Cultura tendr¨¢ que decidir si accede a que una avenida divida el barrio de El Cabanyal

La responsabilidad de permitir seccionar el barrio de El Cabanyal-Canyamelar de Valencia tal como pretende el Grupo Popular pesa desde ayer sobre la direcci¨®n general de Partimonio de la Consejer¨ªa de Cultura. El PP hizo valer su mayor¨ªa absoluta en el Ayuntamiento de Valencia: aprob¨® la documentaci¨®n del plan especial que contempla la prolongaci¨®n de la avenida de Blasco Ib¨¢?ez hasta el mar as¨ª como remitirla a Cultura y Obras P¨²blicas para que den su visto bueno. El PSPV -que junto a EU se opuso- destac¨® que la decisi¨®n no supone la aprobaci¨®n del plan.

Los primeros en hablar en el pleno fueron ayer tres representantes vecinales que se opusieron al plan municipal. Pero ni sus argumentos ni la intensa cacerolada del centenar de integrantes de la platafoma c¨ªvica Salvem El Cabanyal-Canyamelar -varios de cuyos integrantes se encuentran en huelga de hambre desde hace siete d¨ªas- que ayer se concentraron durante el pleno frente a la puerta de acceso al Ayuntamiento de Valencia impidieron que los 20 concejales del Partido Popular votaran favorablemente a la aprobaci¨®n de la documentaci¨®n del proyecto urban¨ªstico de atravesar los barrios mar¨ªtimos. Precisamente el objeto de la votaci¨®n suscit¨® un debate entre la portavoz socialista Ana Noguera y el secretario municipal, Vicent Miquel. Noguera denunci¨® su "inconcreci¨®n" y quiso dejar claro que la votaci¨®n de ayer no abordaba la aprobaci¨®n del proyecto, total o parcial, ya que que ¨¦ste se encuentra pendiente de los informes de Cultura sobre la situaci¨®n de los imuebles catalogados como Bien de Inter¨¦s Cultural que se demoler¨¢n si se ejecuta el plan. De hecho, el Grupo Socialista se?al¨® que estudia impugnar por posibles defectos de forma la votaci¨®n y por incumplimiento de la ley de Bases de R¨¦gimen Local.

Tras aclarar este aspecto, la portavoz socialista no ahorr¨® cr¨ªticas al proyecto de partir El Cabanyal. Acus¨® a los gobiernos municipales conservadores que se suceden desde 1991 de haber dejado que el barrio se fuera degradando progresivamente para acudir ahora con un plan de rehabilitaci¨®n que supondr¨¢ "la desaparici¨®n de un barrio emblem¨¢tico de la ciudad y la exclusi¨®n social de sus residentes". Este fue otro de los aspectos en los que incidi¨® la edil socialista: la operaci¨®n urban¨ªstica que se esconde detr¨¢s del plan. Un metro cuadrado expropiado se ha pagado a 55.000 pesetas, se?al¨®, frente a las 140.000 de media de metro cuadrado actual, lo que imposibilitar¨¢ que los propietarios de las 1.500 viviendas desalojadas puedan volver a las calles que ocupaban.

Los representantes de Esquerra Unida mantuvieron la l¨ªnea de la oposici¨®n socialista. Manuel Ib¨¢?ez acus¨® al concejal de Urbanismo, el popular Miguel Dom¨ªnguez, de "falta de talante democr¨¢tico", al "ignorar" a los vecinos y optar por el "oscurantismo" en la gesti¨®n urban¨ªstica.

El proyecto "regenerar¨¢ y revitalizar¨¢" el barrio, plante¨® Dom¨ªnguez en representaci¨®n de los populares y bas¨® el apoyo al plan en la idea de que que sus dotaciones "atraer¨¢n" a los j¨®venes y lograr¨¢n un "rejuvenecimiento demogr¨¢fico" de la zona. Antes de comenzar el debate tomaron la palabra tres vecinos que cargaron duramente contra la prolongaci¨®n de Blasco ib¨¢?ez.

La inversi¨®n prevista para acometer el proyecto del Plan Especial de Protecci¨®n y Reforma Interior (PEPRI) de El Cabanyal-Canyamelar ronda los 27.000 millones de pesetas durante los pr¨®ximos seis a?os.