Condenada a pagar 2,5 millones por poner sangre equivocada a un paciente

El titular del Juzgado n¨²mero 12, Jos¨¦ Antonio Enrech, ha condenado a la enfermera de la cl¨ªnica Ruber Gemma Mancebo Espinosa a pagar una indemnizaci¨®n de 2,4 millones de pesetas a la viuda y los hijos de Roberto Latonda Puig, de 71 a?os, por hacerle una transfusi¨®n de sangre con un grupo distinto del que ten¨ªa el paciente. Asimismo deber¨¢ pagar una multa de 100.000 pesetas por su grave imprudencia.

El fallo considera a la enfermera autora de "una falta de lesiones de menor gravedad por imprudencia grave". Adem¨¢s de la indemnizaci¨®n, el juez la condena al pago de una multa de 50 d¨ªas con una cuota diaria de 2.000 pesetas (en total, 100.000 pesetas).El paciente ingres¨® en la Ruber el 18 de noviembre de 1996 y fue intervenido quir¨²rgicamente de un c¨¢ncer de colon el 21 de ese mes. Por prescripci¨®n facultativa se le transfundieron dos bolsas de concentrados de hemat¨ªes. La segunda conten¨ªa sangre del grupo A+, en lugar del 0+ que ten¨ªa el paciente, lo que gener¨® "peque?as convulsiones" al enfermo.

Tras ser avisada por los familiares, la acusada interrumpi¨® de inmediato el suministro y consult¨® con un internista, que determin¨® que se le suministrase suero fisiol¨®gico. Alertado por tel¨¦fono, el m¨¦dico que atend¨ªa al paciente dictamin¨® que el tratamiento impuesto era el correcto. No obstante, el paciente falleci¨® el 15 de diciembre, debido a un edema pulmonar agudo.

La sentencia considera "plenamente demostrado" que se produjo un error en la transfusi¨®n y que se puso sangre equivocada.

El juez considera probado en la sentencia que la cantidad de sangre transfundida al paciente debi¨® ser m¨ªnima, ya que "si hubiera sido m¨¢xima", destaca, "el enfermo habr¨ªa muerto". Advierte tambi¨¦n de que los problemas m¨¦dicos de Latonda (su estado en general, su edad avanzada y su disminuci¨®n renal) le convert¨ªan en un enfermo "casi terminal".

Actuaci¨®n "eficaz"

La sentencia asegura que la actuaci¨®n de la enfermera fue "eficaz", ya que primero cort¨® el suministro, luego consult¨® con un m¨¦dico e "hizo lo que hab¨ªa que hacer". "Hay que reconocer que su actitud fue diligente y apropiada. Al d¨ªa siguiente se practic¨® la anal¨ªtica y tambi¨¦n se adoptaron las medidas adecuadas", seg¨²n consta en la sentencia.

El titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 12 estima, no obstante, que la enfermera debe indemnizar por ese error y pagar a cada uno de los seis hijos de la v¨ªctima 300.000 pesetas, cantidad econ¨®mica que duplica para la viuda. Tambi¨¦n deber¨¢ abonar las costas.