El hallazgo de un nuevo dinosaurio con manos muy alargadas confirma la diversidad de ?especies end¨¦micas que habitaron M¨¦xico

M¨¦xico tiene un nuevo dinosaurio. Se trata del Mexidracon longimanus (drag¨®n mexicano de manos largas), un omn¨ªvoro de extremidades alargadas y una apariencia similar a la de un avestruz que habit¨® el norte del pa¨ªs hace unos 72,5 millones de a?os. El an¨¢lisis de sus restos, producto de una d¨¦cada de trabajo desde su descubrimiento en 2014, permiti¨® identificar por primera vez a la especie, cuya caracter¨ªstica m¨¢s notable, un par de manos extremadamente largas e in¨¦ditas en f¨®siles similares, supone un misterio para la comunidad cient¨ªfica.

El largo camino para la identificaci¨®n del Mexidracon longimanus arranc¨® en 2014, luego de que un equipo dirigido por el paleont¨®logo Claudio de Le¨®n hallara los brazos, patas y algunas v¨¦rtebras de un f¨®sil entonces inclasificable en la formaci¨®n geol¨®gica Cerro del Pueblo, al sur de Coahuila, uno de los puntos clave de la paleontolog¨ªa en M¨¦xico por su extraordinario registro de animales y plantas prehist¨®ricas. Un segundo hallazgo del mismo ejemplar, esta vez con huesos clave de la cintura, culmin¨® con la colecta de los restos y su env¨ªo a la Benem¨¦rita Escuela Normal de Coahuila (BENC). ¡°Cuando empezamos a limpiar el esqueleto nos dimos cuenta que ten¨ªamos un ejemplar relativamente completo comparado con otros ter¨®podos encontrados en Cerro del Pueblo¡±, explica a este diario Claudia Serrano Bra?as, paleont¨®loga mexicana y coautora del estudio publicado en la revista Cretaceous Research a inicios de febrero de 2025.

Serrano Bra?as se uni¨® al proyecto en 2018 y se encarg¨® de los esfuerzos de identificaci¨®n de los restos ¨®seos en el laboratorio de la BENC. ¡°Fueron unos seis a?os de preparaci¨®n del material, estuvimos comparando con ejemplares de otras formaciones geol¨®gicas, de otros pa¨ªses del mundo¡±, afirma. Si bien el estado de conservaci¨®n del ejemplar permiti¨® asociarlo con la familia de los ornitom¨ªmidos, el inusual tama?o de sus extremidades superiores capt¨® la atenci¨®n del equipo: ¡°Lo que result¨® ser la caracter¨ªstica m¨¢s notable del ejemplar es la palma de la mano, con huesos extremadamente alargados. Incluso la palma de la mano es m¨¢s grande que la planta del pie. Es algo ¨²nico¡±, explica la experta con asombro. Los huesos metacarpios del Mexidracon longimanus, que dan forma a las palmas de las manos y est¨¢n presentes en distintos animales, presentan un alargamiento inusual, una caracter¨ªstica no vista en otro tipo de dinosaurio.

Aunque hacen falta m¨¢s estudios para dilucidar la funci¨®n de sus manos alargadas, Serrano Bra?as y el resto del equipo barajan algunas hip¨®tesis al respecto: a trav¨¦s de una comparaci¨®n con las garras de los perezosos, sugieren que este rasgo anat¨®mico pudo haber sido ¨²til para reunir vegetaci¨®n y alimentarse, o para excavar en busca de alg¨²n tipo de tub¨¦rculo o insectos espec¨ªficos. El hallazgo de f¨®siles de caracoles que se depositaron en el mismo lodo que enterr¨® al ejemplar confirma que Mexidracon longimanus vivi¨® en ambiente cercano a la costa, con estuarios y bah¨ªas que conformaban el paisaje de Coahuila 72 millones de a?os atr¨¢s, cuando un mar de poca profundidad ocupaba el sitio que hoy corresponde a un ¨¢rea des¨¦rtica. De ah¨ª que otra teor¨ªa sugiera que sus extremidades superiores estaban adaptadas para cazar peque?os animales que serv¨ªan de alimento a la orilla del agua.

M¨¦xico, territorio de dinosaurios end¨¦micos

El hallazgo m¨¢s reciente refuerza la idea de que en el norte del pa¨ªs habitaron especies prehist¨®ricas ¨²nicas, con caracter¨ªsticas distintas a las de otras latitudes. ¡°Si t¨² ves los dinosaurios de la formaci¨®n Cerro del Pueblo en la actualidad, todos son distintos a lo que hemos encontrado en Estados Unidos y Canad¨¢, incluso en otras partes del mundo¡±, asegura Serrano Bra?as, mientras resume el cambio de perspectiva con el resto de pa¨ªses de Norteam¨¦rica, pioneros en el descubrimiento y la identificaci¨®n de especies de dinosaurios. ¡°Incluso hab¨ªa algunas personas que se atrev¨ªan a decir que eran las mismos [especies] que ten¨ªamos en Canad¨¢, pero al reestudiar estos f¨®siles nos percatamos que nada tienen qu¨¦ ver, son completamente diferentes, por eso podemos hablar de endemismo para el Estado de Coahuila y otras formaciones en M¨¦xico¡±.

A pesar del boom de la paleontolog¨ªa en el norte del pa¨ªs, una tendencia que cobr¨® fuerza en la d¨¦cada de los noventa de la mano de la cooperaci¨®n cient¨ªfica internacional y aceler¨® los descubrimientos de especies en territorio nacional durante el siglo en curso, Serrano Bra?as lamenta la falta de financiamiento p¨²blico, tanto a nivel federal como estatal. ¡°Muchas veces uno sale con recursos propios, porque no hay de otra. Ojal¨¢ que con estos descubrimientos realmente entiendan el valor que tiene. Los f¨®siles son patrimonio de la naci¨®n y espero que se pueda impulsar cada vez m¨¢s la paleontolog¨ªa y la ciencia en general¡±, explica.