La orfebrer¨ªa de la voz

Elena Bourke, la reina cubana del feeling, dijo de ellas que son cuatro gemas que brillan con luz propia y, hasta el momento, nadie se ha atrevido a desmentirla. Estela Guzm¨¢n, Odette Teller¨ªa, Michelle Aldarete y Laura Flores se pusieron a cantar juntas por casualidad, en una fiesta entre amigos que celebraron en La Habana hace diez a?os.Del encuentro han nacido ya tres discos y una sucesi¨®n continua de actuaciones, tanto en la isla caribe?a como en Europa y Estados Unidos. Sus voces tienen tantos matices y sus propietarias tanto valor que cantan a capella. Tan s¨®lo en el ¨²ltimo ¨¢lbum, titulado Gemas y que acaba de editar la discogr¨¢fica catalana Picap, han incluido algunos temas musicados.

"Fuimos a una descarga (reuni¨®n de amigos) y tuvimos la inmensa suerte de que Elena Bourke nos oyera cantar. Ella nos invit¨® a la gran fiesta que organiz¨® para celebrar sus 50 a?os de vida art¨ªstica y cuando nos present¨®, como no ten¨ªamos un nombre dijo que ¨¦ramos cuatro gemas, cuatro joyas. Viniendo de alguien como ella, nos quedamos con el nombre para siempre", explica Estela Guzm¨¢n (La Habana, 1962).

Gema 4 naci¨® en el momento en el que la Reina del feeling las puso en un escenario en 1991 y con un objetivo concreto: rescatar los ritmos que la omnipresente salsa hab¨ªa eclipsado. "Siempre hemos hecho la m¨²sica popular cubana que otros hab¨ªan dejado de lado. Los viejos sones, guarachas, boleros, mambos o feeling son para nosotras una fuente inagotable. Ahora todo esto resulta muy familiar y conocido gracias a gente tan maravillosa como Omara Portuondo, Compai Segundo o Ibrahim Ferrer; pero entonces estaba olvidado", dice Odette Teller¨ªa (La Habana, 1972).

Las cuatro cantantes, que comenzaron en el Coro Nacional de Cuba, viven en una continua gira desde que comenzaron a actuar en el extranjero en 1994. "Tenemos m¨¢s horas de vuelo que un piloto de Iberia", apunta Michelle Alderete (la Habana, 1974). Estas cuatro chicas que por separado ninguna se llama Gema y, juntas, todas son gemas; hacen en su ¨²ltimo trabajo sus propias versiones de Silvio Rodr¨ªguez, Efra¨ªn R¨ªos o Joan Manuel Serrat.

"Cuando estuvimos en Sevilla, en el Festival de It¨¢lica de 1996, s¨®lo cant¨¢bamos temas a capella. La ausencia de m¨²sica hace que se rompa la barrera que normalmente hay con el p¨²blico. La gente se anima m¨¢s a cantar, casi m¨¢s alto que nosotras. Es un espect¨¢culo interactivo que, a veces, se nos ha ido de las manos porque, literalmente, alguien del p¨²blico ha subido al escenario", recuerda Michelle Alderete.

Las Gemas, que a partir del 17 de junio se instalar¨¢n durante un mes en la sala Capitol de Barcelona y el 22 de septiembre llegar¨¢n al Teatro Falla de C¨¢diz, est¨¢n convencidas que el ¨¦xito del que gozan los m¨²sicos cubanos en Europa se debe en parte a la pel¨ªcula Buena Vista social club, de Wim Wenders (1998) en la que ellas tambi¨¦n intervinieron.

"Por fin se est¨¢ reconociendo el gran inter¨¦s de la m¨²sica cubana. La fusi¨®n entre lo espa?ol y lo africano la ha convertido en una m¨²sica impetuosa, llena de vida. Hay miles de g¨¦neros, algo que se da en pocos pa¨ªses, quiz¨¢ tan s¨®lo en Brasil. La verdad es que este amor por lo cubano puede que sea fruto de una moda en casi toda Europa, pero en Espa?a", afirma Laura Flores (La Habana, 1969) que, como el resto de sus compa?eras ha nacido para cantar y no puede dejar de hacerlo ni siquiera cinco minutos. Se le va el canto al cielo.