Un caso dudoso
Graham hab¨ªa sido condenado a muerte por un tribunal tejano por el asesinato, una noche de mayo de 1981, cuando ten¨ªa 17 a?os, de Bobby Lambert. El crimen ocurri¨® en las afueras de un supermercado y s¨®lo un testigo, Bernardine Skillern, una mujer afroamericana, identific¨® a Graham como el autor de los disparos que acabaron con la vida de Lambert, de 53 a?os. Pese a que estaba en el interior de su coche y a varios metros de distancia y a que era de noche, la testigo Skillern segu¨ªa sosteniendo el jueves que ella vio disparar a Graham.El ejecutado acept¨® haber cometido una docena de atracos por aquellas fechas, pero siempre neg¨® haber matado a Lambert. Graham pas¨® 19 a?os en el corredor de la muerte y su ejecuci¨®n fue aplazada ocho veces. Numerosas organizaciones norteamericanas e internacionales sosten¨ªan que no tuvo un juicio justo. La polic¨ªa jam¨¢s le encontr¨® el arma del crimen del supermercado y varios de los testigos directos del suceso negaron que Graham fuera el asesino.
Pero su abogado, de oficio, Ronald Mock, no hizo subir al banquillo del tribunal ni a uno solo de esos testigos que exculpaban al acusado y no combati¨® la debilidad de las pruebas de la defensa. Su caso pas¨® por 33 jueces antes de su ejecuci¨®n.
Con Graham, ya son 222 los ejecutados en el Estado de Tejas desde que ¨¦ste reanudara la aplicaci¨®n de la pena capital en 1982, tras el levantamiento de una prohibici¨®n del Tribunal Supremo. Le sigue Virginia, con 76 ejecuciones.
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