El PP gana cuatro diputados y logra uno por primera vez en Girona

El Partido Popular catal¨¢n obtuvo una clara mejora de sus resultados en relaci¨®n con los de hace cuatro a?os. Los populares, liderados por el ministro portavoz, Josep Piqu¨¦, elevan de ocho a 12 el n¨²mero de sus diputados en el Congreso, aunque siguen como la tercera formaci¨®n en Catalu?a, por detr¨¢s del PSC-PSOE y de Converg¨¨ncia i Uni¨®.Los populares han logrado por primera vez un esca?o en Girona en unas elecciones generales, con lo que consiguen uno de sus objetivos pol¨ªticos m¨¢s anhelados. Para ello realizaron una campa?a en un tono moderado, sin estridencias, realizando casi todos sus actos en idioma catal¨¢n.

En porcentaje, el PP ha logrado el 22,2 de los votos emitidos en Catalu?a, lo que supone un avance de cuatro puntos.

El n¨²mero dos por Barcelona, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, mostr¨® su satisfacci¨®n ante los primeros datos escrutados y, tras subrayar sus cautelas, asegur¨® que Catalu?a deja de ser "el agujero negro" del PP en Espa?a.

Con los resultados de ayer, el PP catal¨¢n rompe la tendencia a la baja que evidenci¨® en todos los comicios celebrados el a?o pasado, que constituyeron la primera ocasi¨®n de evaluar el relevo en su c¨²pula que el partido vivi¨® en 1996, cuando Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz sustituy¨® a Alejo Vidal-Quadras. En las municipales de junio, los populares perdieron casi 80.000 votos y un concejal en Barcelona. En las auton¨®micas de octubre, el descenso fue todav¨ªa m¨¢s significativo: obtuvo 125.000 sufragios menos que en 1996 y pas¨® de 17 a 12 diputados en el Parlament.

El cabeza de lista por Barcelona y ministro de Industria, Josep Piqu¨¦, enfoc¨® su campa?a con tres objetivos: mejorar los resultados de 1996, afianzarse en el seno del partido -milita en ¨¦l s¨®lo desde enero de 1999 y nunca hab¨ªa pasado por las urnas- y, finalmente, hacer en cierta forma una prueba del llamado efecto Piqu¨¦; es decir, poner a prueba su capacidad para ensanchar la base electoral en Catalu?a. Al realizar su campa?a pr¨¢cticamente en solitario, el ministro se apunta en su hoja personal el supuesto ¨¦xito que su partido ha logrado en esta comunidad.

Piqu¨¦ ha realizado la mayor¨ªa de los actos al margen de las estructuras del partido. Ni siquiera cre¨® formalmente un comit¨¦ de estrategia para evaluar a diario la marcha de la campa?a y fijar la estrategia, con lo que apenas ha intercambiado palabras con los principales dirigentes del PP de Catalu?a.