El nivel de ruido es menor en Bilbao que en los principales pa¨ªses de la UE

El nivel medio de ruido que soportan los ciudadanos de Bilbao es inferior al que padecen los habitantes de los principales pa¨ªses de la Uni¨®n Europea (UE), seg¨²n el nuevo mapa de la contaminaci¨®n ac¨²stica de la capital vizca¨ªna. Este estudio, elaborado por el centro tecnol¨®gico Labein, fue presentado ayer en las jornadas Hacia un Bilbao sostenible. El mapa pretende ser una herramienta para prevenir la contaminaci¨®n ac¨²stica en los casos en que a¨²n es posible, y en los otros mitigar al menos su nivel.

Tras medir el nivel de ruido en casi 500 puntos de la ciudad, el estudio encargado por el Ayuntamiento concluye que la contaminaci¨®n ac¨²stica en Bilbao es menor que la existente en el conjunto en Espa?a, los Pa¨ªses Bajos, Gran Breta?a, Francia, B¨¦lgica y Alemania. Poco m¨¢s de la mitad de los bilba¨ªnos padece un nivel de ruido inferior a los 55 decibelios, volumen a partir del cual "el ruido crea molestia" seg¨²n la OCDE (Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico). Del resto de la poblaci¨®n, menos del 30% soporta entre 55 decibelios y 65 ("la molestia se incrementa notablemente") y algo menos del 20% sufre m¨¢s de 65 decibelios, lo cual produce "s¨ªntomas de da?o serios". El mapa muestra tambi¨¦n que el principal factor generador de ruido en la capital vizca¨ªna es el tr¨¢fico rodado. En consecuencia, el centro de Bilbao, donde m¨¢s concentrado est¨¢ el tr¨¢nsito de veh¨ªculos, es la zona donde m¨¢s expuesta a la contaminaci¨®n ac¨²stica est¨¢ la poblaci¨®n.La otra cara de la moneda la representan Otxarkoaga y Txurdinaga, seg¨²n el estudio. Estos barrios "de distribuci¨®n b¨¢sicamente residencial" y "amplias zonas verdes" son los m¨¢s silenciosos. Entre ambos extremos queda el barrio de Deusto, un ¨¢rea donde se combinan las ¨¢reas residenciales y ciertas v¨ªas de fuerte tr¨¢fico.

El alcalde de Bilbao, I?aki Azkuna, recalc¨® que la reci¨¦n aprobada Ordenanza de Medio Ambiente es una buena herramienta para sancionar a quienes producen ruido excesivo y para poner las medidas de prevenci¨®n. De todos modos, los autores del mapa de ruidos ya advierten de que resolver los problemas relacionados con el ruido es "costoso" y en ocasiones "incluso inviable".

Labein apunta que, como los seres humanos y las actividades que desarrollan son el origen de la contaminaci¨®n ac¨²stica, el cambio de cultura es imprescindible para reducir ruidos y convertir las ciudades en "ac¨²sticamente sostenibles". En esa l¨ªnea, Azkuna apel¨® al compromiso individual para contribuir a mejorar la calidad de vida en la ciudad.