72 horas de penalidades para hallar la pastilla Madrid es una de las ciudades donde hay mayores dificultades

S¨¢bado de madrugada. Una adolescente madrile?a acude al servicio de urgencias de su barrio porque teme haberse quedado embarazada. Explica que se les ha roto el cond¨®n. Pide la p¨ªldora del d¨ªa siguiente, pero le dicen que no la conocen. Se dirige a otro hospital donde se niegan a recet¨¢rsela. En el tercer hospital al que acude le dan la direcci¨®n del Centro Joven de Anticoncepci¨®n y Sexualidad de Madrid. Pero es viernes, de modo que tendr¨¢ que esperar hasta el lunes para obtenerla.Es un caso muy habitual, uno de tantos a los que tiene que atender Paloma Rivero, psic¨®loga del Centro Joven de Anticoncepci¨®n y Sexualidad de Madrid, que cierra los fines de semana, como la mayor¨ªa de centros de planificaci¨®n familiar. Cada lunes facilita m¨¢s de 40 de estas dosis a j¨®venes que se han pasado el fin de semana deambulando por diferentes servicios m¨¦dicos.

"Estamos muy saturados, no damos abasto", reconoce Rivero, quien asegura que Madrid es una de las ciudades con mayores dificultades para obtener esta p¨ªldora. "La demanda es mucho mayor aqu¨ª porque somos muchos. Y adem¨¢s hay que tener en cuenta que s¨®lo en la ciudad existen cuatro hospitales que se declaran objetores en bloque, y ello implica que ninguno de sus facultativos dispensa el tratamiento poscoital. Es necesario que la sanidad p¨²blica aporte una soluci¨®n definitiva", afirma Rivero.

La psic¨®loga explica que las chicas llegan al centro muy nerviosas, "cansadas de dar vueltas", y es que el tiempo corre durante el peregrinaje en busca de este f¨¢rmaco, que si se administra antes de las 72 horas, tiene una efectividad del 98%. El tratamiento poscoital fue dispensado en el centro madrile?o durante 1999 a 1.253 j¨®venes, frente a las 753 que lo solicitaron en 1997.

En Barcelona, las cosas se ven algo diferentes. Rosa Ros, directora del Centro Joven de Anticoncepci¨®n y Sexualidad de la ciudad, afirma que en los centros sanitarios catalanes, el acceso a la p¨ªldora del d¨ªa siguiente es m¨¢s f¨¢cil, pero a¨²n persisten problemas. De las 6.000 visitas realizadas en 1999 en este centro, un 24% eran de tratamiento poscoital, unas veinticinco a la semana. En estos momentos, en Catalu?a se est¨¢ realizando un esfuerzo para que este f¨¢rmaco sea accesible a las j¨®venes de todos los barrios, dentro del programa de atenci¨®n a la mujer que desarrolla el Departamento de Sanidad de la Generalitat.

En los dos ¨²ltimos a?os, la Sociedad Catalana de Contracepci¨®n, miembro de la sociedad espa?ola, y la Asociaci¨®n de Planificaci¨®n Familiar de Catalu?a y Baleares han hecho un esfuerzo para que todos los centros sanitarios sigan una pauta homog¨¦nea en relaci¨®n a este tratamiento, concretamente la pauta Yuzpe, que establece la dosis exacta de anticonceptivos que se debe administrar. Porque uno de los problemas es la puesta al d¨ªa de los facultativos sobre este tratamiento.

Protecci¨®n primaria

"El tratamiento poscoital es una prevenci¨®n primaria absoluta; si no se dispensa cuando una joven lo solicita, podemos provocar un da?o mucho mayor", subraya Ros. "En nuestro centro atendemos a muchas j¨®venes que han hecho un v¨ªa crucis por centros sanitarios porque son menores de edad y los m¨¦dicos no han querido recetarles el tratamiento alegando su derecho a la cl¨¢usula de conciencia". Pese a los esfuerzos de los grupos de planificaci¨®n, en ¨²ltima instancia, conseguir la p¨ªldora sigue dependiendo en muchas ocasiones de la mentalidad del m¨¦dico que est¨¢ de guardia.