Agricultura investiga el uso de animales prohibidos en ensayos cient¨ªficos de una facultad de Sevilla

La Consejer¨ªa de Agricultura y Pesca ha abierto un expediente para investigar si los experimentos del departamento de Fisiolog¨ªa Animal de la Facultad de Biolog¨ªa de Sevilla incumplen la normativa que regula el uso de animales en ensayos cient¨ªficos. La Asociaci¨®n Andaluza para la Defensa de los Animales denunci¨® ante la Junta que el departamento universitario ha utilizado especies no autorizadas, como iguanas o lagartos. En su escrito, avalado por testimonios, fotograf¨ªas y un v¨ªdeo, se?alan que las condiciones higi¨¦nico-sanitarias de los animales son inadecuadas.

La denuncia presentada por la Asociaci¨®n Andaluza para la Defensa de los Animales (Asanda), interpuesta el pasado 1 de diciembre ante la delegaci¨®n provincial de Agricultura y Pesca de Sevilla, sosten¨ªa que el departamento de Fisiolog¨ªa Animal hab¨ªa utilizado especies diferentes a las autorizadas para experimentos cient¨ªficos, como iguanas y lagartos. Adem¨¢s, aseguran que los animales carec¨ªan de las condiciones de alojamiento adecuadas, "se les impide satisfacer sus m¨¢s elementales necesidades etol¨®gicas" y se les somete a experimentos que les provocan "dolor intenso y prolongado". Asanda tambi¨¦n denunciaba la utilizaci¨®n de gatos, "no procedentes de establecimientos autorizados", en los ensayos cient¨ªficos. La organizaci¨®n ha presentado ante la Junta de Andaluc¨ªa fotograf¨ªas y una copia de v¨ªdeo, junto a declaraciones de testigos de los hechos, para avalar su denuncia contra el departamento de Fisiolog¨ªa Animal. Algunas de las acusaciones m¨¢s graves se refieren a la inexistencia de control veterinario sobre los animales y a su suerte, una vez concluidos los ensayos. Seg¨²n la denuncia, algunos eran abandonados "sufriendo varios d¨ªas antes de morir" en lugar de ser sacrificados "eutan¨¢sicamente".

Las acusaciones han originado la apertura de un expediente por parte de la delegaci¨®n provincial de Agricultura y Pesca de Sevilla para determinar si existen infracciones en el uso de animales para ensayos cient¨ªficos. A pesar de que las actuaciones administrativas comenzaron el pasado mes de marzo, el departamento de Fisiolog¨ªa Animal no hab¨ªa recibido notificaci¨®n alguna oficial hasta el d¨ªa de ayer. Tampoco el vicerrectorado de Investigaci¨®n de la Universidad de Sevilla ten¨ªa conocimiento del expediente abierto por la Junta de Andaluc¨ªa contra el departamento de la Facultad de Biolog¨ªa.

El vicerrector de Investigaci¨®n, Jos¨¦ Mar¨ªa Vega Piqueres, explic¨® ayer, una vez informado de las actuaciones administrativas por el departamento, que ha ordenado una investigaci¨®n interna para "comprobar qu¨¦ hay de cierto en la denuncia y poner fin de manera inmediata si esto es as¨ª". Vega asegur¨® que "la Universidad de Sevilla, que ha invertido much¨ªsimo dinero en adaptarse a la directiva europea, no puede permitir esas pr¨¢cticas".

El vicerrector de Investigaci¨®n, que admiti¨® que las denuncias por la utilizaci¨®n de especies no autorizadas son "recurrentes", dijo que depurar¨¢n responsabilidades si verifican que alg¨²n investigador de la Facultad de Biolog¨ªa ha cometido las irregularidades denunciadas por Asanda.

Inversi¨®n

La Universidad de Sevilla ha invertido unos 300 millones de pesetas para cumplir los requisitos legales sobre el uso de animales en ensayos cient¨ªficos. Gran parte del dinero se ha destinado a la construcci¨®n de un animalario en Espartinas (Sevilla), donde se cr¨ªan ejemplares para abastecer a las distintas facultades que realizan investigaciones acad¨¦micas.

La directiva comunitaria que regula estas pr¨¢cticas fue incorporada al ordenamiento espa?ol a trav¨¦s del Real Decreto 223/88, de 14 de marzo, sobre protecci¨®n de los animales utilizados para experimentaci¨®n y otros fines cient¨ªficos. Esta norma, que cubr¨ªa el vac¨ªo existente en Espa?a, restringe los ensayos a determinadas especies, recogidas en un anexo.

Los animales permitidos para experimentos cient¨ªficos son el rat¨®n, la rata, la cobaya, el hamster dorado, el conejo, el perro, el gato, la codorniz o primates no humanos. En el caso de animales dom¨¦sticos, como gatos o perros, el Real Decreto obliga a que se trate de ejemplares criados en establecimientos autorizados para tales fines y deber¨¢n contar con una marca identificativa.

La normativa proh¨ªbe usar en los experimentos a animales salvajes o vagabundos o ejemplares adquiridos en tiendas no autorizadas para el suministro de ejemplares para fines investigadores, que est¨¢n obligadas a contar con un libro de registro de entradas y salidas.