Aviones israel¨ªes destruyen las plantas el¨¦ctricas de L¨ªbano en represalia al ataque de Hezbol¨¢
La aviaci¨®n israel¨ª volvi¨® a destruir en la madrugada de ayer, por tercera vez en menos de un a?o, las principales centrales el¨¦ctricas de L¨ªbano como represalia a los ataques de la guerrilla islamista de Hezbol¨¢, que horas antes hab¨ªa lanzado una lluvia de proyectiles Katiusha sobre la poblaci¨®n civil del norte de Israel. La guerrilla libanesa volvi¨® a responder a media ma?ana de ayer con m¨¢s cohetes. Ante la inevitable espiral de violencia y los llamamientos internacionales a la calma, el Gobierno de Ehud Barak decidi¨® finalmente no responder a ese postrero ataque.
Las principales ciudades de L¨ªbano se quedaron de nuevo sin luz. Las m¨¢s importantes y estrat¨¦gicas centrales el¨¦ctricas, situadas en las cercan¨ªas de Beirut, Tiro y Tr¨ªpoli, que se encontraban en fase de reparaci¨®n tras la destrucci¨®n de hace tres meses, volvieron en la madrugada de ayer a ser pasto de las bombas israel¨ªes.La operaci¨®n de castigo da?¨® asimismo la carretera internacional que une las capitales de L¨ªbano y Siria a su paso por el valle de La Bekaa, provocando en el firme un cr¨¢ter de m¨¢s de cuatro metros de di¨¢metro y alcanzando parcialmente las instalaciones de un centro de los servicios secretos del Ej¨¦rcito sirio.
Los aviones hebreos, antes de regresar a sus bases, castigaron con dureza un rosario de poblaciones rurales situadas al este de Tiro, en el sur de L¨ªbano, regi¨®n considerada por los servicios secretos israel¨ªes como un feudo de Hezbol¨¢, desde donde aseguran que los guerrilleros vienen lanzando sus continuados ataques contra sus posiciones y las de sus aliados, la milicia del Ej¨¦rcito del Sur de L¨ªbano (ESL).
El bombardeo, ordenado y planificado por el Gabinete de Seguridad israel¨ª que preside el primer ministro Ehud Barak, era la respuesta a una lluvia de misiles Katiusha que la guerrilla hab¨ªa lanzado pocas horas antes sobre diversas poblaciones del norte de Israel, especialmente Kiryat Shmona, y que provoc¨® una treintena de heridos y mat¨® a un soldado. Este ataque era, a su vez, la respuesta por un "error" reconocido por la propia aviaci¨®n israel¨ª, que dej¨® dos muertos y 12 heridos entre la poblaci¨®n civil libanesa el pasado mi¨¦rcoles.
La dura represalia israel¨ª, que no amedrent¨® a Hezbol¨¢, provoc¨® otra vez la protesta airada de numerosos pa¨ªses ¨¢rabes y occidentales, entre ellos Francia y Estados Unidos, que condenaron el bombardeo de objetivos civiles. La Liga ?rabe anunci¨® ayer una reuni¨®n extraordinaria para estudiar la situaci¨®n en L¨ªbano.
La poblaci¨®n civil del norte de Israel, que, al contrario que sus vecinos del sur de L¨ªbano, puede protegerse de las bombas en una amplia red de refugios, reclamaba, sin embargo, ayer a gritos operaciones m¨¢s contundentes contra Hezbol¨¢ y los pa¨ªses ¨¢rabes vecinos. El Gobierno israel¨ª decidi¨®, sin embargo, en v¨ªsperas de la fiesta religiosa del sabat, poner puntos suspensivos a la nueva escalada militar y parar los bombardeos.
La espiral de la violencia no parece por ahora afectar a los proyectos del Gobierno laborista israel¨ª, que ayer ratific¨® su firme decisi¨®n de retirarse antes del 7 de julio de la franja de cerca de mil kil¨®metros cuadrados que ocupa en el sur de L¨ªbano y concluir as¨ª una ocupaci¨®n de 22 a?os que ha dejado centenares de muertos.
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