IU, abocada a una regulaci¨®n de empleo por el fracaso electoral
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Tras los desastrosos resultados electorales del 12 de marzo, los trabajadores de la sede federal de Izquierda Unida (IU), una plantilla de 62 trabajadores, est¨¢n abocados a un expediente de regulaci¨®n de empleo. As¨ª lo comunic¨® ayer la direcci¨®n al comit¨¦ de empresa, aunque a¨²n no se ha podido cuantificar a cu¨¢ntos trabajadores afectar¨¢ esta medida. Para hoy est¨¢ prevista una reuni¨®n en la que comenzar¨¢ la negociaci¨®n del expediente. Los trabajadores temen que pueda afectar a m¨¢s de la mitad de la plantilla. Los principales ingresos de la coalici¨®n, como los de cualquier fuerza pol¨ªtica, provienen de las subvenciones que el Estado les da en relaci¨®n a su representaci¨®n en el Parlamento. IU ha pasado de 16 diputados -obtuvo 21 en 1996, pero las escisiones de Nueva Izquierda e Iniciativa per Catalunya los dejaron en 16- a ocho. Y no s¨®lo eso. Tambi¨¦n los votos cuentan a la hora de recibir ingresos del Estado. Y la coalici¨®n ha perdido 1.400.000 de ellos en las ¨²ltimas elecciones.La negociaci¨®n no ha hecho m¨¢s que comenzar. Sobre todo porque la direcci¨®n y especialmente los responsables de finanzas no conocen a¨²n, a s¨®lo una semana de las elecciones, cu¨¢l puede ser la cuant¨ªa de los ingresos que el Estado determine para esta fuerza pol¨ªtica. Hasta que no se constituyan las Cortes no se sabr¨¢ si la coalici¨®n tiene o no representante en la Mesa del Congreso, algo que tambi¨¦n les ha producido hasta ahora importantes ingresos.
Pero lo que est¨¢ claro es que la situaci¨®n, o al menos as¨ª lo asegura la direcci¨®n, es muy complicada y que la plantilla no puede ser la misma que hay ahora. Es algo que ya ten¨ªan claro la mayor¨ªa de los trabajadores en la misma noche electoral, aunque nadie quiere hablar de cifras concretas. En todo caso, ser¨¢ la direcci¨®n la que tendr¨¢ que negociar a partir de ahora esa cifra con los sindicatos.
La direcci¨®n tendr¨¢ adem¨¢s que presentar el balance de gesti¨®n en los ¨²ltimos tres a?os, en los que ya se han vivido varias situaciones de crisis econ¨®mica, para argumentar su decisi¨®n de ir hacia un expediente de regulaci¨®n de empleo, que hasta ahora no se hab¨ªa producido. Y, como en cualquier otra empresa, es muy posible que la batalla acabe en los tribunales.
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