El caudillo de dos siglos
ENVIADO ESPECIALJoaqu¨ªn Balaguer, el candidato de 94 a?os a la presidencia de la Rep¨²blica Dominicana en las elecciones del martes, el zorro m¨¢s enigm¨¢tico de Am¨¦rica Latina, cuenta en sus memorias que recibi¨® de adolescente una escopeta de perdigones de regalo y con ella seg¨® la vida de un ruise?or. Al caer el avecilla a sus pies, sinti¨® el reproche de la conciencia y desde ese d¨ªa nunca port¨® un arma. Probablemente jam¨¢s la haya empu?ado, pero, adem¨¢s de dem¨®crata obligado por las circunstancias, fue c¨®mplice pasivo de las atrocidades cometidas por la dictadura de Rafael Le¨®nidas Trujillo (1930-1961), en la que fue embajador, ministro, vicepresidente y presidente pelele.
El contendiente que puede decidir el nombre del pr¨®ximo jefe de Gobierno de la isla antillana, caso de no imponerse ¨¦l mismo por octava vez, es un hombre excepcionalmente versado en el disimulo y la supervivencia pol¨ªtica, un tribuno populista y conservador al que ¨²nicamente su sinuosa trayectoria define. Mario Vargas Llosa lo entrevist¨® en tres ocasiones durante la investigaci¨®n para su novela La fiesta del Chivo y admiti¨® su fracaso en la disecci¨®n del personaje, la perplejidad que le produc¨ªa la impenetrabilidad del hombre y del pol¨ªtico. Otros lo hab¨ªan intentado casi medio siglo atr¨¢s, para conocer sus intenciones como presidente heredero a la muerte del tirano Trujillo, asesinado el 30 de mayo de 1961, y tambi¨¦n fueron vencidos. John Barlow Martin, uno de ellos, fue mucho menos bondadoso que el genial escritor de Arequipa en sus conclusiones.
"De todas las personas con las que convers¨¦, Balaguer es la ¨²nica que sigue siendo un enigma para m¨ª. Su pose es la de un poeta, escritor, intelectual que favorece la libertad y la democracia, que no le gusta el autoritarismo, y, en cuanto a ¨¦l mismo, s¨®lo desea retirarse de la vida p¨²blica y terminar la vida entre sus libros". Martin fue enviado especial del presidente estadounidense John F. Kennedy a la Rep¨²blica Dominicana, en septiembre de 1961. "Contra eso [contra la pose] tenemos su historial. Durante casi los 30 a?os del terror del General¨ªsimo, ocup¨® un puesto en el Gobierno". Nada m¨¢s lejos en las intenciones de Balaguer, entonces y ahora, que retirarse a su biblioteca. Segundo en las encuestas, disputa dentro de dos d¨ªas la presidencia a los candidatos del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hip¨®lito Mej¨ªa, socialdem¨®crata, y del gubernamental Partido de la Liberaci¨®n Dominicana (PLD), marxista en sus or¨ªgenes, el centrista Danilo Medina.
Joaqu¨ªn Balaguer, que gobern¨® un cuarto de siglo en diferentes periodos, siempre flanqueado por las denuncias de fraude, fue un misterio hasta para Rafael Le¨®nidas Trujillo, quien no entend¨ªa su ascetismo, su renuncia a los placeres de la vida, su desinter¨¦s por hacerse rico robando al pr¨®jimo. Ciego desde hace 20 a?os, escurridizo, sabio en el hallazgo de oportunidades y alianzas, parece haber actuado en las etapas m¨¢s comprometidas de su trayectoria con los ojos tapados, en sinton¨ªa con una de sus frases memorables: "En pa¨ªses como el nuestro hay muchas situaciones complejas que hay que entender a veces como un ciego y otras veces como un invidente".
El or¨¢culo dominicano, el l¨ªder del Partido Reformista Social Cristiano, cape¨® episodios cruciales, y fue el jefe de Gobierno que, empujado por las manifestaciones callejeras, los abucheos y la presi¨®n internacional, facilit¨® el tr¨¢nsito hacia la democracia. La revoluci¨®n de Fidel Castro hab¨ªa triunfado en enero de 1959, y dos a?os despu¨¦s la oposici¨®n izquierdista de Santo Domingo reclamaba pat¨ªbulos para los esbirros trujillistas y la expulsi¨®n del hombre que igual glos¨® la magnificencia de Trujillo, el Benefactor de la Patria, que, sobre su cad¨¢ver, prometi¨® recuperar el Estado de derecho.
