"Nunca me gustaron ni el amor ni el odio exagerados"
M¨¢s de 12 a?os al frente del grupo H¨¦roes del Silencio no le impidieron, llegada la hora, hacer borr¨®n y cuenta nueva. Enrique Bunbury, uno de los creadores m¨¢s personales del panorama pop espa?ol, ha sobrevivido a su propia fama y ahora vuelve a triunfar en solitario. Su primer aviso discogr¨¢fico al margen de H¨¦roes se titul¨® Radical sonora; el segundo asalto, Peque?o, quiso ser el golpe definitivo para convencer a los m¨¢s esc¨¦pticos de que segu¨ªa m¨¢s vivo que nunca. El pr¨®ximo mes de septiembre sacar¨¢ a la luz un nuevo disco, que el propio compositor define como un producto "porte?o, arrabalero, donde Buenos Aires, C¨¢diz y Nueva Orle¨¢ns tienen mucho que ver".Pregunta. ?Tuvo miedo de decepcionar a los incondicionales de H¨¦roes en alg¨²n momento?
Respuesta. No, la verdad es que nunca he hecho los discos pensando en nadie en concreto. Entiendo que haya gente que quiera saltar del barco, a los fans de mi primer grupo puede que no les guste lo que hago ahora... pero tambi¨¦n es posible ganar a gente que no le gustara lo anterior. Nunca pienso en posibles compradores: para m¨ª, grabar es una necesidad biol¨®gica.
P. ?Madurar es empezar a mirarse hacia dentro, hacer disco m¨¢s introspectivos?
R. Es una buena definici¨®n. En el fondo, todos empezamos con una serie de influencias externas, personas a las que queremos imitar o que nos han empujado a seguir su camino. A lo largo de una carrera vas quedando lo m¨¢s limado y puro posible. Y para eso, hay que mirar hacia dentro, ver d¨®nde est¨¢ el coraz¨®n, el germen, la semilla, el motor original. Eso te hace verte como creador, te da una idea de hasta d¨®nde puedes llegar.
P. Su proyecci¨®n internacional no es algo nuevo, ?c¨®mo se entiende su trabajo en otros pa¨ªses?
R. El p¨²blico lo acoge de forma muy diferente, no tiene nada que ver el de Madrid con el de Los ?ngeles o M¨¦xico, pero sobre todo hay dos extremos: en Madrid, el p¨²blico es muy apasionado, quiere hacer de cada concierto una fiesta, en C¨¢diz, por el contrario, es extremadamente atento, escucha y disfruta a la vez; el p¨²blico alem¨¢n simplemente analiza, es muy fr¨ªo... Y en medio de todo esto hay una amplia gama de grises.
P. El nombre de Bunbury siempre ha levantado adhesiones inquebrantables y antipat¨ªas furibundas, ?es consciente de ello?
R. Creo que eso era m¨¢s antes, y poco a poco va desapareciendo. Ojal¨¢ desaparezca del todo, porque nunca me han gustado ni el amor ni el odio exagerados. Hace unos a?os cre¨ªa en eso de que m¨¢s vale que tengan una opini¨®n negativa de ti; ahora quiero ser querido, no tengo ning¨²n inter¨¦s en buscarme enemigos.
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