El fiscal cree concluida la investigaci¨®n del 'caso Rubio' pese a no haberse aclarado el m¨®vil, un a?o despu¨¦s del crimen

Un a?o despu¨¦s de que Vitoria se viera convulsionada por un nuevo crimen, el ¨²ltimo de una larga serie y que en este caso acab¨® con la vida de la joven abogada Bego?a Rubio en su despacho profesional, la instrucci¨®n se encuentra "pr¨¢cticamente terminada", seg¨²n destaca el fiscal jefe Alfonso Aya. Sin embargo, tanto el responsable del Ministerio p¨²blico en ?lava como el consejero de Interior, Javier Balza, aventuraron tras la detenci¨®n del imputado Koldo Larra?aga el 28 de mayo de 1999, cuatro d¨ªas despu¨¦s del asesinato, que se pod¨ªa tratar del autor de cuatro cr¨ªmenes ocurridos en la ciudad a lo largo de 16 meses, circunstancia que finalmente no se ha podido demostrar. Ni siquiera se ha desvelado el m¨®vil de este truculento suceso, a pesar de que las acusaciones particulares avanzaron hace un a?o una l¨ªnea de investigaci¨®n en la que se contemplaba la existencia de un pago o recompensa en el delito, es decir, hablaban de un hipot¨¦tico homicidio por encargo. La autoinculpaci¨°n del ¨²nico detenido, Koldo Larra?aga, un guipuzcoano afincado en Vitoria que hab¨ªa deambulado durante a?os por negocios fracasados junto a socios a los que ¨¦l mismo tem¨ªa -asegur¨® que llevaba una navaja para defenderse de ellos-, allan¨® el camino de la investigaci¨®n. "No se puede decir que la instrucci¨®n haya sido sencilla, pero la autoinculpaci¨®n y las pruebas que se han encontrado han facilitado las cosas", indica Alfonso Aya "La actuaci¨®n de la polic¨ªa ha sido muy exhaustiva e intensa".

La letrada recibi¨® seg¨²n un estudio del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa 14 pu?aladas en distintas partes del cuerpo, varias de las cuales le ocasionaron la muerte por deg¨¹ello. El autor del crimen se limit¨® a robar 4.500 pesetas del despacho.

Larra?aga hab¨ªa visitado durante dos d¨ªas varios despachos de abogadas de la ciudad en demanda, seg¨²n dec¨ªa, de una asesor¨ªa legal. En la tarde del 24 de mayo de 1999 acudi¨® al de Bego?a Rubio despu¨¦s de haber concertado una entrevista con ella, y all¨ª fue donde presuntamente atac¨® a la joven, que era representante de la asociaci¨®n Clara Campoamor de defensa de menores y mujeres maltratadas.

Tras su detenci¨®n en Madrid, asumi¨® su autor¨ªa en esta acci¨®n y en el asesinato del empresario de m¨¢quinas tragaperras Agust¨ªn Ruiz, ocurrido en agosto de 1998. Las pruebas halladas junto al cad¨¢ver de la abogada sirvieron para reforzar la tesis de su autor¨ªa. Un estudio pericial elaborado por los psiquiatras Miguel Guti¨¦rrez y Mar¨ªa ?ngeles Salazar determin¨® que Larra?aga no tiene trastornos de personalidad y que era plenamente consciente de sus actos cuando presuntamente cometi¨® el crimen.