Espa?a sacrific¨® ingresos por estar a la vanguardia de la liberalizaci¨®n

Espa?a ser¨¢ el primer pa¨ªs de Europa en el que, si se cumplen las exigencias del Ministerio de Fomento a las operadoras, se utilice la nueva tecnolog¨ªa m¨®vil multimedia. Finlandia concedi¨® antes las licencias, pero ha impuesto como fecha para iniciar el servicio el 2002, al menos, seis meses despu¨¦s que en Espa?a. El calendario es fiel reflejo de la acelerada pol¨ªtica del Gobierno para liberalizar y ordenar las telecomunicaciones, aun con decisiones pol¨¦micas. Entre ellas, la adjudicaci¨®n de cuatro licencias de telefon¨ªa UMTS el pasado 10 de marzo, dos d¨ªas antes de las elecciones generales. Fomento opt¨® por el m¨¦todo de concurso -mecanismo repetido en el sector-, sin exigir cantidad m¨ªnima a las operadoras por participar y estableciendo s¨®lo una "aportaci¨®n financiera al Tesoro p¨²blico" de 21.500 millones de pesetas a cada uno de los ganadores (Telef¨®nica, Airtel, Amena y Xfera). Los adjudicatarios, que el pasado martes firmaron con la Administraci¨®n, deben satisfacer tambi¨¦n el pago de 250 millones "destinados a sufragar costes derivados de la liberalizaci¨®n del espectro radioel¨¦ctrico", necesario para la implantaci¨®n del servicio. Adem¨¢s, se fij¨® una tasa anual sobre los ingresos de las operadoras.

Tres preseleccionados

Fomento, que desde el primer momento reserv¨® tres licencias para las compa?¨ªas que ya operan (Telef¨®nica, Airtel y Amena), mantiene que este m¨¦todo asegura el desarrollo tecnol¨®gico -se han comprometido inversiones por tres billones- y que se ha actuado seg¨²n los principios de la Comisi¨®n Europea. Seg¨²n fuentes del ministerio, el departamento de Rafael Arias-Salgado consult¨® en varias ocasiones a Bruselas para que orientase el proceso, sin que las autoridades comunitarias pusieran pega alguna en su desarrollo.

Aun as¨ª, el proceso se ha visto afectado por los tradicionales inconvenientes del m¨¦todo de concurso, que se basa en criterios t¨¦cnicos (plan de extensi¨®n de red) y financieros (compromisos de inversi¨®n) que los participantes conocen, pero no saben c¨®mo ponderan en la decisi¨®n final. Las concursantes lanzaron acusaciones de falta de transparencia y favoritismo, pero ninguno ha recurrido. Adem¨¢s, hubo filtraciones a la Bolsa sobre la elecci¨®n del ganador una semana antes de que se anunciara