La Agencia del Agua prepara medidas para frenar la sobreexplotaci¨®n de acu¨ªferos
La situaci¨®n l¨ªmite de tres acu¨ªferos catalanes ha llevado a la reci¨¦n creada Agencia Catalana del Agua a estudiar distintas medidas reguladoras para garantizar los niveles suficientes de agua de boca en las poblaciones afectadas. Los acu¨ªferos objeto de estudio son el de la desembocadura del r¨ªo Tordera, donde se ha detectado una "preocupante" intrusi¨®n salina; el de Montseny-Guilleries, en el que han aparecido varias fuentes secas, y el de Carme-Capellades, en la Anoia, donde existe una importante presi¨®n debida al consumo industrial. En los tres acu¨ªferos mencionados, y por distintos motivos, parecen existir indicios suficientes para pensar que se est¨¢ produciendo una sobreexplotaci¨®n.
En ninguno de los tres casos, ha explicado a este diario Marta Lacambra, directora de la Agencia Catalana del Agua, puede hablarse de "situaci¨®n l¨ªmite", aunque ¨¦sta podr¨ªa darse, admite, si se corroboraran las sospechas de sobreexplotaci¨®n y se mantuvieran los actuales escasos ¨ªndices de pluviosidad. En ese caso, afirma, deber¨ªan tomarse medidas restrictivas que s¨®lo podr¨ªan compensarse por "el uso de fuentes alternativas".En el caso del acu¨ªfero Montseny-Guilleries, la alerta ha saltado en los tres ¨²ltimos meses ante la aparici¨®n de varias fuentes secas, lo cual podr¨ªa constituir un signo de que los niveles de agua subterr¨¢nea se encuentran por debajo de sus valores normales. La raz¨®n del descenso podr¨ªa ser la sequ¨ªa que padece Catalu?a, pero tambi¨¦n la intensa actividad extractiva que se lleva a cabo en una zona en la que se concentran varias plantas embotelladoras y potabilizadoras.
Como primer paso, la Agencia ha creado una comisi¨®n de trabajo conjunta con el Departamento de Industria con el objetivo de "cruzar los dos censos y comprobar si existe una situaci¨®n abusiva". Las concesiones para la extracci¨®n de aguas minero-medicinales dependen de Industria y las relativas a otros usos, como el consumo de boca, riego o industrial, dependen de la Agencia. La desconexi¨®n entre ambas instituciones podr¨ªa haber llevado, admite Lacambra, a un exceso en el n¨²mero de concesiones. En caso de que as¨ª sea, indica, deber¨ªan tomarse medidas restrictivas para favorecer la recarga del acu¨ªfero.
La situaci¨®n del acu¨ªfero de la desembocadura del r¨ªo Tordera se ha descubierto tras la detecci¨®n de niveles excesivamente altos de salinidad. El bajo nivel del acu¨ªfero ha permitido la entrada reciente de cloruros que comprometen el uso del agua para el consumo de boca y de riego, as¨ª como para determinadas aplicaciones industriales. El ¨²nico modo de frenar la intrusi¨®n salina ser¨ªa recargando el acu¨ªfero hasta sus valores normales.
Aunque la situaci¨®n en este caso tampoco es l¨ªmite, seg¨²n Lacambra, se han previsto distintas opciones para "garantizar el agua de boca en Blanes y Sant Pol", dos de las poblaciones m¨¢s afectadas, especialmente ante la inminencia del periodo estival. Entre las medidas propuestas se baraja como primer paso acceder a pozos alternativos o incluso tratar de interconectar los sistemas Ter-Llobregat a trav¨¦s del Maresme y la Costa Brava para garantizar el abastecimiento del agua. Existe un acuerdo firmado entre los consorcios de la Costa Brava y del Maresme para garantizar la llegada del agua y s¨®lo queda por ver si t¨¦cnicamente es posible la conexi¨®n.
Ronda de contactos
El pr¨®ximo mes de junio, ha indicado Lacambra, se tomar¨¢ una decisi¨®n sobre la figura de protecci¨®n del acu¨ªfero de acuerdo con las alegaciones presentadas por todas las partes afectadas (regantes, consumidores agr¨ªcolas y dom¨¦sticos y administraci¨®n), con las que ya se ha iniciado una primera ronda de contactos. Ser¨¢ entonces, afirma la directora de la agencia, cuando se decidir¨¢ si se crea una comunidad de usuarios que autoregule los usos de acuerdos con las prioridades legales o si se opta por una figura "mucho m¨¢s restrictiva": declarar sobreexplotada esta zona.
La creaci¨®n de una comisi¨®n de usuarios ha sido, precisamente, la opci¨®n escogida para el acu¨ªfero Carme-Capellades, en la comarca del Anoia. Las aguas de este acu¨ªfero se han considerado t¨¦cnicamente sobreexplotadas y, por tanto, necesitadas de regulaci¨®n. "Se trata de una comarca muy poblada y con un uso industrial intensivo", se?ala Lacambra, "que depende de recursos fundamentalmente subterr¨¢neos".
En este caso, la administraci¨®n ha instado a los ayuntamientos, representantes de la industria, regantes y consumidores dom¨¦sticos a consensuar unos estatutos que permitan constituir la comunidad de usuarios. Una vez constituida la comunidad y dado el compromiso de la Generalitat de llevar agua desde Piera hasta Igualada a trav¨¦s del sistema Ter-Llobregat, la comarca dispondr¨ªa de una fuente complementaria al acu¨ªfero y podr¨ªan regularizarse sus usos sin necesidad de declarlo sobreexplotado. Por ejemplo, indica Lacambra, empleando agua subterr¨¢nea para riego, subterr¨¢nea y superficial para usos de boca y superficial para usos industriales.
Acu¨ªferos protegidos
Los acu¨ªferos del Bajo Tordera y del Carme-Capellades forman parte de la lista de 23 bolsas de agua subterr¨¢nea que el Gobierno de la Generalitat delimit¨® y protegi¨® por decreto en 1988. Ya en ese decreto se preve¨ªa la constituci¨®n de comunidades de usuarios como garantes de repartir equitativamente los usos del agua de acuerdo con las prioridades determinadas por ley, esto es, usos de boca, riego, usos industriales y aprovechamientos energ¨¦ticos. Tambi¨¦n en el texto se recog¨ªa la forma jur¨ªdica de "acu¨ªfero sobrexplotado" la cual, seg¨²n puede leerse, deroga a favor de la Administraci¨®n los derechos de extracci¨®n o explotaci¨®n del acu¨ªfero. El acu¨ªfero del Bajo Tordera, que incluye las localidades de Blanes, Tordera, Malgrat de Mar, Fogars de Tordera y Palafolls, se encuentra en una zona especialmente conflictiva, no s¨®lo por los altos ¨ªndices de salinidad, sino tambi¨¦n por la existencia de cultivos intensivos que agravan el riesgo de contaminaci¨®n por nitratos.
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