La prevenci¨®n hace disminuir el n¨²mero de toxic¨®manos que contraen el sida en Barcelona

Las medidas preventivas est¨¢n comenzando a frenar el sida tambi¨¦n entre los toxic¨®manos. El informe Balance de diez a?os del plan municipal de drogas entre los heroin¨®manos indica que en 1991 se infectaban casi un 10% de los usuarios de drogas en tratamiento, y esta cifra ha descendido hasta el 2% o el 3%, seg¨²n datos de 1997. En Barcelona, la incidencia del sida en adictos dej¨® de crecer en 1990, mientras que en el resto de Espa?a no lo hizo hasta 1995. El informe se?ala la disminuci¨®n del n¨²mero de incumplimientos en el tratamiento de la tuberculosis.

En algunas zonas de Espa?a se ha incrementado el n¨²mero de usuarios de hero¨ªna marr¨®n, para la que se utilizan v¨ªas no parenterales, pero en Catalu?a sigue predominando el consumo de hero¨ªna blanca, que suele ser inyectada y comporta m¨¢s riesgos de sobredosis e infecci¨®n.El informe se?ala tambi¨¦n que el n¨²mero de incumplimientos en el tratamiento de tuberculosis en adictos ha disminuido. Este descenso se debe al programa de metadona. Los equipos que administran la metadona en los centros de dispensaci¨®n tambi¨¦n controlan la medicaci¨®n contra la tuberculosis, lo que aumenta la continuidad del tratamiento. "Hemos pasado de un 67% de toxic¨®manos que cumpl¨ªan el tratamiento a un 96% en 1998. La OMS considera que los programas contra la tuberculosis tienen ¨¦xito cuando se alcanza el 95% de seguimiento. En nuestro caso, hemos llegado al 96% precisamente con los pacientes m¨¢s dif¨ªciles: los usuarios de drogas", indica Joan Ramon Villalb¨ª, del Instituto Municipal de Salud.

Tambi¨¦n la mortalidad por sobredosis ha experimentado un ligero descenso en los ¨²ltimos a?os, relacionado con la modificaci¨®n de las pautas de consumo y con los mecanismos de atenci¨®n inmediata en servicios extrahospitalarios, fundamentalmente las ambulacias del 061.

Nueva estrategia

Hasta ahora el Plan de Acci¨®n sobre Drogas de Barcelona contaba con tres estrategias: prevenci¨®n, asistencia y reinserci¨®n. En la planificaci¨®n del trienio 2000-2003 se incluir¨¢ un eje participativo. "Se trata de una estrategia de actuaci¨®n preventivo-asistencial, en la que se realiza un an¨¢lisis por distritos y barrios, que de momento ha sido acogida con ¨¦xito", apunta Llu¨ªs Torralba, director del Plan de Acci¨®n sobre Drogas de Barcelona.

Torralba destaca que los planes de prevenci¨®n y tratamiento logran llegar aproximadamente al 75% de los heroin¨®manos, pero existe un colectivo muy marginal al que es muy dif¨ªcil llegar. "En mi opini¨®n, la industria farmacol¨®gica no est¨¢ investigando suficientemente r¨¢pido ni bien para encontrar f¨®rmulas que puedan ayudar a esta gente", afirma.

Ricard Armengol, gerente del Instituto Municipal de Salud P¨²blica de Barcelona, opina: "En esta ciudad operan dos factores importantes. En primer lugar, la continuidad en los planes de drogas durante muchos a?os, planes por trienios que han permitido actuaciones planificadas sin sobresaltos y sin influencias de modas que perjudican la continuidad. Y en segundo lugar, el consenso pol¨ªtico es fundamental porque las drogas son un problema que no va a desaparecer y debemos tener estrategias de control compartidas".

En la lucha contra los efectos de la hero¨ªna hay un punto de inflexi¨®n muy importante: la aplicaci¨®n de programas de mantenimiento con metadona, que facilitan a los toxic¨®manos bajo control m¨¦dico esta sustancia que sustituye a la droga.

Durante el primer a?o se apuntaron algo m¨¢s de 200 personas y en 1997 se contabilizaron m¨¢s de 2.000 en tratamiento. La puesta en marcha de las operaciones y los equipos m¨®viles para la administraci¨®n de metadona permiti¨® mantener el tratamiento a los pacientes m¨¢s estabilizados. En la actualidad en este programa tambi¨¦n colaboran algunas farmacias de Barcelona.

Durante 1997 se incorporaron a ¨¦l 1.508 toxic¨®manos, lo que supone un incremento del 54% con respecto al a?o anterior, debido en gran medida a la ampliaci¨®n de los puntos de prescripci¨®n o dispensaci¨®n de metadona.

Cerca del 75% de las personas que se acogieron al programa eran hombres y el grupo de edad predominante estaba entre 30 y 39 a?os. El motivo principal de la primera visita era el fracaso en el seguimiento de otros tratamientos.