Los guerristas desoyen todas las llamadas a evitar la divisi¨®n del socialismo asturiano

La divisi¨®n existente en el PSOE asturiano se consumar¨¢ hoy en la C¨¢mara auton¨®mica. Los guerristas, mayoritarios en su grupo parlamentario, derrotar¨¢n con la ayuda del PP a su propio Gobierno, presidido por Vicente ?lvarez Areces, de la corriente renovadora, y sacar¨¢n adelante su Ley de Cajas de Ahorros, desoyendo los llamamientos de Manuel Chaves, Jos¨¦ Bono o Rosa D¨ªez al entendimiento. Su objetivo es obstaculizar que el sector de ?lvarez Areces se haga en el futuro con el control del partido.

Los socialistas, que gobiernan el Principado con mayor¨ªa absoluta, escenificar¨¢n hoy su ruptura. Los 15 diputados guerristas, hegem¨®nicos en su grupo, que totaliza 24 miembros, infligir¨¢n con la ayuda de los otros 15 del PP una derrota a su Gobierno, presidido por Vicente ?lvarez Areces, al aprobar una proposici¨®n de ley sobre Cajas de Ahorros a la que ¨¦ste se opone. Sus 30 votos ser¨¢n suficientes en una C¨¢mara con 45 esca?os.La llamada al entendimiento por parte del presidente de la Comisi¨®n Pol¨ªtica del PSOE, Manuel Chaves, que anteayer se dirigi¨® por escrito al l¨ªder de la federaci¨®n regional (FSA), Luis Mart¨ªnez Noval, reiter¨¢ndole que se parase la tramitaci¨®n de la ley hasta llegar a un acuerdo, no ha surtido efecto.Tampoco las cr¨ªticas a los guerristas de dos de los aspirantes a la secretar¨ªa general: Jos¨¦ Bono, que ayer los calific¨® de "disidentes", y Rosa D¨ªez, que les advirti¨® de su "grav¨ªsima responsabilidad".

Tambi¨¦n seis miembros de la comisi¨®n ejecutiva regional, 21 de los 63 secretarios locales de la formaci¨®n y alrededor de un tercio de los alcaldes socialistas de la comunidad instaron sin ¨¦xito en las ¨²ltimas horas a la convocatoria urgente de los ¨®rganos dirigentes para tratar de reconducir la situaci¨®n.

Ya es seguro que los ocho diputados renovadores afines a Areces no participar¨¢n en la votaci¨®n para no romper la disciplina de voto. Sin embargo, tanto si no acuden al Parlamento como si se ausentan en el momento en el que se efect¨²e quedar¨¢ expl¨ªcita la quiebra de la unidad socialista dos a?os despu¨¦s de las pavorosas desavenencias del PP, entonces gobernante, que abocaron al Principado a su mayor crisis institucional.

Por el control del partido

Hoy se producir¨¢ un hito. Nunca antes, en los 18 a?os en que el PSOE ha ocupado el Ejecutivo, se hab¨ªa producido una fractura tan manifiesta ni existen antecedentes de una ley tramitada por un grupo a espaldas y en contra de la opini¨®n de su Gobierno ni de la derrota de ¨¦ste por una facci¨®n mayoritaria de sus compa?eros.

Lo cierto es que la tensi¨®n entre los presidentes socialistas del Principado y el sector hegem¨®nico de su partido, guerrista, vertebrado alrededor de las agrupaciones mineras y que controla el 55% del partido, ha sido constante. La diferencia estriba ahora en la intensidad del enfrentamiento, en su prontitud -ayer se cumplieron 11 meses de la toma de posesi¨®n de Areces- y en su exhibici¨®n p¨²blica: las pugnas eran antes soterradas y se dirim¨ªan en los ¨®rganos internos.

La causa de que el sector oficial de la FSA y su Gobierno hayan llegado tan lejos en sus discrepancias obedece a que Areces, a diferencia de sus predecesores -Rafael Fern¨¢ndez, Pedro de Silva, Juan Luis Rodr¨ªguez-Vigil y Antonio Trev¨ªn-, lidera una amplia facci¨®n, por m¨¢s que est¨¦ en minor¨ªa. Los renovadores encabezan las comarcas sider¨²rgicas -Gij¨®n y Avil¨¦s-, controlan un tercio de la FSA y aspiran a dominar el partido en el futuro.

Por esta raz¨®n el control de Cajastur por Areces se ha percibido desde el grupo mayoritario de la FSA con extrema desconfianza, ya que se interpreta como el primer baluarte de poder que el presidente pasar¨ªa a dominar en su intento por hacerse con la formaci¨®n una vez que ya se hizo con el Ejecutivo. As¨ª, la ley que hoy se aprobar¨¢ arrebata a este ¨²ltimo la representaci¨®n del Principado en la Caja y la transfiere al Parlamento. Adem¨¢s, se limita el poder en la misma del Ayuntamiento de Gij¨®n, tambi¨¦n gobernado por afines a Areces, y se suprime su derecho hist¨®rico a su vicepresidencia.

El temor al control que pudiera ejercer Areces sobre la m¨¢s importante instituci¨®n financiera de Asturias explica que, tras su arrollador triunfo electoral de hace un a?o, la FSA defendiera a capa y espada y en contra de su criterio el mantenimiento en la presidencia de Cajastur de Manuel Men¨¦ndez, frontalmente enfrentado a Areces.

Men¨¦ndez, profesor universitario muy cercano a Mart¨ªnez Noval y que fue nombrado para dicho cargo a instancias suyas en febrero de 1995 por el Ejecutivo de Trev¨ªn, mantuvo desde entonces una actitud de beligerancia contra Areces, vicepresidente de la Caja como regidor gijon¨¦s que era. Incluso acab¨® expuls¨¢ndole al aplicarle seis meses antes de lo preceptivo, seg¨²n una posterior sentencia judicial favorable a Areces, el l¨ªmite m¨¢ximo de ocho a?os de permanencia en sus ¨®rganos.

Con posterioridad, en 1996, un pacto entre el PP y el PSOE dio lugar a un decreto del Gobierno popular de Sergio Marqu¨¦s suprimiendo ese tope para que Men¨¦ndez pudiera continuar en la Caja tras esos ocho a?os, pero se hurt¨® a Areces la posibilidad de beneficiarse de esa modificaci¨®n legal.

Tras llegar al Gobierno, Areces solicit¨® al partido el relevo de Men¨¦ndez por falta de confianza y de sinton¨ªa entre ambos, pero los guerristas mantuvieron su respaldo a ¨¦ste para que ejerciera de dique frente a la inocultable expansi¨®n del poder¨ªo de los renovadores. Por ello, agotada la v¨ªa del di¨¢logo, Areces aprob¨® un decreto el pasado 16 de marzo por el que se restablec¨ªa la legalidad previa al decreto Marqu¨¦s y se reinstauraba la limitaci¨®n de los ocho a?os. Eso supuso el cese inmediato de Men¨¦ndez. Los guerristas y la direcci¨®n de la FSA interpretaron esa medida como un desaf¨ªo de Areces al partido y reaccionaron con la proposici¨®n de ley que hoy se va a aprobar.

La mediaci¨®n de la Comisi¨®n Pol¨ªtica del PSOE y de sus m¨¢ximos responsables, Chaves y Luis Pizarro, el 12 de abril y el pasado lunes, han sido in¨²tiles: los guerristas aceleraron su tramitaci¨®n para que la ley se pudiera aprobar en el actual periodo de sesiones, que termina el pr¨®ximo d¨ªa 30, y antes del congreso federal de julio.