La derecha amenaza la hegemon¨ªa socialista en las elecciones de Grecia

Contra todo pron¨®stico, las elecciones generales del domingo se han convertido ya en las m¨¢s re?idas de la historia reciente de Grecia. La confianza con que el primer ministro y l¨ªder del Movimiento Socialista Panhel¨¦nico (Pasok), Costas Simitis, anticip¨® los comicios hace dos meses, bas¨¢ndose en el ¨¦xito de su gesti¨®n econ¨®mica y tras la petici¨®n formal de ingreso de la dracma en el euro, puede no ser suficiente para asegurarse la victoria.

Su rival, el joven y nuevo l¨ªder del partido de la derecha Nueva Democracia, sobrino de Constantino Karamanlis -el primer ministro que restaur¨® la democracia en el pa¨ªs tras la dictadura de los coroneles (1967-1974) y encabez¨® la entrada de Grecia en la Uni¨®n Europea en 1981-, ha realizado una campa?a brillante, basada en la necesidad de renovar el escenario pol¨ªtico griego con nuevas caras y en la denuncia de las carencias de los servicios sociales. Seg¨²n los sondeos, le pisa los talones al heredero de Andreas Papandreu.Los l¨ªderes de los grandes partidos apuraban ayer las ¨²ltimas horas de la campa?a para reiterar el cat¨¢logo de promesas propio de toda lucha electoral -aumento de las pensiones, subida del salario m¨ªnimo, m¨¢s empleos, mejoras en educaci¨®n y sanidad- y los llamamientos al voto ¨²til ante lo incierto del resultado. Una incertidumbre que con la continua e interesada filtraci¨®n a la prensa por parte de los partidos de sus sondeos internos -en Grecia est¨¢ prohibida la publicaci¨®n de encuestas desde dos semanas antes de las elecciones- no ha hecho m¨¢s que aumentar.

El propio Simitis, de 64 a?os, que teme que los votantes no recompensen los ¨¦xitos cosechados por su Gobierno desde que fue elegido primer ministro y l¨ªder del Pasok en 1996 -un ritmo de crecimiento anual del 3%, la inflaci¨®n ha ca¨ªdo de m¨¢s del 15% al 2,9% actual, se ha reabierto el di¨¢logo con Turqu¨ªa y ha comenzado la modernizaci¨®n de las infraestructuras del pa¨ªs-, ha tenido que abandonar moment¨¢neamente su perfil de fr¨ªo tecn¨®crata y emplearse a fondo recorriendo pueblos y zonas rurales y revelando algunas de sus aficiones, como ser hincha del equipo de f¨²tbol Olympiakos.

"El domingo ten¨¦is que decidir entre asegurar la prosperidad y la solidaridad social conseguida o dejarlas en manos de un partido [Nueva Democracia] que predica la anarqu¨ªa del mercado", dijo Simitis a su auditorio, la noche del jueves, en un mitin en Pyrgos, una ciudad del oeste del Peloponeso, recordando que s¨®lo el Pasok es capaz de afrontar los retos de modernizaci¨®n que tiene Grecia de aqu¨ª a 2004, cuando se celebren Juegos Ol¨ªmpicos en Atenas, y de garantizar la nueva confianza despertada entre los inversores extranjeros y sus socios de la UE.

En su cierre de campa?a, Simitis afirm¨® ante m¨¢s de 80.000 personas reunidas en Atenas: "No descansar¨¦ mientras quede un solo parado en Grecia".

A favor de Simitis cuenta tambi¨¦n la clara ventaja que le otorgan los sondeos en lo que se refiere a su capacidad como primer ministro frente al debutante Costas Karamanlis, de 44 a?os, cuyo curr¨ªculo pol¨ªtico se reduce a ser diputado por Sal¨®nica. Pero, pese a ser un inexperto en las tareas del Gobierno, Karamanlis ha realizado una campa?a brillante, acusando al Pasok de haberse convertido en un "r¨¦gimen" -los socialistas han gobernado en Grecia ininterrumpidamente desde 1981, excepto durante el periodo 1990-1993 del famoso pacto a la griega entre la derecha y los comunistas- y proponiendo un cambio generacional y de la cultura pol¨ªtica del pa¨ªs. Ya al menos ha conseguido que toda la derecha se presente unida, al lograr que el partido de Antonio Samaras, Primavera Pol¨ªtica, le apoye. En su ¨²ltimo gran mitin de campa?a, celebrado la noche del jueves en el estadio Ol¨ªmpico de Atenas, donde reuni¨® a m¨¢s de 70.000 partidarios, Karamanlis atac¨® con contundencia los puntos d¨¦biles del Gobierno, como el aumento de la inseguridad ciudadana o el deterioro de la educaci¨®n y sanidad p¨²blicas, y calific¨® a Nueva Democracia como la "fuerza tranquila de centro".