El juez no da cr¨¦dito al conductor de la furgoneta y ordena su ingreso en prisi¨®n

Pedro Mi?arro, el conductor de la furgoneta en la que viajaban hacinados los 37 inmigrantes, ingres¨® ayer en la prisi¨®n de Alhaur¨ªn de la Torre (M¨¢laga). El detenido, de 31 a?os y natural de Lorca (Murcia), declar¨® ante el juez que hab¨ªa recogido a los norteafricanos unos kil¨®metros antes de ser detenido. Mi?arro cont¨® al juez que vio a dos de ellos haciendo autoestop y que par¨® por l¨¢stima. Luego, dijo, mont¨® a los otros 35 porque aparecieron de pronto y tuvo miedo. Ni el fiscal ni el titular del juzgado dieron cr¨¦dito a esta versi¨®n.

Pedro Mi?arro, El chino, pas¨® la noche del martes en los calabozos de la polic¨ªa local de Fuengirola. A las once de la ma?ana acudi¨® al juzgado de la ciudad para comparecer ante el titular del Juzgado n¨²mero uno, Francisco Escobar. All¨ª, acompa?ado de su abogada y con la presencia del fiscal, le cont¨® al juez que hab¨ªa ido a C¨¢diz contratado por una empresa de discotecas, de la que no aport¨® m¨¢s datos, para transportar un equipo de sonido. Deb¨ªa llevarlo desde Lorca hasta C¨¢diz y, a la vuelta, fue cuando encontr¨® al grupo de inmigrantes. Seg¨²n su versi¨®n, Mi?arro pensaba tener la furgoneta alquilada durante una semana. Despu¨¦s de o¨ªr a Mi?arro, el fiscal solicit¨® el ingreso en prisi¨®n del detenido. La tesis de la fiscal¨ªa es que adem¨¢s del tr¨¢fico de inmigrantes hay, detr¨¢s de la operaci¨®n, una organizaci¨®n criminal. La abogada de la defensa pidi¨® la puesta en libertad de su defendido. Mientras el juez tomaba su decisi¨®n, Mi?arro sali¨® al pasillo seguro de su destino. Un polic¨ªa le pregunt¨® "c¨®mo hab¨ªa ido la cosa", a lo que Mi?arro contest¨®: "Pues nada, me mandar¨¢n a la c¨¢rcel". Tras diez minutos de espera, sali¨® hacia la c¨¢rcel de Alhaur¨ªn a la espera del juicio. Mi?arro se enfrenta, provisionalmente, a un delito contra los derechos de los trabajadores, castigado por el C¨®digo Penal con una pena de entre seis meses a tres a?os de c¨¢rcel y multa.

Procedimiento abreviado

Mi?arro volver¨¢ pronto ante el juez, cuando el titular del Juzgado n¨²mero siete, de guardia en el momento de su detenci¨®n en la madrugada del martes, se haga cargo del asunto. Francisco Escobar manifest¨® que, debido a que los 36 inmigrantes (todos excepto el menor de edad, que sigue en Espa?a) han sido devueltos a Marruecos, no ser¨¢ posible tomarles declaraci¨®n ante un tribunal y las diligencias ser¨¢n r¨¢pidas. Por tanto, los ¨²nicos tr¨¢mites que restan, seg¨²n el juez, son solicitar los antecedentes penales de Mi?arro y pasar a un procedimiento abreviado.

Antes de comparecer ante el juez, el detenido esper¨® unos minutos la llegada de su abogada. En esa espera, se mostr¨® muy nervioso y coment¨® a los polic¨ªas que lo custodiaban que se sent¨ªa muy mal porque llevaba varios d¨ªas sin consumir droga y estaba a la espera de alguna documentaci¨®n que le permitiera tratarse con metadona. Al llegar su letrada, ¨¦sta llam¨® a la esposa de Mi?arro, para que hiciera algunas gestiones a ese respecto.

Sin embargo, Tom¨¢s Sanmart¨ªn, el director de la prisi¨®n de Alhaur¨ªn, en donde ingres¨® Mi?arro poco despu¨¦s del mediod¨ªa, manifest¨® por la tarde que el detenido no presentaba "signos de drogodependencia" y se mostraba "tranquilo y normal". El detenido estar¨¢ un m¨¢ximo de cinco d¨ªas en el m¨®dulo de ingresos a la espera de pasar los ex¨¢menes t¨¦cnicos con el educador, el trabajador social, el m¨¦dico y el psic¨®logo de la prisi¨®n. Despu¨¦s, ser¨¢ enviado a uno de los cinco m¨®dulos de preventivos que hay en Alhaur¨ªn, probablemente al de presos reincidentes.