Claramunt contin¨²a plasmando el mar con trazos cada vez m¨¢s simplificados

El mar como punto de partida de la reflexi¨®n es el eje principal de la obra de Luis Claramunt (Barcelona, 1952). El artista, que no expon¨ªa en Sevilla desde 1997, vuelve a la ciudad en la que vivi¨® en los ochenta para presentar la muestra Naufragios y tormentas, en la que re¨²ne 17 ¨®leos con el mar como protagonista. Sus obras, que podr¨¢n verse en la galer¨ªa Juana de Aizpuru hasta el pr¨®ximo 3 de junio, han dejado atr¨¢s cualquier elemento cercano a la figuraci¨®n para adentrarse en una pintura m¨¢s gestual y simplificada.

"En estas ¨²ltimas obras he ido simplificando mucho pero, a la vez, tambi¨¦n hay cuadros bastante barrocos, como el d¨ªptico Naufragio", comenta Luis Claramunt que trata el tema del mar desde sus primeros trabajos a principios de los setenta."El mar tiene siempre ese punto de tragedia. Es un espacio dram¨¢tico y filos¨®fico, un lugar para aventureros. Es un tema que me ha preocupado siempre, desde que era peque?o y que se presta mucho a la reflexi¨®n. Muchas personas al ver mis obras me han preguntado si hab¨ªa sido marino y nunca lo he sido", explica el artista que ha ido simplificando su trabajo en los ¨²ltimos a?os.

"Ahora los gestos son m¨¢s precisos. Ya no necesito un lenguaje aparatoso para contar lo que quiero", a?ade el pintor que trabaja con la galer¨ªa Juana de Aizpuru desde 1987. Precisamente uno de los cuadros de la serie Naugrafios y tormentas fue el que adquiri¨® el rey Juan Carlos para su colecci¨®n particular en la inauguraci¨®n de la feria de Arco, el pasado febrero en Madrid.

"Para mi no existe diferencia entre la pintura figurativa y la abstracta, porque la pintura en s¨ª ya es la imagen de una realidad. Un brochazo puede ser cualquier cosa: un insecto, una letra, una persona. Cuando haces una pintura abstracta tambi¨¦n se parte de una realidad, entonces funciona la imaginaci¨®n y la memoria que es una realidad tan tangible como cualquier otra", asegura el artista que se niega a que le cuelguen etiquetas a su obra.

Sus pinturas, en las que mantiene siempre la tensi¨®n entre dibujo y color, est¨¢n plagadas de embarcaciones que intentan mantenerse a flote en medio de tormentas.

En la exposici¨®n, que estar¨¢ abierta hasta el 3 de junio, pueden verse obras como Aparejo de izar, una composici¨®n con trazos cercanos a las graf¨ªas japonesas y Tormenta de arena, realizada en colores terrizos.