Rato, en la trampa saducea

La gasolina y dem¨¢s combustibles no es que ardan, pero recalientan la econom¨ªa en t¨¦rminos casi explosivos. Transportistas, agricultores, taxistas, empresarios de gasolineras, han manifestado en los ¨²ltimos d¨ªas su disgusto y preocupaci¨®n por las continuas alzas en el precio de los carburantes y la repercusi¨®n que esto va a tener sobre los resultados de sus respectivos sectores. El resto de consumidores, la pr¨¢ctica totalidad de la ciudadan¨ªa, rumiamos con sordina nuestro cabreo y asentimos en el silencio de nuestros hogares a las quejas que formulan los dirigentes de organizaciones de consumidores y usuarios. Adem¨¢s, la patronal de las grandes empresas de transportes ya ha anunciado que en breve habr¨¢ subida de las tarifas, que repercutir¨¢n indudablemente a¨²n m¨¢s en nuestro preocupante nivel diferencial de inflaci¨®n respecto a Europa.A todo esto el gobierno del se?or Aznar se llama a andana y su responsable de asuntos econ¨®micos, Rodrigo Rato, durante la interpelaci¨®n que le formul¨¦ al respecto esta misma semana, declar¨® sin ambages ante el Senado que no piensa adoptar ninguna medida al respecto m¨¢s all¨¢ de ret¨®ricas medidas liberalizadoras de choque, que fracasar¨¢n como han fracasado todas las que hasta ahora se han anunciado. Porque si no hay rivalidad entre las empresas no hay liberalizaci¨®n. Si los consumidores no disponen de m¨¢s opciones para elegir, tampoco. Y si las medidas no se traducen en un oferta mayor y a precios menores no pasan de ser un brindis al sol

Negar que la subida del precio del petr¨®leo propiciada por un c¨¢rtel como es la OPEP -que ya deber¨ªa estar sentado ante el Tribunal de la Haya por cometer al nivel de Estados delitos colusivos contra la competencia perseguibles al nivel de empresas seg¨²n las legislaciones de los pa¨ªses democr¨¢ticos- agravada adem¨¢s por la apreciaci¨®n del d¨®lar frente al euro, est¨¢ en el origen del problema ser¨ªa demag¨®gico. Situar ah¨ª toda la causalidad y negar que en la estructura interna del mercado espa?ol de hidrocarburos existe una falta de competencia efectiva no atajada ni combatida desde el ¨¢mbito y la responsabilidad del gobierno Aznar, es sencillamente inadmisible.

Y eso que el ministro Rato, y tambi¨¦n Montoro, acuciados por las circunstancias est¨¢n desmintiendo en toda regla al anterior equipo de Industria -y a su anterior titular el se?or Piqu¨¦- al empezar a admitir que hay problemas de competencia en el mercado m¨¢s all¨¢ del f¨¦rreo enroque que Piqu¨¦ hizo en torno al precio del crudo y al cambio del d¨®lar como ¨²nica justificaci¨®n de los incrementos de precios.

La Comisaria Europea de Transporte y Energ¨ªa, Loyola de Palacio, correligionaria de todos ellos y antigua compa?era de gabinete, lo ha manifestado con una claridad admirable al afirmar, que, literalmente, "el precio de los carburantes en Espa?a es incomprensible" y que no puede deberse al simple azar el hecho de todas las gasolineras tengan los mismos precios ajustados al c¨¦ntimo. Aserto que parece de lo m¨¢s l¨®gico en un sector que es un oligopolio asim¨¦trico - Repsol controla m¨¢s del 43 % de la cuota del mercado global- y en el cual el resto de empresas tiene estructuras de costes muy diferentes.

Pero es que, adem¨¢s, no puede entenderse c¨®mo se mantiene la extraordinaria estabilidad que en nuestro pa¨ªs se da en cuanto a las respectivas cuotas de mercado por parte de los principales operadores ya que, comparando cifras de 1994 con las de 1999, son casi iguales e incluso una, CEPSA, las repite exactamente, con d¨¦cimas incluso. Cuando hasta un ni?o de cuatro a?os, que alguien deber¨ªa presentar ante Aznar y Rato, sabe que en un sector en el que hubiera la m¨¢s m¨ªnima competencia din¨¢mica esto no es que no pueda ser, es que es absolutamente imposible.

El Tribunal de Defensa de la Competencia, est¨¦ril, inane y castrado administrativamente con la ¨²ltima reforma legal que hizo el PP -que a¨²n lo vincula m¨¢s a las decisiones del Ministerio de Econom¨ªa- ni est¨¢ ni se le espera. Rodrigo Rato sigue en plan de Don Tancredo: como todo va bien y crecemos mucho -desde Grecia a Irlanda, incluida Espa?a- es que lo hacemos muy bien. Pero si nuestra inflaci¨®n es de las peores de Europa la culpa la tiene el pobre Banco Central Europeo, al cual acaba de forzar una subida del tipo de inter¨¦s que va a hacer polvo el bolsillo de cuantos tenemos hipotecas en Espa?a. Pero es que si anuncian que van a bajar tarifas, como las el¨¦ctricas, la Bolsa se les desploma, Esa es la trampa saducea en la que est¨¢ cogido y nosotros, pobres contribuyentes -sobre todo por la v¨ªa indirecta en la que nos cargan el IVA sobre otro impuesto, examinen al respecto su recibo de la luz y su factura de gasolina- inmersos en sus falacias fiscales y en la incapacidad de su pol¨ªtica econ¨®mica.

Cuando un gobierno carece de autonom¨ªa pol¨ªtica para poder enfrentarse a los grandes monopolios que nos esquilman, antes p¨²blicos, ahora privados pero dirigidos por personajes como Martin Villa, nombrados nep¨®ticamente por ellos -para sacudirse la peste azul de las ¨ªnfulas centristas- y mantenidos despu¨¦s no se sabe por qui¨¦n ni por qu¨¦ -y ah¨ª acaba toda su liberalizaci¨®n- suelen pasar estas cosas. Como que paguemos una de las tarifas el¨¦ctricas m¨¢s caras de Europa, del tel¨¦fono ni hablamos y de la gasolina qu¨¦ les voy a decir: en paridad de poder adquisitivo m¨¢s cara que en Alemania. Pero Espa?a, indudablemente, va bien. Sobre todo para ellos.

Segundo Bru es senador del Partido Socialista Obrero Espa?ol