Mugabe acusa a la oposici¨®n de Zimbabue de ser una marioneta del Reino Unido
El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, cerr¨® ayer la campa?a electoral de su partido, la Uni¨®n Nacional Africana de Zimbabue (ZANU-PF), con un doble mitin, primero en el hist¨®rico Chinhovi, donde comenz¨® la guerra de liberaci¨®n, y m¨¢s tarde en Chibuku, a las afueras de Harare. En ambos repiti¨® discurso: la oposici¨®n "es una marioneta del Reino Unido plantada para destruir los logros del pueblo", acus¨® al Gobierno brit¨¢nico de querer dirigir los destinos de su pa¨ªs y alab¨® el papel actual de los veteranos e hizo un recorrido pormenorizado por sus 20 a?os en el poder.
Del futuro, ni palabra. Antes de terminar su parlamento, en el estadio de Chibuku, cientos de personas comenzaron a abandonar las instalaciones. Los encargados de la organizaci¨®n se desgastaban en mantener el orden e impedir la estampida. El presidente hablaba desde la tribuna, cubierta por un toldo, y la gente, unas 10.000 personas en Chibuku, se pon¨ªa en pie para dirigirse a los autobuses que los hab¨ªan tra¨ªdo o para asistir al despegue de los helic¨®pteros presidenciales. "Yo he venido a ver al camarada Mugabe", dijo una mujer como toda justificaci¨®n. A la derecha del podio, 300 miembros de la secta de los Ap¨®stoles, que visten t¨²nicas blancas y lucen la cabeza rapada, aguardaban sin inmutarse, sentados y tocados con viseras de colores del ZANU-PF. ?Va a votar al partido del presidente? Uno de ellos, barbado y sin ganas de parlotear, respondi¨®: "Estoy aqu¨ª s¨®lo para escuchar". A la izquierda, un grupo de mujeres com¨ªa naranjas y cacahuetes. Entre esa multitud, arracimada en un estadio de f¨²tbol cercado por s¨®lo tres filas de grader¨ªo, algunos entusiastas levantaban el pu?o.Mugabe, vestido a lo occidental, traje recto y corbata, s¨®lo despert¨® el entusiasmo cuando hizo referencias directas al Reino Unido ("no van a lograr el control directo o indirecto del pa¨ªs"; "Blair dirige un Gobierno de imperialistas y neocolonialistas"), cuando arremeti¨® contra el l¨ªder de la oposici¨®n, Morgan Tsvangirai, al que tild¨® de "marioneta" de Londres, o cuando proclam¨®: "Nosotros hemos tra¨ªdo la democracia y los derechos humanos a Zimbabue".
Mugabe, que maneja el escenario y el timbre de la voz con maestr¨ªa, no hizo referencia alguna a los problemas por los que atraviesa el pa¨ªs ni ofreci¨® soluciones. Sobre la ocupaci¨®n de las granjas, el presidente lo compar¨® con las acciones de una gran compa?¨ªa, y que ¨¦stas "deben ser repartidas entre todos los accionistas".
Poco antes, a las doce del mediod¨ªa, Mugabe pronunci¨® un discurso en Chinhovi, lugar clave en la imaginer¨ªa revolucionaria. All¨ª reiter¨® las mismas ideas, salud¨® a 12 granjeros blancos que hab¨ªan sido invitados y prometi¨® la victoria frente a 5.000 personas.
"Los estrategas del ZANU-PF han elegido lugares peque?os para evitar el fiasco del fin de semana", asegur¨® un periodista local. Se refer¨ªa al gran mitin en el estadio nacional hace siete d¨ªas, y al que apenas acudieron 7.000 zimbabuenses. Afuera del campo de f¨²tbol de Chibuku, decenas de autobuses se entrecruzaban en el anuncio de un gran atasco. Pocos de los presentes dec¨ªan pertenecer a esa aldea de las afueras de la capital. La presencia policial y militar era visible desde varios kil¨®metros antes, a diferencia de los m¨ªtines del partido de la oposici¨®n, que han estado desprotegidos.
Ante la agitaci¨®n de la audiencia y sus ganas de marchar, Mugabe opt¨® por recortar su palabra y finalizar con proclamas del ZANU. "Vamos a conseguir todos los esca?os", predijo Sekina, una mujer con ocho hijos, desdentada y aviejada a pesar de sus 43 a?os. ?Y la oposici¨®n? "Ellos, ninguno".
Por la ma?ana, el Movimiento para el Cambio Democr¨¢tico (MDC) trat¨® de organizar varios convoyes al noreste, a las circunscripciones m¨¢s problem¨¢ticas. De los cinco camiones, uno fue apedreado, otro secuestrado y tres se esfumaron sin dejar rastro. [Zacarias Rioga, l¨ªder del MDC tuvo que ser ingresado en un hospital de Harare tras ser apaleado por veteranos de la guerra de independencia, informa Reuters. Rioga ingres¨® en estado de coma, seg¨²n fuentes hospitalarias].
M¨¢s interventores
En un giro de ¨²ltima hora, el Gobierno decidi¨® permitir al cuerpo diplom¨¢tico acreditado en Zimbabue visitar los colegios electorales y elev¨® a cuatro el n¨²mero de interventores de cada partido por cada uno de los casi 4.000colegios. El problema es que la decisi¨®n llega muy tarde, sin transporte y con escasa capacidad de respuesta.
Los 300 observadores internacionales acreditados, la mitad de ellos de la Uni¨®n Europea, se disponen a realizar un trabajo tit¨¢nico: cada uno deber¨¢ vigilar la limpieza de un promedio de 11 colegios, que las urnas est¨¦n vac¨ªas a las siete de la ma?ana de hoy, que no se rellenen durante la noche entre el primer y segundo d¨ªa de votaci¨®n, perseguir su traslado el domingo por la noche y asistir al escrutinio. El Gobierno aspira a tener resultados el lunes, los realistas hablan del martes y los pesimistas del mi¨¦rcoles; estos ¨²ltimos son los que est¨¢n seguros de que habr¨¢ fraude.
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