La guerrilla colombiana libera a un espa?ol tras un cautiverio de 14 meses
La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberaron el s¨¢bado por la noche, en la frontera de Colombia con Venezuela, al espa?ol Enrique L¨®pez Franjo, de 67 a?os, tras 14 meses de cautiverio, junto a otras cinco personas (un australiano y cuatro venezolanos). L¨®pez Franjo fue secuestrado por las FARC el 11 de febrero de 1999 en Barquisimeto, capital del Estado de Lara. "Avejentado y con la boca en muy mal estado", seg¨²n dijo su hija Karina, L¨®pez Franjo repiti¨® que el suyo "era un secuestro equivocado" y dijo no haber temido por su vida.
"Nunca tem¨ª por mi vida. Los que me secuestraron me dijeron que estuviese tranquilo, y los que me mantuvieron en su poder me aseguraron que ellos garantizaban mi vida en todo momento", declar¨® este maestro de obras gallego a la agencia Efe tras su liberaci¨®n, posible gracias a un acuerdo entre el Gobierno venezolano y la guerrilla. L¨®pez Franjo tambi¨¦n relat¨® como, durante el cautiverio, ha estado en 48 campamentos distintos, siempre al aire libre y encadenado a otros rehenes por la noche para evitar posibles fugas. El acuerdo entre Caracas y las FARC, seg¨²n indic¨® anoche un negociador del Gobierno, no contemplaba el pago de rescate e incluye el compromiso de esa guerrilla de no actuar en territorio venezolano. Los otros liberados son Mohamed Chahim, de nacionalidad australiana, y los venezolanos Gi¨¢como Sofiaturo, Ruy S¨¢nchez Pati?o, Agust¨ªn Quir¨®s y Ra¨²l Coello.
Karina L¨®pez recogi¨® a su padre en Caracas, adonde lleg¨® en helic¨®ptero desde alg¨²n punto de la frontera. "Est¨¢ conmigo, muy afectado, pero aparentemente bien", explic¨®. L¨®pez Franjo, junto a su esposa, In¨¦s L¨®pez Mart¨ªnez, de 64 a?os, emigr¨® a Venezuela hace 21 a?os y tiene tres hijos: Karina, de 33 a?os; Ana Catalina, de 31, y Enrique, de 26.
Ayer, y con ayuda de sedantes, Enrique pudo descansar en el apartamento de Karina -a las afueras de Caracas- y relatar parte de lo ocurrido durante estos largos meses. Seg¨²n declar¨® a Efe, el momento m¨¢s duro lo sufri¨® durante las pasadas Navidades, cuando la nostalgia de la familia fue mayor. "Estoy muy agotado, pero moralmente muy contento", dijo L¨®pez Franjo, quien explic¨® que durante el cautiverio fue atendido en dos ocasiones por m¨¦dicos de las FARC que llegaron a vacunarle contra la fiebre amarilla. Sus captores eran "unos ocho o diez hombres armados con fusiles y dos mujeres" y, seg¨²n el ya liberado, le trataron correctamente y le daban comida y ropa limpia cada cierto tiempo.
Un buen sobresalto
A Mar¨ªa del Carmen L¨®pez Franjo, la hermana del secuestrado, la despert¨® el tel¨¦fono a las seis de la ma?ana de ayer, en su casa de Monforte de Lemos (Lugo), localidad natal de Enrique. El sobresalto mereci¨® la pena, porque al otro lado, desde Venezuela, su sobrina Karina le comunicaba la buena noticia. Enrique, a quien Mar¨ªa del Carmen no ve desde hace 20 a?os, se puso luego al tel¨¦fono. "Estaba muy nervioso y apenas tuvimos tiempo para hablar", explic¨® su hermana; "ni siquiera pude preguntarle si va a venir de una vez a Galicia despu¨¦s de tanto tiempo. Tampoco pudo explicarme los detalles de la liberaci¨®n. S¨¦ que las fuerzas policiales estaban perfectamente avisadas de d¨®nde se encontraban y me coment¨® algo de un helic¨®ptero".
"Feliz" y "encantada de la vida", Mar¨ªa del Carmen L¨®pez declar¨® que su hermano le hab¨ªa comentado que se encuentra bien de salud, aunque muy delgado. Su hermana prefiri¨® no preguntarle c¨®mo le hab¨ªan tratado los secuestradores. "Ya tendremos tiempo de hablar de los detalles", insisti¨®, "ahora lo importante es que est¨¢ libre".
El que s¨ª habl¨® del trato recibido fue el ganadero venezolano Ra¨²l Coello: "Est¨¢bamos en la selva y nos tra¨ªan comida y otras necesidades. No nos falt¨® nada. No nos torturaron ni f¨ªsica ni psicol¨®gicamente".
Tras 14 meses de secuestro, Mar¨ªa del Carmen L¨®pez ya hab¨ªa perdido la fe en ver de nuevo a su hermano sano y salvo. Esa sensaci¨®n se agudiz¨® la pasada Navidad, cuando las guerrillas colombianas liberaron a otro grupo de espa?oles que manten¨ªan como rehenes (Marcos Gallego y Jos¨¦ Luis Garc¨ªa). "Empec¨¦ a pensar que este asunto no se iba a resolver nunca", confes¨®. Igual pensaba In¨¦s L¨®pez, la esposa de Enrique, el pasado mes de enero cuando, en conversaci¨®n con El PA?S, se confesaba "secuestrada" y dec¨ªa que aguantaba por sus hijos.
Gestiones oficiales
Mar¨ªa del Carmen agradeci¨® el inter¨¦s del Gobierno espa?ol y del presidente venezolano, Hugo Ch¨¢vez, quien en su ¨²ltimo viaje a Espa?a, record¨® la hermana del secuestrado, se comprometi¨® a resolver el asunto. El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, envi¨® a Enrique y su familia la "m¨¢s cordial enhorabuena" y aprovech¨® para expresar su deseo de que "pa¨ªses tan queridos como Colombia encuentren su camino hacia la paz".
El director de la polic¨ªa pol¨ªtica (DISIP), el militar retirado Eliecer Otayza, present¨® a la prensa al grupo liberado, pero no aclar¨® los detalles del secuestro, como el pago de la recompensa y las gestiones que se realizaron para su liberaci¨®n. "Las FARC tienen una pol¨ªtica de no realizar m¨¢s secuestros en Venezuela. Esta liberaci¨®n se ha podido materializar gracias a la pol¨ªtica del Gobierno venezolano y al equipo que con su arrojo y valent¨ªa intervino. Nuestro agradecimiento a los familiares que participaron", dijo Otayza.
Ahora permanece un espa?ol secuestrado en Colombia, ?ngel Blanco V¨¢zquez, que trabajaba en Venezuela y fue secuestrado por el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN) el 31 de diciembre de 1999 en Barrancabermeja (Colombia).
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