Traficantes de droga expulsan de sus tierras a 30 hortelanos de Vallecas
Unos 30 hortelanos que residen en Vallecas han abandonado este mes las tierras que cultivaban desde hace m¨¢s de medio siglo en el arroyo de la Gavia tras las amenazas de un peligroso clan de traficantes de droga procedente de La Rosilla y Las Barranquillas, los dos mayores supermercados de la droga de Madrid, seg¨²n la polic¨ªa.Los invasores han destruido las casetas de campo de los agricultores para levantar en su lugar chabolas que sirven como despachos de hero¨ªna, seg¨²n la denuncia de los vecinos, confirmada por la polic¨ªa. Uno de los hortelanos expulsados sufri¨® la ira de los traficantes y, al tratar de recoger sus cultivos, fue golpeado y apedreado.
Los agricultores han presentado 11 denuncias en la comisar¨ªa de Vallecas Villa. En ellas relatan que familias de etnia gitana se han introducido en sus tierras asegur¨¢ndoles que iban a tener problemas si no abandonaban las fincas.
Los polic¨ªas tratan estos d¨ªas de cercar a los moradores del nuevo n¨²cleo de chabolas con controles diarios en los accesos al arroyo de la Gavia. Hasta el momento, no hay ning¨²n detenido.
Los hortelanos calculan que han perdido unos 7.000 metros cuadrados de cultivos de patatas, habas, guisantes, ajos y cebollas. Adem¨¢s recog¨ªan los frutos de unos 4.000 ¨¢rboles frutales. La mayor parte de los afectados son desempleados que sobreviv¨ªan con los beneficios obtenidos de los productos de la tierra. Todos ellos reconocen que no poseen escrituras como titulares de dichos terrenos, que algunos heredaron de padres o familiares directos.
Los clanes de traficantes irrumpieron en las tierras en los ¨²ltimos d¨ªas de marzo. Por la tarde, cuando la mayor¨ªa de agricultores volv¨ªa a sus casas, los traficantes aprovecharon para ocupar las casas donde guardaban los ¨²tiles de labranzas. Al d¨ªa siguiente, los hortelanos se encontraban con que las familias de etnia gitana hab¨ªan arrasado sus terrenos. Al tratar de entrar recibieron amenazas: "Como regres¨¦is, os vamos a matar".
Los traficantes de droga han puesto a la venta varias parcelas de los hortelanos de Vallecas
Canuto D¨ªez, uno de los hortelanos expulsados, asegura que alguno de los traficantes iba armado. "Ese d¨ªa, lo primero que pens¨¦ es ir a por una escopeta y recuperar lo que era nuestro, pero al final decid¨ª que se podr¨ªa liar una cacer¨ªa y olvid¨¦ la idea". "Lo m¨¢s sorprendente", prosigue Canuto, "es la facilidad con la que hacen las chabolas: en menos de un d¨ªa colocan cuatro palos y la montan".Los agricultores est¨¢n tan asustados que no han vuelto a sus tierras desde entonces. "C¨®mo vamos a regresar si nos han amenazado de muerte y adem¨¢s nos han dicho que saben d¨®nde vivimos", relat¨® Salvador. "Yo me he subido a un cerro para observarles y veo que ya no cuidan los ¨¢rboles ni la siembra. Lo que hacen es recibir a la gente y salir con coches de lujo", denunci¨® otro de los amenazados.
"Estos terrenos estaban muertos hace 30 a?os y nosotros los hemos cuidado y sembrado y les hemos dado vida, y ahora nos echan para vender droga", relataba Augusto.
Casildo Alcocer tambi¨¦n se encontr¨® el pasado 2 de abril con su finca ocupada. "Me dijeron que se hab¨ªan puesto en contacto con los ocupantes de la finca y ¨¦stos les hab¨ªan dicho que el terreno lo hab¨ªan adquirido por cierta cantidad de dinero, sin aportar ning¨²n documento que acredite la mencionada propiedad", dijo Casildo.
Algunas de las parcelas ocupadas por los invasores que trafican con droga se encontraban ayer en venta, seg¨²n comprob¨® este peri¨®dico.
El presidente de la Junta Municipal de Villa de Vallecas, ?ngel Garrido, calific¨® ayer a los clanes invasores del camino de la Gavia como okupas y reconoci¨® que cinco de ellos han sido denunciados ante la polic¨ªa por los antiguos vecinos de la zona. El edil indic¨® a Europa Press que este problema se ha agravado porque los denunciantes ocupaban desde hace muchos a?os unos terrenos sin los permisos oportunos, "por lo que estamos ante okupas de okupas". El edil popular indic¨® que se ha acordado incrementar la vigilancia policial en el camino de la Gavia y proceder, cuando as¨ª lo estime oportuno la autoridad judicial, al derribo de las infraviviendas ilegales levantadas en el lugar.
Asimismo precis¨® que desde el pasado martes han sido derribadas 23 construcciones de estas caracter¨ªsticas en el poblado de Las Barranquillas, de las 200 que exist¨ªan hasta ahora all¨ª. Garrido tambi¨¦n coment¨® que eliminar¨¢n otras viviendas ilegales cuando obtengan el permiso judicial, y puntualiz¨® que la polic¨ªa trabajar¨¢ para conocer mejor a qu¨¦ actividad se dedican los nuevos okupas de la zona.
El concejal recibir¨¢ el lunes pr¨®ximo a los agricultores. "Le vamos a pedir, bien una indemnizaci¨®n o que al menos nos trasladen los ¨¢rboles frutales a otros sitios, porque despu¨¦s de tanto tiempo labrando las tierras somos propietarios morales de ellas", explic¨® Casildo. "Confiamos en que el concejal haga algo, porque de lo contrario puede resultar sospechoso que otorgue su consentimiento a lo que nos han hecho", denunci¨® ayer otro de los afectados.
Chabolas derribadas
La asociaci¨®n de vecinos Ahora, de Vallecas Villa, se reuni¨® ayer con el delegado del Gobierno en Madrid, Pedro N¨²?ez Morgades, y con el concejal del distrito, ?ngel Garrido, para reclamar el desmantelamiento del poblado de Las Barranquillas, que comenz¨® a levantarse en el verano de 1998, tras el derribo de otros hipermercados de la droga de la ciudad. El Ayuntamiento ha derribado 23 casetas instaladas en la zona y ha solicitado a los jueces otros 40 derribos, informa Bego?a Aguirre.
Tanto Garrido como N¨²?ez Morgades se comprometieron a mantener una mayor vigilancia en el poblado, por parte de polic¨ªas nacionales y municipales, para evitar la construcci¨®n de nuevas casetas. En unas semanas se instalar¨¢ en Las Barranquillas la primera narcosala de Espa?a para que los toxic¨®manos m¨¢s deteriorados consuman drogas en un lugar limpio y con apoyo social y sanitario. Eso supondr¨¢ la instalaci¨®n de un equipo estable de atenci¨®n sociosanitaria en la barriada. Para poco despu¨¦s est¨¢ previsto tambi¨¦n el traslado a esta zona del centro de emergencia para toxic¨®manos que ahora funciona en el poblado de La Rosilla, que desaparecer¨¢ en breve, y de un grupo de educadores del Instituto de Realojamiento e Integraci¨®n Social (IRIS).
Pero la asociaci¨®n de vecinos teme que con todos estos dispositivos se acabe consolidando este gueto de reciente creaci¨®n e incluso especulan con la posibilidad de que se vaya extendiendo y llegue al casco urbano de Vallecas Villa, del que ahora est¨¢ alejado. Las nuevas chabolas del camino del arroyo de la Gavia han dado la voz de alarma.
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