Un 'greco' resucita en Segovia

La Pascua de Resurrecci¨®n fue especial ayer en la localidad segoviana de Mart¨ªn Mu?oz de las Posadas, de 531 habitantes, porque adem¨¢s se celebr¨® el encuentro del pueblo con El Calvario, un cuadro de El Greco que permanec¨ªa custodiado en un calabozo del cuartel de la Guardia Civil desde hac¨ªa 17 a?os. Durante la homil¨ªa en la misa mayor, tras la procesi¨®n del encuentro de la Virgen con su Hijo resucitado, el p¨¢rroco Miguel Sobrados compar¨® esta obra de arte con Jesucristo, "porque, si ha estado mucho tiempo metida en el calabozo, que ser¨ªa el sepulcro, ahora vuelve al lugar donde deber¨ªa estar, que es aqu¨ª, en la iglesia".

Los habitantes de Mart¨ªn Mu?oz de las Posadas no han dejado salir del pueblo esta obra, atribuida a Dominico Theotoc¨®puli (1541-1614), salvo cuando se restaur¨® en Madrid, hacia 1948, despu¨¦s de la guerra civil, a condici¨®n de que estuviera siempre acompa?ada por un vecino, que incluso viaj¨® en la misma furgoneta que el cuadro.

Las sospechas de que pudieran cambiarlo o de alg¨²n posible deterioro han provocado el recelo de los segovianos, que no han permitido llevar el lienzo de este pintor manierista, cuyos retratos tienen un gran valor expresivo, a muestras como la Expo de Sevilla en 1992 u otra organizada en la capital para exponer el arte sacro de la di¨®cesis de Segovia.

Con motivo de la rehabilitaci¨®n de la iglesia, que conserva construcciones del rom¨¢nico y del g¨®tico, el cuadro fue metido en el calabozo, donde ha permanecido, desde el 29 de abril de 1983, junto a un cuenco de agua que manten¨ªa la humedad del ambiente, cuyo contenido era cambiado convenientemente por los agentes del instituto armado. Incluso cuando llegaba alg¨²n detenido era preciso sacarlo a otra dependencia, pero Sobrados y sus fieles aceptaron esta situaci¨®n con tal de que no fuese almacenado en el Museo Provincial de Segovia en 1993.

A punto estuvo de armarse un nuevo Fuenteovejuna, como advirti¨® a la Junta de Castilla y Le¨®n el entonces alcalde, Francisco Javier Mart¨ªn, del PSOE, hasta que las autoridades auton¨®micas abandonaron su idea. Una quiebra de la empresa constructora y las transferencias a la autonom¨ªa provocaron un retraso en las obras del templo, que prolongaron m¨¢s de la cuenta el arresto de la obra de El Greco titulada El Calvario, donde se aprecia a Jesucristo crucificado, ya muerto, con la Virgen, san Juan Evangelista y un orante. La alcaldesa Mar¨ªa Josefa Nobel, del PP, junto con el cura, transport¨® personalmente el cuadro desde el calabozo hasta la iglesia el Jueves Santo, aunque hasta ayer no se quiso dar car¨¢cter oficial a la exposici¨®n de la obra, que se encuentra tras un cristal blindado y otras medidas de seguridad. Como si se tratara de un hermano, "o alguien a quien conoces plenamente", Sobrados envolvi¨® el cuadro con una manta y con papel de aluminio y lo introdujo en el coche de la alcaldesa.

Mar¨ªa Josefa Nobel dej¨® patente la alegr¨ªa de sus vecinos -"est¨¢n encantad¨ªsimos", coment¨®- y aprovech¨® el acontecimiento para recordar a la Junta de Castilla y Le¨®n que a¨²n quedan obras por realizar, por unos 30 o 40 millones de pesetas, como la limpieza de los retablos central y lateral, donde hay unas pinturas sin catalogar, de varias ¨¦pocas, desde el siglo XIV.

El cuadro lleg¨® en 1834 a Mart¨ªn Mu?oz de las Posadas, entonces perteneciente a la di¨®cesis de ?vila, tras la despoblaci¨®n de Navalperal del Campo, que se inici¨® con la guerra de la Independencia. De este pueblo era natural Andr¨¦s N¨²?ez de Madrid, cura p¨¢rroco de Santo Tom¨¦ de Toledo, quien encarg¨® a El Greco su famosa obra El entierro del conde de Orgaz y quien, adem¨¢s, aparece en el c¨¦lebre cuadro como el oficiante que reza las preces vestido de capa pluvial.

Debido a que el artista hab¨ªa pintado en su entierro m¨¢s personajes o m¨¢s metros se origin¨® una discusi¨®n al liquidar el finiquito y, por la intermediaci¨®n de N¨²?ez de Madrid, el artista cobr¨® finalmente. Como muestra de agradecimiento, en 1595, durante el reinado de Felipe II, El Greco pint¨® El Calvario y se lo ofreci¨® a N¨²?ez de Madrid. Al morir, el cura don¨® sus bienes a Navalperal; entre ellos, este Calvario reci¨¦n rescatado.