?lava dio el triunfo al PP, pese a sellar el ¨²nico pacto vasco de izquierdas

El voto en ?lava volvi¨® ayer a ser m¨¢s espejo de lo que ocurre en el conjunto de Espa?a que reflejo del resto de los territorios integrantes de la comunidad aut¨®noma vasca. Se cumpli¨® la m¨¢xima de que quien gana en ?lava, entre los partidos de ¨¢mbito nacional, gobierna en Espa?a. La convulsi¨®n de los asesinatos de Fernando Buesa y Jorge D¨ªez se torn¨® participaci¨®n: no s¨®lo no acus¨® la llamada de EH a la abstenci¨®n, sino que super¨® la media espa?ola de afluencia a las urnas. La ¨²nica provincia vasca donde cuaj¨®, y se mostr¨® inservible, el pacto entre el PSOE e IU, fue tambi¨¦n la ¨²nica donde gan¨® el PP. ?ste sum¨® a sus 45.000 sufragios de 1996 m¨¢s de los 9.000 de Unidad Alavesa, el partido foralista que pidi¨® el voto para los populares. El PSE-EE vio defraudadas sus expectativas de superar, con voto procedente de IU, la distancia de s¨®lo 3.000 votos que le separ¨® en 1996 del PP y lograr la primera plaza. La diferencia entre ambas fuerzas, de dos puntos hace cuatro a?os, es ahora de quince. ?sta es la cuarta victoria del PP en esta provincia: ya gan¨® en las elecciones generales de 1996, en las auton¨®micas de 1998 y en las locales de junio de 1999. Desde entonces ese partido gobierna, con UA y apoyos socialistas, tanto el Ayuntamiento de Vitoria como la Diputaci¨®n. El PNV se mantiene desplazado a una tercera posici¨®n.El efecto del atentado de ETA fue anular el enfrentamiento entre los dos grandes partidos nacionales y situar al PNV en una dif¨ªcil posici¨®n defensiva, obligado a responder a los ataques del PP y a los de la propia ETA, con los socialistas en una posici¨®n m¨¢s centrada.

El nacionalismo conserv¨® ayer su ¨²nico esca?o, que corresponde al PNV, mientras socialistas y populares se repartieron los restantes tres diputados (dos para el PP, uno para el PSE-EE) y cuatro senadores(tres para el PP y uno para los socialistas). El mismo resultado de hace cuatro a?os. El PP parece encontrar respuesta a su petici¨®n de convertir a ?lava en frontera del nacionalismo.