La Filmoteca re¨²ne en un ciclo las pel¨ªculas del genial Kenji Mizoguchi

En su af¨¢n de dar a conocer el mejor cine japon¨¦s cl¨¢sico, tras los amplios ciclos dedicados a los directores Yusujiro Ozu, Mikio Naruse y Akira Kurosawa, durante los meses de junio y julio, Filmoteca Espa?ola ofrece en sus dos salas del castizo cine Dor¨¦ un amplio homenaje al genial director Kenji Mizoguchi. De las 85 pel¨ªculas realizadas durante sus 33 a?os de carrera, s¨®lo han sobrevivido treinta y tantas, que son las programadas, gracias a la ayuda del Instituto Japon¨¦s de Cultura.Hijo de un modesto carpintero, la infancia del japon¨¦s Kenji Mizoguchi (Tokio, 1898; Kyoto, 1956) est¨¢ marcada por la venta de una de sus hermanas como geisha, hecho que tiene gran influencia en su obra.

Durante los a?os veinte rueda 43 pel¨ªculas mudas. La llegada del sonoro supone un descenso en la febril actividad de Kenji Mizoguchi y durante los a?os treinta s¨®lo realiza 18 pel¨ªculas, pero enseguida se habit¨²a al nuevo lenguaje, desarrolla su personal t¨¦cnica del plano-secuencia, que le hace famoso, y contin¨²a con las historias realistas que exponen c¨®mo la sociedad considera a la mujer una simple mercanc¨ªa.

A mediados de los a?os treinta, Mizoguchi comienza a trabajar con el guionista Yoshikata Yoda, su colaborador habitual durante el resto de su obra. En la posguerra, Mizoguchi hace sus pel¨ªculas m¨¢s ambiciosas, sociales y pol¨ªticas, protagonizadas por la gran actriz Kinuyo Tanaka.

Aunque a lo largo de su vida profesional Kenji Mizoguchi dirige 85 pel¨ªculas, la mayor¨ªa de gran calidad, en Occidente s¨®lo se conocen la ¨²ltima decena, las brillantes producciones hist¨®ricas de los estudios Daiei.

El tono melodram¨¢tico de sus historias, su alto grado de exotismo, la fuerza reivindicativa de sus personajes femeninos y sus largos, barrocos y complejos planos-secuencia, le convierten en el gran director japon¨¦s y en uno de los cl¨¢sicos del cine mundial.