El marat¨®n castizo del 'Boker¨®n Cinema'

Eran las dos de la madrugada del viernes. Quinta planta del C¨ªrculo de Bellas Artes madrile?o. La m¨²sica dance pinchada por una Alaska de pelo incendiado y su alter ego en Fangoria, Nacho Canut, invitaba al baile en una sala contigua a oscuras. Pero la mayor¨ªa de los 16 creadores de cortometrajes malague?os, que hab¨ªan acudido a Madrid de la mano del ?rea de Cultura de la Diputaci¨®n, buscaba un respiro. Muchas obras de la generaci¨®n Boker¨®n Cinema, que se ha lanzado a filmar con tanta tardanza como entusiasmo, hab¨ªan sido proyectadas durante tres horas y pico en una maratoniana sesi¨®n a prueba de amantes de Tarkowsky. Entre las copas y la conversaci¨®n con los numerosos amigos que hab¨ªan acudido a ver su "estreno" capitalino, quer¨ªan digerir su gloria.Catorce horas antes, en el vag¨®n de un Talgo M¨¢laga-Madrid, el realizador Ignacio Nacho aseguraba que lo realmente ¨²til para un cineasta es que las instituciones contribuyan econ¨®micamente a la producci¨®n de los proyectos. "A un m¨²sico, a un grupo de teatro, les pagan cuando act¨²an; el autor de cortos debe gastarse un dinero respetable para hacer su obra para luego contentarse con que ¨¦sta simplemente se proyecte; yo llevo varios a?os visitando festivales donde aplauden mis cuatro pel¨ªculas; ahora me gustar¨ªa que no me fuese tan dif¨ªcil seguir creando", afirmaba Nacho.

La diputada de Cultura Montserrat Reyes, que junto al presidente de Diputaci¨®n, el socialista Juan Fraile, encabezaba la nutrida delegaci¨®n institucional, recogi¨® el guante. Prometi¨® aplicar para el a?o que viene el modelo de ayudas a la producci¨®n cinematogr¨¢fica seguido por la Diputaci¨®n de Barcelona. O sea que en 2001 dar¨¢n pesetas o euros para escribir y producir pel¨ªculas. Tambi¨¦n asegur¨® que Diputaci¨®n y C¨ªrculo seguir¨¢n exportando/importando productos del Boker¨®n Cinema. "Ahora somos nosotros quienes tenemos que exigirle a los pol¨ªticos c¨®mo deben hacer las cosas, aunque como artistas no debamos esperar demasiado de ellos". aseguraba ayer Emilio Mula, autor de un imaginativo trabajo de animaci¨®n digital.

Cierto es que prensa nacional y famosos del cine se ausentaron de la convocatoria. Y que entre los 16 invitados no estaba el cortometrajista malague?o m¨¢s galardonado de la historia, Ram¨®n Salazar, que con su Hongos ya lleva 18 premios y que precisamente ayer proyectaba en otro local de Madrid. Pero igualmente cierto es que el p¨²blico llen¨® el aforo de 300 personas de la sala de proyecci¨®n del C¨ªrculo durante m¨¢s de tres horas.

La mayor objeci¨®n que debe ponerse a la iniciativa es que tanto corto junto resulta demasiado largo. Junto a ejercicios primerizos de dudosa factura t¨¦cnica , se exhibieron aut¨¦nticas obras de cineasta. Pero el p¨²blico fue, como poco, respetuoso con todas.

El bar¨®metro de aplausos no dej¨® lugar a dudas: el rey indiscutible fue el cortometraje Casa Paco de Ignacio Nacho, que encendi¨® al respetable tras dos horas largas de emisi¨®n. Los 8 minutos de blanco y negro rodados en 16 mil¨ªmetros por Nacho guardan carne y creatividad de artista. Su obra acaba de ser premiada en el festival de Palma de Mallorca y seleccionada en seis festivales m¨¢s. Una distribuidora de Barcelona acaba de contratar a Nacho. Pero el festival de Cine Espa?ol de M¨¢laga no ha querido seleccionarla.

Tambi¨¦n rieron La Bola Peluda de Ben Gordon, El Ca?¨ª de Beneroso & L¨®pez & Canalla o animaron a Las Psycholettes castradoras filmadas por Pedro Temboury. Aplaudieron la bella historia de ?ngel, el homenaje a Arrebato y el sistema Betamax de Mario L¨®pez en Play, las sugerentes videocreaciones de Regina ?lvarez, el Ascendente de Mula y se divirtieron horrores con el desmadre gore de Rafatal en Desconocido.