerrado- concurre por ese tren de siglas llamado BNV-EV-VPC, cuya locomotora est¨¢ llamada a efectuar tan largos recorridos que incluso considera innecesario el AVE a Madrid. Acaso haya elegido ¨¦l mismo esta ubicaci¨®n en el campo de f¨²tbol, porque a menudo presume de granota, que es como se designan los seguidores de este equipo de f¨²tbol. Tambi¨¦n presume de cul¨¦ y, si fuera muy preciso, de choto, que es el modo despectivo con que un granota se refiere siempre a un seguidor del Valencia. Torrent no s¨®lo ha diversificado su riesgo ideol¨®gico, tambi¨¦n el deportivo, y eso quiz¨¢ le haya convertido en un superviviente y, en consecuencia, en un valor electoral a tener en cuenta el d¨ªa 12. Y sobre todo, el 13.

Sin embargo esta valla es una de las pocas evidencias de que el candidato participa en estas elecciones. Debe ser la valla: no han puesto muchas. Es probable que quienes le pasan la mano por el lomo no terminen de fiarse de su ind¨®mito instinto. Est¨¢ como desaparecido en campa?a. Como si su guerra fuese otra, y puede que as¨ª sea. Tras haber protagonizado una estridente precampa?a contra el PSOE, que fue su Tipitaka hasta que el Dalai Lerma se diluy¨® en s¨ª mismo para tratar de reencarnarse en su pasado, daba la impresi¨®n de que iba a protagonizar muchas galas esta primavera con ese otro ex socialista reincidente que es Alfons Cuc¨®, quien en 1965 ya dej¨® el extinto PSV para dedicarse "al amor y a la poes¨ªa". Pero no se ha prodigado hasta el momento el novelista. Parece que s¨®lo lo tienen para torear en plazas port¨¢tiles. Ha tenido que ser al calor de la curiosidad intelectual hacia el Bloc de Joan Romero (del ciclista Joan Romero, quien diera la vuelta durante la ascensi¨®n al Tourmalet con el maillot amarillo y se dejara al pelot¨®n en la carrera con la lengua fuera y el culo al aire) para que en la profundidad de campo de las fotograf¨ªas diera la impresi¨®n de que Torrent todav¨ªa est¨¢ en el asunto.

Y es una l¨¢stima que se desaproveche su carisma de senador nato y se le tenga en el banquillo, porque es el ¨²nico centrocampista capaz de dar juego a un partido en el que casi todos quieren ser entrenadores. A medida que envejece se parece m¨¢s a Jean Paul Sartre: debe ser porque s¨®lo trabaja dos horas al d¨ªa en temporada alta, lo que le carga de convicci¨®n intelectual para poder llegar a liderar el Bloc sin dimitir del Consell Valenci¨¤ de Cultura, y luego dignificar la vida espa?ola. Su caso dar¨ªa muy bien en la C¨¢mara Alta. S¨®lo falta que los suyos le den la oportunidad que se merece.