Kennedy comunic¨® a sus asesores el dilema de su Gobierno durante el a?o de la violenta transici¨®n: "Hay tres preferencias en el orden de preferencias: un r¨¦gimen democr¨¢tico, la continuaci¨®n del r¨¦gimen de Trujillo o un r¨¦gimen castrista. Debemos apuntar hacia el primero, pero no podemos renunciar al segundo hasta que estemos seguros de que podemos evitar el tercero". Todos desconfiaban de los movimientos de Balaguer: el hijo del s¨¢trapa, Ranfis Trujillo, jefe de as Fuerzas Armadas; los militares; la oposici¨®n y EE UU. "Creo que lo necesitamos", recomend¨® John Barlow Martin, "pero nosotros no debemos confiar nunca en ¨¦l, debemos aceptarlo con grandes y ocultas reservas y no quedar embarcados en su democratizaci¨®n de fachada".
Balaguer 2000-2004, un presidente de dos siglos, proclama un cartel en la entrada de la casa del pr¨®cer, un domicilio cuya puerta barre diariamente Celenia, la enana encargada de escobar los conjuros y males de ojos lanzados contra un caudillo que apenas puede dar un paso y que en la oscuridad demuestra una vista de lince. "Una vez m¨¢s, por necesidad", "Vuelve, vuelve y vuelve Balaguer" y "Sin ti el pa¨ªs se hunde", jalean otras leyendas en las calles de Santo Domingo. Washington no dej¨® que Balaguer se hundiera, y lo apadrin¨® en su exilio a la carrera (1962-1966). Un golpe de Estado habr¨ªa de deponer al izquierdista Juan Bosch, su hist¨®rico rival durante cuatro decenios, en septiembre de 1963, despu¨¦s de que ganara las elecciones de un a?o antes, las primeras despu¨¦s de la era Trujillo. Sus consecuencias fueron tr¨¢gicas.
La guerra civil estalla en 1965, y el pa¨ªs es invadido por EE UU. Corre la sangre, y vuelve Joaqu¨ªn Balaguer como el candidato de Washington, el ¨²nico en liza, escoltado por las tropas norteamericanas. Gana, por tanto, las presidenciales de 1966, organizadas por la CIA, y desata una represi¨®n feroz contra todo aquello que huela a comunismo; es reelegido en 1970 y en 1974. Cuatro a?os despu¨¦s, en 1978, triunfa el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), con Antonio Guzm¨¢n, y este partido conserva el Gobierno al imponerse de nuevo, con Jorge Blanco, en 1982; pero Balaguer recobra el poder en 1986 tras un protestado escrutinio, y lo mantiene en los comicios de 1990 y 1994. En las elecciones de 1990, los mu?idores del balaguerismo impidieron el triunfo de Bosch, utilizando un eslogan canallesco: "Ese hombre est¨¢ loco". Hace seis a?os el fraude contra el socialdem¨®crata Jos¨¦ Francisco Pe?a G¨®mez fue tan clamoroso que el camale¨®nico anciano debi¨® aceptar un recorte de su mandato: de cuatro a dos a?os, y una reforma constitucional que prohibi¨® la reelecci¨®n autom¨¢tica.
Joaqu¨ªn Balaguer, aunque no pudo aspirar a la presidencia en 1966, trabaj¨® a fondo para impedir que la consiguiera G¨®mez, el candidato del PRD. Le imput¨® su condici¨®n de negro de origen haitiano, y minti¨® en las tribunas proclamando que las intenciones ¨²ltimas de aqu¨¦l eran fusionar la Rep¨²blica Dominicana con la despreciada Hait¨ª, la naci¨®n que ocupa la otra porci¨®n de la isla La Espa?ola. El eterno aspirante vuelve rejuvenecido por el ansia de poder, las intrigas pol¨ªticas y un mes de hospitalizaci¨®n en Houston ( EE UU), y ans¨ªa cobrarse su decisivo apoyo a Leonel Fern¨¢ndez, actual presidente, en la segunda vuelta de las elecciones de hace cuatro a?os.
"Pareciera que en cada coyuntura apareciera un padrino que devuelve la vigencia, como en un pacto infernal", se?ala el analista Adriano Miguel Tejada, "al hombre que desde 1930 para ac¨¢, cada vez que cae en desgracia, resurge como el Ave F¨¦nix desde sus cenizas". Escol¨¢stico, orador a la antigua, hispanista a ultranza y erudito, ha escrito m¨¢s de 30 libros, y su peripecia personal es todo un tratado de navegaci¨®n en aguas turbulentas.
La incompetencia y corrupci¨®n registradas en los dos Gobiernos del PRD, y una izquierda que de revolucionaria pas¨® a bandolera, fueron elementos que facilitaron los sucesivos regresos de un camale¨®n al que el 78% de los habitantes de este pa¨ªs de cerca de ocho millones de personas y una gran pobreza a¨²n atribuyen poderes sobrenaturales.
Es el hombre al que una vez un diplom¨¢tico regal¨® una tortuga gal¨¢pago de vida centenaria que fue rechazada por el inmortal pol¨ªtico con estas palabras: "No, que luego se mueren estos animalitos y a uno le da mucha pena".
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